El destino de Tiana -
Capítulo 68
Capítulo 68:
POV: Tiana
“Podía salir del castillo en cualquier momento y regresar cuando quisiera; a veces tardaba días, pero no le daba importancia, pensé que tenía algunos parientes fuera que visitaba”, hizo una pausa y tragó saliva.
Se notaba lo mucho que le costaba abrirse tanto, el dolor en sus ojos y su voz era perturbadora, y en verdad solo quería consolarlo…
“¿Qué fue lo que sucedió?”, susurré.
“Me engañó mientras yo estaba fuera”, dijo en voz alta, y me estremecí.
“Bueno, esa tenía que ser la primera vez, porque nunca había sentido que ella estuviera con nadie; empecé a sentir dolor y sabía que ella estaba con otro, pero cuando la llamé, me dijo que estaba sola y que simplemente se estaba dando placer porque no estaba y me necesitaba en ese momento”.
“Sin embargo, no le creí, así que envié a Thomas tras ella, pero antes de que él la pudiera encontrar, recibí una llamada diciendo que Adeline había tenido un derrame cerebral”.
“Aparentemente, ella había tomado algunas dr%gas y estimulantes se%uales que, debido a su delicada condición, desencadenaron una maldita conmoción cerebral mientras montaba el p$ne de otro hombre”, se alejó de mí con las manos empuñadas.
Se podía ver que el dolor era demasiado para él, y ahora yo estaba luchando por contener mis lágrimas.
¿Cómo alguien podría engañar a un hombre como Ryder?, ¿Cómo podría siquiera concebir la idea?, él era perfecto en todas las formas en las que uno se pudiera imaginar.
“Si no hablo de ella es porque nunca me he sentido más humillado que ese día, ¡Sabes lo vergonzoso que es que la pareja del primer Príncipe Alfa no hubiera podido controlar su v%gina y muriera siendo infiel?”, su voz ronca se escuchaba llena de dolor, y solo quería aliviarlo, así que lo abracé por detrás.
Aunque se puso rígido, no se dio la vuelta de inmediato.
“Siento mucho lo que pasó, pero se humilló así misma, no a ti, ella fue la que perdió, ni siquiera puedo pensar en cómo alguien cuerdo te podría engañar, y ni hablar de tu propia pareja”, dije.
No dijo ni una palabra, pero acarició mis manos, que estaban envueltas alrededor de su cintura, en ese momento, entendí por qué se había enfadado tanto cuando lo dejé, y por qué estaba tan enojado con Elsie por haberlo permitido.
Después de lo que había pasado, no era extraño que siempre hubiera sido tan sobreprotector.
“¿Por qué todos siguen diciendo eso?”, se burló.
Me alegré de escuchar que su voz sonaba menos preocupada, luego se giró, me miró y me acomodó un mechón de cabello detrás de mis orejas.
“Gracias por decírmelo”, le susurré.
Mirándolo a los ojos, pero él no respondió de inmediato, sino que me miró con sentimientos encontrados.
“No quiero volver a sentirme así nunca más, Tee”, me confesó.
Este era el lado suyo que siempre había esperado ver, sin importar lo duro que fuera un hombre, todos necesitaban a su pareja, pero Ryder me había hecho dudar de si realmente me necesitaba.
“No pasará”, le aseguré,
Tendría que estar loca de atar para siquiera concebir la idea de permitir que otro hombre me pusiera las manos encima.
“No soy Adeline”. Añadí.
“Lo sé”, se rió entre dientes con tristeza,
Presionó mi cabeza contra su pecho, pasó sus dedos por mi cabello y, en poco tiempo, toda su ira desapareció; levanté mi cabeza para encontrar la suya una vez más, pero no esperaba que de repente pusiera sus labios contra los míos con una necesidad ardiente.
Mi reacción fue espontánea, y pronto estábamos comiéndonos los labios como lobos hambrientos, me levantó y envolví mis piernas alrededor de sus caderas mientras me cargaba con mis labios aún contra los suyos; su dureza ya sobresalía debajo de mi trasero, y ninguno le prestó atención a los guardias y sirvientes con los que nos cruzamos en nuestro camino apresurado a su habitación.
El día que descubrí a mi lobo fue el día en que comencé a sentir cosas que nunca hubiera imaginado posibles, mi necesidad por este hombre se multiplicó por diez y creo que estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para sentir su cuerpo contra el mío.
