El destino de Tiana
Capítulo 45

Capítulo 45:

POV: Tiana

“Si él la encuentra antes que yo, no vuelvas a esta manada, Layla, porque yo mismo te mataré sí él no lo hace”.

Layla no podía hablar, así que me encargué de colgar la llamada y apagar el teléfono de inmediato.

Los latidos de mi corazón parecían mil tambores tocando al unísono. Mi amiga estaba temblando como nunca antes la había visto

“¿Qué hacemos?”, preguntó Layla con una voz que apenas pude reconocer.

“Cálmate”, respondí con un tono extraño.

Tenía miedo, sobre todo por Layla, ya que la había arrastrado a este lio. Jordan estaba amenazando con matarla y, por lo que sabíamos, su familia ya podría encontrarse en problemas.

No me extrañaría que Jordan cometiera una imprudencia. Había sonado desesperado y aún recordaba su mirada cuando me golpeó la misma noche que me rechazó. Podría haberme matado si hubiera querido, incluso pensé que lo haría. Pero me perdonó, y ahora yo había arrastrado a Layla conmigo.

Mi amiga casi nunca tenía miedo, pero ahora estaba aterrorizada. Y yo sabía que no solo era por la amenaza de Jordan, sino por lo que el Príncipe pudiera hacerle

“Jordan me matará. Estuvo a punto de golpearme el día que me pidió tu número y me negué a dárselo”, dijo con voz temblorosa.

“Pero incluso si logro escapar de su luna, porque mis padres son miembros respetables de la manada, ¿Qué hare con el príncipe?”

Ryder era despiadado y ebrio de poder, pero no mataría a Layla, ¿O si?

A estas alturas, no sabía que pensar.

Pero si ya había enviado un equipo de búsqueda a la Manada Eclipse, y Layla se había ido el mismo día, entonces sabría que estaba involucrada. ¿Y cuánto tiempo pasaría para que la encontrara?

“¿Cuántas personas conocen tu relación con Luke?”, pregunte

“No muchas, solo mis padres”, respondió ella y tragó saliva.

“No saben que estoy aquí. Pero sí preguntan y mi mamá o mi papá les dicen..”. Su voz empezó a apagarse.

“Vendrán aquí directamente”, finalicé en voz alta.

Ahora me sentía fatal. Me dolía la cabeza después de esa llamada, incluso podía sentir que mi cuerpo se enfriaba, como si estuviera enferma. No recordaba la última vez que me había enfermado de verdad.

A pesar de todo el arduo trabajo que hacía en la Manada Eclipse, no me enfermaba a menudo, pero ahora me sentía como m!erda. Necesitaba verlo pronto, pero no me sentaría a esperar que me encontrara, ya que eso pondría a Luke y a toda su manada en peligro.

Además, me convencí a mí misma que podía estar dos días afuera.

“Tenemos que irnos”, declaré

“¿Qué?”, preguntó Layla, negando con la cabeza

“No sin decírselo a Luke”

“Me preocupan tus padres”, confesé.

Mi amiga suspiró.

“Jordan no les hará daño, solo los amenazará. Mientras no todavía no sea el Alfa, no hay mucho que pueda hacerles”

Asentí con la cabeza.

“No sabemos cuánto tiempo tardarán en rastreamos hasta aquí, pero tenemos que irnos mañana por la mañana, lo más temprano posible. Layla, tú puedes volver a la Manada Eclipse, ya has hecho mucho. Creo que puedo sobrevivir los próximos dos días por mi cuenta”

Ella lanzó una risa dramática.

“Tienes que estar bromeando si piensas que te dejaré sola. ¿A dónde irás?”

“No te preocupes, ya has sido de mucha ayuda”, murmuré.

“Odiaría tener que arrastrarte a este problema”.

Layla negó con la cabeza.

“No me arrastraste a ningún problema, niña. Yo también queria irme de esa manada, y por eso aproveché la oportunidad para verte y pasar tiempo contigo. Además, ¿Te has mirado en el espejo?”, preguntó.

Levanté una ceja perezosamente.

“¿Que tiene que ver eso?”

“No te ves muy bien, Tee. De hecho, te ves horrible. No te veías muy emocionada cuando estábamos en nuestra pequeña aventura”.

“He escuchado que las parejas no pueden mantenerse alejadas de su otra mitad por mucho tiempo, pero han pasado menos de veinticuatro horas y ya te ves como un fantasma”, comentó.

“¿Crees poder sobrevivir tres días seguidos?”, pregunto.

Lancé una suave risa para disimular, porque había estado pensando lo mismo. Sin embargo, mi orgullo no me permitida admitir que deseaba a Ryder y lo extrañaba más de lo que había imaginado. No volvería vergonzosamente con él hasta después de tres días.

“Puedo sobrevivir”, afirmé con una sonrisa.

Tuve que ignorar el dolor y sufrimiento de mi loba. Se estaba debilitando.

“Estas más apegada al príncipe de lo que te gustaría admitir”, comentó Layla secamente.

Su miedo estaba comenzando a disminuir. Había abandonado el palacio para liberarme del príncipe Ryder, pero ¿A quién quería engañar? No podía estar un minuto sin pensar en él, ni una hora sin que lo mencionara

“No estoy apegada a él, Layla, y tampoco me veo como un fantasma”, proteste.

“Solo estoy cansada porque no dormí bien”. Mi amiga resopló y, de repente, me abrazó.

“No tienes que negármelo, Tee. No soy el príncipe Ryder y tampoco te juzgaré por querer a un hombre como él. Ya sé a dónde podemos ir mañana”, agrego ella

Puse los ojos en blanco, Layla siempre tenía un plan de respaldo.

“Layla..”. Estaba a punto de quejarme, pero mi amiga puso un dedo índice sobre sus labios.

“Tal vez deberíamos irnos a territorio humano”, propuso con un guiño

“Oh, no. Eso no sería bueno. Si Ryder me encuentra…”, dudé.

“Cálmate. No te encontrará entre los humanos, y Jordan tampoco”, respondió ella con el ceño fruncido

Quiso seguir hablando cuando, de repente, sonó un fuerte golpe en la puerta de entrada. Ambos miráramos fijamente en esa dirección. Layla se giró hacia mí y luego hacia la puerta. Podía ver el miedo en su rostro.

Salté para abrir, pero ella me detuvo.

“No, quédate aquí. Debo hacerlo yo. Te están buscando a ti, así que si me escuchas gritar, puedes salir por la ventana como lo hiciste anoche y asegurarte de que no te atrapen”

“No te dejaré”, protesté

Se escuchó un fuerte golpe por segunda vez, y Layla se apresuró a abrir la puerta. Cuando me asegure de que ella estaba abajo, abrí la puerta de la habitación y agucé el oído para saber qué pasaba Acababa de notar que mi audición se había vuelto bastante aguda.

“Hola”, saludó Layla alegremente

“¿Dónde está Luke?”, preguntó una voz áspera

“Está de guardia por la noche, ¿y quién eres tú?” replicó ella

“Soy Scott, el Gamma de la manada Lucero, ¿Y tú?”, pregunto él.

“Layla, la novia de Luke”, respondió

“Oh, sí, el habla mucho de ti”, comentó Scott más tranquilamente

“¿En serio?”, dijo Layla alzando la voz.

“Siempre”, contestó él.

“De todos modos, recibimos un mensaje del príncipe Alfa”, agregó con una ligera emoción.

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