Embarazada de una noche con el Alfa -
Capítulo 278
Capítulo 278:
Me sentía cada vez más nerviosa, pues había permanecido mucho tiempo en aquella habitación; pronto me descubrirían.
Entonces abrí una pequeña caja que estaba en el rincón más oscuro del armario y contemplé su contenido con los ojos bien abiertos: ¡allí estaba aquella reluciente pieza de joyería carmesí!
¡Por fin había logrado encontrarla!
Pero no tuve tiempo de celebrar mi triunfo, pues la puerta de la habitación se abrió a mis espaldas y un temor sobrecogedor brotó de lo más profundo de mi ser.
Punto de vista de Marco
Aunque Lily estaba tratando de ocultarlo, pude escuchar los fuertes latidos de su corazón debido al miedo que sintió cuando vio a los demás entrar.
Tanya, Claire, la familia de Vivian, incluso Eric y Oliver habían venido para reunirse con nosotros.
‘Por fin te atrapé’ eran las únicas palabras en mi mente.
Finalmente le mostraría al mundo entero la clase de persona que era.
«Estabas tratando de robar el collar de Tanya, ¿no es así? Dinos qué ibas a hacer con él, díselo a todos».
Mientras hablaba, hice un gesto con mi mano, señalando al grupo que estaba detrás de mí y haciendo que este fijara su atención en Lily.
Al principio, la mujer retrocedió ante mi acusación y pude ver cómo el pánico se apoderó de su mirada.
Sin embargo, el gusto me duró muy poco, pues a los pocos segundos su postura cambió.
Lily sacó el pecho, estaba tratando de mostrar confianza.
Seguido de eso, me miró con inocencia y dijo:
«No, ¡lo has entendido todo mal! El collar estaba tirado en el suelo y cuando lo levanté quise verlo más de cerca, lo juro».
Ella sonrió con timidez, tratando de aparentar estar avergonzada.
Pero yo ya estaba listo para sus posibles intentos de engaño.
Esa mujer no iba a ganar, no esta vez.
«Hay cámaras en la habitación, Lily, lo grabé todo».
Cuando saqué mi celular y le mostré la pantalla, su expresión cambió por completo.
Sus manos comenzaron a temblar y sus ojos se abrieron con incredulidad.
Se dio cuenta de que había caído en mi trampa.
El resto del grupo parecía estar interesado en ver el video, así que también se los mostré.
Era evidente que había estado buscando desesperadamente el collar, hurgando en todos lados mientras trataba de encontrarlo.
Procedí a entregarle el teléfono a Tanya en caso de que alguien quisiera verlo más detalladamente.
Al mismo tiempo, utilicé mi otra mano para arrojar unos documentos sobre mi escritorio, documentos que revelarían la verdad sobre Lily.
«Dime, ¿eres realmente la hija de Vivian?»
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar