El CEO asesino
Capítulo 548

Capítulo 548:

«¡Quiero comerte otra vez!» Murmuró Alistair entre dientes.

Annabelle se quedó sin habla.

Le miró y le dijo: «¡Muy bien, date prisa y cámbiate, que vamos a desayunar!».

Alistair sonrió y la soltó con pesadez: «¿Quieres ayudarme a cambiarme?».

Annabelle se limitó a sonreír: «Espera a que te incapacites y no puedas valerte por ti mismo, ¡seguro que te ayudo!».

Suspiro. Alistair no pudo hacer otra cosa que suspirar. ¡Aquella mujer era realmente poco romántica!

Mientras pensaba en eso, volvió al dormitorio.

Annabelle se quedó en la cocina y vio cómo se marchaba. La mujer sonrió con ganas.

Annabelle, uno se encuentra con todo tipo de cosas y de personas. Sin embargo, el destino hizo que volvieras a encontrarte con el mismo hombre. De desamorada a enamorada, de enamorada a profundamente enamorada. ¿Qué más quieres en la vida?

Annabelle estaba contenta.

Estaba contenta.

Estaba agradecida.

Después de que Alistair se cambiara y saliera, Annabelle terminó de preparar el desayuno.

Cuando estaban a punto de comer, Annabelle hojeó tranquilamente el periódico que había sobre la mesa.

En cuanto vio el título, se quedó de piedra.

Cuando Alistair vio que Annabelle no comía, masticó y enarcó una ceja: «¿Qué han escrito?». Su mirada de confianza parecía como si supiera desde hacía tiempo que iba a salir en el titular.

Annabelle leyó en voz alta: «¡El presidente de Yun Rui declara su amor, proponiéndose en alto perfil durante el aniversario!».

Cuando Alistair escuchó eso, simplemente se rió y no le importó.

«¡Amante experimentado, el Presidente de Yun Rui hizo un sexy baile latino para declararse!». Annabelle continuó.

Justo antes de que Alistair quisiera decir algo, sonó su teléfono. Cuando vio el número, contestó de inmediato.

«Hola…» El hombre se llevó el teléfono a la oreja sin prisas. Incluso su gesto de contestar al teléfono era encantador.

«Alistair, ¿qué tal? ¿Estás despierto?» Preguntó Jerry Kuang.

«¿Qué te parece?» le respondió Alistair. Miró a Annabelle mientras leía el periódico con seriedad, y el hombre sonrió.

Cuando Jerry Kuang oyó su voz, enarcó las cejas: «A juzgar por tu tono, ¡no está tan mal! Parece que lo conseguiste ayer».

«¿Me llamas para que te cuente chismes?». preguntó Alistair.

«Por supuesto que no, os represento a los tres para saludaros por el sexy baile latino. Alistair, ¡tus movimientos fueron simplemente seductores!». Jerry Kuang se burló de él con displicencia.

Al oír eso, Alistair curvó los labios: «¿Sexy? Sólo estuvo bien!» dijo Alistair.

«Te conozco desde hace mucho tiempo y era la primera vez que te veíamos bailar. Qué impacto para los ojos!» Dijo Jerry Kuang.

«¡No tendréis otra oportunidad!»

«Jaja, ¿cómo fue? ¿Te gusta el titular que te di? Fue al gran yo al que se le ocurrió personalmente!» Jerry Kuang dijo, su tono reflejaba como si Alistair debería estar agradecido hacia él.

«Gracias, me gusta. Sin embargo, Presidente Kuang, yo había creado tantos contenidos para su empresa, ¿no debería darme algunos dividendos a final de año?»

Cuando Jerry Kuang oyó eso, inmediatamente argumentó: «Te di todos los titulares cada vez y di marketing gratis para Yun Rui, presidente Mu, ¡ni siquiera te he pedido bonificaciones!».

Cuando Annabelle escuchó su conversación, sacudió la cabeza con impotencia.

Los dos magnates burlándose el uno del otro por los bonos, actuando pobres y desesperados.

Qué divertido.

Siguió desayunando y leyendo el periódico.

El contenido de hoy era realmente interesante. Incluían una foto enorme de ella y Alistair. Y un primer plano especial cuando Alistair se arrodilló para pedirle matrimonio. Aunque sólo era su vista lateral, era impresionantemente guapo.

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