Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 115 - Fue empujada por las escaleras

Capítulo 115: Fue empujada por las escaleras

«¿Qué?» Amber estaba en total shock.

Ella sabía que Makenna tenía malas intenciones hacia ella.

Pero inesperadamente, ella realmente quería que muriera.

«¿Quieres matarme?» Amber sujeto su teléfono con fuerza y deliberadamente subió el volumen.

Después de que Jared la oyera, su expresión se volvió muy fea. Salió del coche y corrió rápidamente hacia el edificio del hospital. No podía calmarse.

¡Makenna realmente quería matar a Amber!

Los ojos de Makenna se llenaron de una luz aterradora: «Señorita Reed, ¿Cómo puede decir algo como asesinato fácilmente? Su muerte fue causada por usted misma. Fue un accidente y no tiene nada que ver conmigo».

Diciendo eso, se acercó a Amber.

Nunca abandonó la idea de dejar que Amber desapareciera por completo, pero después de dejar el complejo, nunca encontró la oportunidad de hacerlo.

Ahora que se había enterado de que Amber podía estar embarazada, no podía soportarlo más. Tenía que deshacerse de ella y de ese niño antes de que su embarazo saliera a la luz, de lo contrario, todo se acabaría.

Makenna sujeto a Amber por los hombros y la empujó de las escaleras con una sonrisa macabra en el rostro.

Makenna era muy fuerte, mientras que Amber llevaba tacones altos, por lo que fue empujada hacia atrás paso a paso, y pronto llegó a la entrada de las escaleras.

«Vete al infierno». Makenna la empujó hacia atrás con la fuerza de ambas manos.

Amber fue empujada por las escaleras por ella.

Makenna se paró en la cima, miró el pánico y el miedo en su rostro, sonrió y saludó: «¡Adiós!».

Con una escalera tan alta, ella creía que Amber moriría definitivamente si se caía.

Si no, aún podría terminar el trabajo.

Sin embargo, justo cuando Amber estaba a punto de rodar hasta la plataforma inferior de la escalera, un hombre se precipitó repentinamente por las escaleras de abajo y estiró los brazos para atrapar a Amber.

El enorme impacto tiró al hombre al suelo, su espalda se golpeó fuertemente contra la pared, su apuesto rostro se retorció de dolor por un momento, y un sudor frío brotó de su frente.

Y Amber no estaba mucho mejor, tenía los brazos y las piernas entumecidas, e incluso le dolía el estómago.

Pero por suerte, ¡Se salvó!

En la cima, Makenna seguía esperando la escena de Amber muriendo en el acto, en cambio, termino viendo la escena en la que Amber se salvó.

Y lo que no podía creer era que la persona que salvó a Amber había sido Jared.

Su rostro palideció al instante y sus ojos estaban llenos de pánico.

¿Por qué está aquí?

A continuación, Jared soportó el fuerte dolor de su espalda, ayudó a Amber a levantarse y le preguntó: «¿Estás bien?».

En el momento en que Amber fue recibida en sus brazos, ya había sabido que era él por el olor del perfume que llevaba en el cuerpo. No se sorprendió. Sacudió ligeramente la cabeza mientras se sujetaba el estómago y dijo con voz inestable y temblorosa: «Estoy bien».

«Gracias al cielo». Jared dejo escapar un suspiro de alivio, dicho con un indisimulado tono de regocijo.

Cuando pensó en que si hubiera llegado un poco tarde, Amber moriría, en su corazón surgió un enorme pánico, que sería inaceptable para él.

Afortunadamente, llegó justo a tiempo.

«¿Y tú, estás bien?» Amber miró a Jared y le preguntó.

Él la salvó de nuevo.

Sus ojos brillaron ligeramente. «Estoy bien».

«¿Estás bien?» Amber no estaba muy convencida.

Le pareció escuchar sus quejidos hace un momento.

Era sólo que en ese momento estaba en un estado de pánico extremo, y no podía escucharlo claramente.

«Estoy realmente bien». Jared se esforzó por ignorar el dolor ardiente de su espalda y respondió con voz natural.

Makenna vio que los dos se saludaban, pero no tenía tiempo para los celos.

Sólo quería marcharse tranquilamente lo antes posible.

Al ver que estaba cerca a la salida, sabía que podría salir de aquí en un solo paso, sin embargo la fría voz de Jared retumbó detrás de ella: «¡Detente!» Makenna se congeló y se detuvo inconscientemente.

«¡Date la vuelta!» Añadió.

