Capítulo 43:

«Entonces deberías conocer primero a la persona con la que te acuestas. ¿Por qué bebiste tanto esa noche?» preguntó él.

«Porque no había tenido un buen día.»

«¿Haces eso todas las noches cuando no tienes un buen día?» preguntó él.

«¡Por supuesto que no!» respondió rápidamente. «Nunca he hecho eso, y ni siquiera sé por qué lo hice. Ya te dije que me arrepiento amargamente.»

«¿El hombre con quien me comparaste, quién era? ¿Un antiguo novio?» preguntó.

«No», rió ella, sintiéndose tonta por gustar de una persona con la que nunca había tenido una relación.

«¿No quieres contarme?» insistió él.

«No creo que deba hablar de asuntos personales con mi jefe.»

«Estamos en la hora del almuerzo, ¿qué importa? No tengo ganas de hablar de trabajo, es aburrido.»

«Y yo no tengo ganas de hablar de mi vida», respondió ella.

«Está bien, espero que superes a Mateo», una leve sonrisa apareció en los labios de él.

«No olvidas el nombre, ¿verdad?», dijo ella.

«Tengo una buena memoria…», dijo él, llevando un vaso de jugo a sus labios.

Después de regresar a la oficina y terminar su día de trabajo, Sofía esperaba a Kate para que ambas pudieran irse juntas a casa. Como la empresa no quedaba tan lejos de donde vivían, solían irse caminando.

«¿Cómo fue tu día? Me sentí tan estresada hoy», se acercó Kate diciendo.

«Normal. Estar estresada ya se está volviendo común para mí, especialmente trabajando para Ethan», respondió Sofía.

«Hablando de eso, ¿por qué saliste a almorzar con él? ¿Acaso le contaste algo?» preguntó Kate, curiosa.

«¡Por supuesto que no!»

«Menos mal… amiga, dije que tenía algo que contarte, ¿verdad?»

«¿Qué era?»

«Descubrí que Ethan tiene una novia y que pronto le pedirá matrimonio.»

«¡Ah! ¿Eso era lo que ibas a contarme?» preguntó sin interés.

«Pensé que te sorprenderías más.»

«Me sorprendí cuando lo supe, pero no había mucho que decir, ya que tuve que conocerla personalmente hoy.»

«¿Cómo es eso?» Kate se detuvo en medio de la calle, con cara de sorpresa.

«La fui a buscar al aeropuerto hoy.»

«¿Por qué te mandó él? ¿Acaso ese idiota está intentando hacerte algo?»

«¡Claro que no! Me envió porque simplemente soy su secretaria.»

«Aun así, ustedes durmieron juntos, no deberías ir a buscarla.»

«¿Incluso tú, Kate?» dijo sin paciencia. «¿Cómo es eso? ¿Qué hice?»

«Amiga, deja de recordarme que dormimos juntos, ya es suficiente que lo hagas todo el tiempo.»

«¿Todavía habla de esa noche contigo?»

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