Traté de recordarme a mí misma que tenía que ser cuidadosa, para que no se repitiera lo de la última vez, pero al igual que antes, no quedó ni una pizca de esa precaución en mi cabeza, y en lo único que podía pensar era en este ardiente deseo por él.
Me dejó caer con un poco de brusquedad sobre la cama, pero me aferré a su cuello y apreté mis piernas alrededor de su cintura, tirando de él hacia abajo conmigo; cuando él g!mió entre mis labios y comenzó a succionarlos con fuerza, me excité y mis p* zones se endurecieron aún más.
Todo mi ser ardía de deseo por él, y cuando su mano se posó sobre mi seno izquierdo y lo masajeó suavemente, gemí de placer; quería todo de él, pero me preocupaba que me volviera a rechazar.
Al final, no me importó, solo quería sentirlo dentro de mí, lo deseaba demasiado, aun cuando nunca antes había sido penetrada, pero no tenía el menor miedo: él era la persona adecuada y había deseado esto durante mucho tiempo
Estaba lista para someterme a él, lista para bailar con sus melodías, estaba malditamente lista para llevar su marca.
Tiré de su camisa y él me ayudó a quitársela, luego pasé mis dedos por su torso, maravillada por lo perfectamente esculpido que estaba su cuerpo.
“Maldición, lo que me haces sentir, mujer”, murmuró entre mis labios con una voz hambrienta.
Siempre parecía tener el control, pero en este momento no podía controlar su deseo por mí. Susan se había equivocado, sí le atraía y todo su cuerpo vibraba de deseo por mí.
Deslizó sus manos debajo de mi camiseta y mi sostén, luego colocó sus dedos sobre mis duros pezones, y g$mí mientras los masajeaba suavemente y unas corrientes eléctricas sacudían todo mi cuerpo debido a sus tiernas caricias: quería liberarme de esta maldita ropa, así que me quité la camiseta a una velocidad que incluso me impresionó a mí misma.
Entonces se detuvo para mirar atónito mi cuerpo, su mirada se fijó en mis pechos, y unos pequeños destellos de emoción y deseo brillaron en sus ojos mientras lo hacía.
“Tee”, dijo con la voz llena de pasión,
Luego apartó la mirada de mi cuerpo y me miró a los ojos, lentamente bordeó las comisuras de mis labios con sus dedos, lo cual provocó más corrientes por mi cuerpo;
Era tan guapo, y era solo mío, aunque fuera difícil de creer, realmente era mi pareja.
“Hace tiempo que estoy enamorado de ti”, sus palabras aceleraron mi corazón, y parpadeé varias veces.
“¿Qué?”, pregunté con incredulidad, esperando que no estuviera alucinando en este momento.
“Después de lo de Adeline, me prometí no enamorarme de ninguna mujer, y nunca me imaginé que tendría una segunda oportunidad de una pareja; cuando supe que eras mi segunda oportunidad, no quise que tuvieras tanta libertad como ella, e hice todo lo que pude para luchar contra los sentimientos que se estaban formando dentro de mí”, suspiró mientras sacudía la cabeza, luego me acarició las mejillas con suavidad.
“Pero fue difícil, entre más tiempo pasaba contigo, más me daba cuenta de que te necesitaba, y cuando trataste de huir..”., su voz se apagó y cerró los ojos brevemente.
Imagino cómo se sintió durante ese tiempo, pero estoy segura de que no tan mal como yo.
“No pude hacerlo, no me gusta admitirlo, pero no quiero pasar ni un día sin ti, Tee; me da igual perder muchas cosas en mi vida, pero no soportaría perderte a ti”, concluyó.
Mi corazón dio un vuelco con estas palabras que había esperado escuchar durante tanto tiempo, y mirándolo a los ojos, vi que lo decía en serio, y no pude contener una lágrima solitaria que se escapó por el rabillo del ojo. Entonces se inclinó, me besó,.
“Te amo, Tee”, murmuró
En ese momento creí que mi corazón iba a estallar, no hubiera pensado que esto fuera posible, el obstinado Príncipe se estaba mostrando vulnerable ante mí.
“La última vez te fuiste..”., iba a quejarme, pero él puso un dedo sobre mis labios.
“Necesitaba asegurarme de que no lo habías dicho en el calor del momento”, confesó.
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