Makenna se giró lentamente, pero bajó la cabeza con miedo. No se atrevió a levantar la vista y dijo: «Jared…»

«¡Makenna, me has decepcionado!» Jared ayudó a Amber a subir desde abajo y la miró como a una desconocida: «Sé que no eres tan amable como yo. Siempre pensé que eras un poco malvada, ¡Pero no esperaba que pudieras hacer algo como matar gente!»

Sus pupilas se encogieron, y levantó la cabeza rápidamente, entonces dijo con los ojos rojos, «Jared, yo… no quiero, pero no puedo controlarlo».

«¿No puedes controlarlo?» Amber sólo sintió que había escuchado un gran chiste. «Entonces, actuar con malicia depende de si puedes controlarlo o no. Si este es el caso, entonces parece que la Señorita Gardner ha nacido siendo mala».

«Yo no…» Makenna se mordió el labio, las lágrimas caían por su rostro.

Miró a Jared y dijo: «Jared, no he nacido siendo mala. Sólo soy demasiado insegura». No sabía por qué, pero cuando Jared escuchó esto, no sólo no se conmovió, sino que incluso quiso reírse de sí mismo sarcásticamente.

«La última vez, cuando la hiciste caer, me dijiste lo mismo». Jared le devolvió la mirada.

En ese momento, incluso se sintió culpable por ella.

Pensó que no había estado a su lado, lo que la hizo sentirse insegura y hacer tal cosa, pero ahora parecía que sus sentimientos culpa se había convertido en una broma.

Makenna dejó de llorar, y un rastro de vergüenza brilló en sus ojos, que pronto desapareció. Bajó la cabeza y siguió discutiendo: «Jared, me siento realmente insegura».

«La última vez, me dijiste que estaba actuando intimiamente con Amber, y no tenías una sensación de seguridad, así que confié en ti. Pero esta vez, me he distanciado de ella, ¿De qué sigues teniendo miedo?» Dijo Jared con ojos examinadores.

«YO… YO…» Makenna se mordió el labio y retrocedió, incapaz de hablar.

Porque no podía decir de qué tenía miedo.

A Amber le seguía doliendo el estómago, y dijo con frialdad en su rostro,

«Olvídelo, Señor Farrell, la Señorita Gardner no puede decir la verdad, así que llamemos directamente a la policía. Tengo una grabación de su intento de asesinato en la mano, así que podrá ser condenada a unos cuantos años en la cárcel».

¿Grabación?

Su expresión cambió y miró a Amber con incredulidad: «¿La has grabado?».

«Sí». Amber agitó su teléfono: «Cuando me buscaste, no pudiste ocultar la malicia en tus ojos. ¿Crees que te seguiría estúpidamente sin ninguna preparación?».

Pero no esperaba que Makenna realmente quisiera matarla.

«Jared…» Makenna se asustó y miró a Jared con el rostro pálido, pidiendo ayuda.

Jared frunció sus finos labios en una línea recta y no habló.

Normalmente, siendo ella su pareja debería ayudarla.

Pero no podía decir nada, porque sabía que lo que ella había hecho esta vez había sido realmente terrible. Si aún así la protegía, sería irresponsable con ella.

Al ver que no hablaba, Makenna se decepcionó poco a poco y sacudió la cabeza con lágrimas.

Él no quería ayudarla.

¡No quería ayudarla!

Amber también estaba un poco sorprendida por su decisión.

Siempre creyó que la adoraba y que podía hacer cualquier cosa por ella.

Pero no se esperaba esto.

Amber lo miró con ojos complicados y de repente se dio cuenta de que no sabía mucho sobre él.

«Señor Farrell, ya que no tiene ninguna objeción, entonces llamaré a la policía», dijo Amber y sacó su teléfono.

Makenna vio que hablaba en serio y, presa del pánico, pensó en el método más convencional, pero también el más útil: el coma.

*¡Pum!*

Makenna puso los ojos en blanco y se dejo caer pesadamente sobre el suelo.

Tanto Amber como Jared se sobresaltaron por su repentino desmayo.

«¡Makenna!» Jared fue el primero en recobrar el sentido común, su rostro se tensó y se puso en cuclillas para comprobar su situación.

Sin embargo, tras unos primeros auxilios de emergencia, ella seguía sin despertarse.

Jared se dio cuenta de que podía estar en mal estado, la levantó y le dijo a Amber: «Por favor, no llames a la policía hasta que se despierte».

Amber no contestó, sino que entornó los ojos para mirar a la mujer que sostenía.

Las largas pestañas de la mujer temblaban. Aunque no era evidente, Amber lo captó, y las comisuras de su boca se curvaron.

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