Destinos entrelazados – Mi bebé es hijo del CEO
Capítulo 42

Capítulo 42:

«¿No te dio celos?» preguntó en tono de provocación.

La pregunta de Ethan la tomó por sorpresa y no entendió por qué él estaba planteando eso.

«¿Por qué debería sentir celos?»

«Pensé que te molestaría saber que tengo una novia y, más aún, tener que ir a buscarla por mí.»

«No hay razón alguna para que sienta celos y, para ser sincera» era hora de provocarlo también, no podía dejarlo tener la ventaja en la situación «ya sea coincidencia o no, mientras esperaba a su novia, terminé encontrando a alguien que realmente quería ver.»

Su confesión dejó a Ethan intrigado.

Era un error decir eso, ya que no le gustaba la idea de ver a Mateo de nuevo, pues temía que sus sentimientos volvieran, especialmente ahora que estaba embarazada de otro hombre. Sin embargo, las provocaciones indirectas de Ethan la ponían nerviosa; parecía que siempre quería demostrar que tenía el control de la situación, como si fuera el chico guapo. No es que no lo fuera, pero ella no sentía nada por él, así que debía hacerle saber eso.

«¿Entonces tu viaje no fue en vano?» preguntó, acomodándose en su silla.

«Por supuesto que no», respondió ella riendo. «Me encantó haber ido, siento que fue algo del destino.»

«¿Destino?» rió él. «Qué tontería.»

«¿No crees en eso?» le preguntó ella.

«Creo que es una pérdida de tiempo esas cosas», respondió él.

«Yo creo que sí. A veces pienso que hay personas que están destinadas la una a la otra y terminan encontrándose en el momento adecuado», dijo ella, con los ojos brillantes mientras lo decía, recordando a Aurora y Oliver, que parecían estar destinados el uno al otro.

«¿Estás diciendo que fue obra del destino que pasáramos la noche juntos y luego nos encontráramos en la empresa?» preguntó él con ironía, quitándole la sonrisa y el brillo de los ojos.

«¿Otra vez este tema?» preguntó ella.

«Solo estoy tratando de demostrarte que esa cosa de destino no existe, nadie tiene su camino trazado por nada.»

«Independientemente de lo que digas, prefiero creer. Y para ser honesta, usted sabía quién era yo esa noche y simplemente hizo lo que hizo a propósito.»

«Pero me gustó», admitió ella.

«¿Qué?»

«Si no fueras una mujer atractiva y no llamaras mi atención, nunca habría hecho eso.»

«Creo que es mejor que comamos en silencio.»

«¿Por qué? ¿Mi elogio no te hace sentir mejor?»

«Para nada. Usted no debería tocar más ese tema, sabiendo que tiene una novia.»

«Ya te dije que todavía no estamos comprometidos.»

«Pero son novios, la responsabilidad emocional es la misma», dijo ella, haciendo que él se quedara en silencio por un momento, observándola. «Me siento muy avergonzada, especialmente ahora, sabiendo que salí con una persona que ya está comprometida.»

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