El camino a reparar tu corazón
Capítulo 867

Capítulo 867:

Karen, con una cálida sonrisa en la habitación del hospital, explicó: «¡Jennie estaba tan emocionada por verte a ti y al bebé que insistió en venir directamente del colegio!».

Jennie miró alrededor de la habitación, saludó a su padre y preguntó, perpleja: «Papá, Sabrina, ¿dónde está el bebé?».

En ese momento, Tyrone llamó a Jennie y le mostró la pantalla del iPad. «Jennie, ven aquí. El bebé está aquí».

«¡Es tan pequeñita!» exclamó Jennie, apoyándose en la cama mientras miraba la pantalla. «¿Por qué está en esa caja?».

«Nació prematuramente, cariño. Así que tendrá que quedarse en esta incubadora para fortalecerse».

Jennie asintió, comprendiendo hasta cierto punto. «¿Cuándo podrá salir?»

«En unos dos meses», respondió Sabrina.

«¿Dos meses? Eso es una eternidad». Jennie hizo un mohín.

«No te preocupes, Jennie. Dos meses pasarán volando», la tranquilizó Tyrone, y luego preguntó: »¿Ya has cenado? Podemos comer juntos más tarde».

«Está bien», dijo la niña, tirando la mochila en la silla y corriendo hacia la cama. Mirando a Sabrina, preguntó: «¿Estás tomando medicinas?».

«No, cariño. Estoy tomando una deliciosa sopa de pescado. ¿Quieres un tazón?» le ofreció Sabrina.

Jennie asintió con entusiasmo: «¡Sí, por favor! Huele de maravilla».

Al oír esto, Sabrina se volvió hacia la niñera. «¿Podrías traerle a Jennie un tazón de sopa?».

«Claro».

Como la habitación no tenía cocina, Tyrone pidió la cena para él y la niñera en un restaurante cercano.

Después de cenar, Jennie hizo una pequeña rabieta antes de marcharse con Karen.

Mientras la niñera se fue a casa a descansar, la nueva niñera, Lily, llegó para cuidar de Sabrina.

Al día siguiente de la operación de Sabrina, Aylin vino de visita con regalos. También era la madrina del bebé.

Dos días después de la operación, Sabrina se encontraba mucho mejor.

Cuando Tyrone les contó a Wanda y Claire la llegada prematura del bebé, corrieron al hospital a verlas y vieron al bebé en el monitor.

Sabrina ya podía andar mejor.

Después de cenar, Tyrone la acompañó por el pasillo.

Cuando volvieron a la habitación, la ayudó a quitarse el abrigo y lo colgó en un gancho cercano.

Mientras caminaban lentamente por la habitación, Sabrina preguntó: «¿Hoy no viene Lily? ¿Se ha retrasado por algo?»

«Le pedí que viniera más tarde», contestó Tyrone.

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