El arte del sexo
Capítulo 78

Capítulo 78:

Ella ensancha la mirada puesto que pensó que su jefe era muy astuto, como se enteró que había ido a la clínica y que se encontró con Gael el doctor.

– Lo siento, es que yo tuve que…

– ¿Entonces, es cierto? -pregunta furioso tomándola por los brazos -. Te fuiste a ver con él -Michele aprieta la mandíbula al escuchar que ella le confirmaba sus sospechas -. Como te atreviste a meterte con él. ¿No te quedaron claras mis reglas?

Daviana se asusta un poco puesto que no esperaba que él reaccionara de esa manera solo por ir a ver a su hermano y encontrarse con el doctor.

– No hice nada malo, ¿Por qué me está tratando de esta manera? -ella se suelta y se aleja un poco de su presencia.

– ¿Me quieres ver la cara de idiota? ¿Es eso?

– Él vuelve acercase a ella furioso -. He estado cabreado desde que salí de la maldita oficina, pensando en lo que estabas haciendo con él. Y ahora me sales con que no hiciste nada malo, no me jodas Daviana.

El pecho de la castaña subía y bajaba con fuerza ante las palabras de ese pelinegro cabreado, aparte de sentirse temerosa por su actitud también estaba molesta.

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– ¿Qué quieres decir?

– Sabes muy bien lo que quiero decir, ¿te acostaste con él?

– ¡¿Qué?! -en ese momento sí que estaba asombrada por la acusación.

– ¿Qué si te acostaste con Connor? -Michele la sujeta de los hombros para mirarla fijamente a la cara.

Estaba estupefacta.

– ¿Qué dice? -Contesta con voz baja.

– ¿Lo hiciste? -zarandea un poco su cuerpo a lo que ella reacciona.

– Por supuesto que no -se suelta de sus garras y termina por alejarse de él -. ¿Te volviste loco?

¿Cómo se te ocurre decir una barbaridad como esa?

Ella lo mira furioso, ahora si estaba muy enojada con él.

– ¿Por qué dice algo tan horrible como eso?, yo jamás me he acostado con su hijo Connor.

En eso recuerda aquella escena en la oficina del joven y se siente un poco asqueada por lo que ese hombre estuvo a punto de hacerle, y ahora venía el padre a reclamarle que si se había acostado con ese degenerado.

– La pelirroja me lo dijo, ella me contó que los pillo en su oficina. Así que me vas diciendo a dónde demonios fuiste con el idiota de mi hijo.

Ella niega varias veces intentando entender lo que estaba pasando, no se podía creer que Michele creyera que ella se había acostado con su hijo. Entregarle su virginidad no le dice nada de su vida, ¿cree que era una cualquiera?

– ¿Crees que soy una cualquiera? ¿Piensas que me acuesto con quien sea? – Te has ido rápido, y Connor también se largó con la misma prisa que tú. Entonces explícame porque demonios hay tanta coincidencia entre sus salidas.

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