Destinos entrelazados – Mi bebé es hijo del CEO
Capítulo 27

Capítulo 27:

Cuando Kate vio a Sofía salir rápidamente, corrió detrás de su amiga para entender qué pasaba. Hasta ese momento, no había visto al director, ya que estaba demasiado concentrada en los caballos en la pista.

“Oye, ¿a dónde vas?” preguntó, cuando logró alcanzarla.

“Me voy a casa, este no es el tipo de lugar que me distraiga.”

“Entonces iré contigo, solo déjame despedirme de los chicos,” dijo Kate.

“No es necesario,” respondió Sofía. “No arruines tu día por mi culpa, solo quiero ir a casa y dormir un poco.”

“No quiero que vayas sola,” insistió.

“No te preocupes por mí, sé cuidarme, aprovecha tu cita.”

“Pero… ¿y Tyler?” preguntó.

“Él no es mi tipo y aunque lo fuera, no podría intentarlo.”

“Deja de decir eso, amiga, ya te dije que…”

“Para, por favor,” pidió, interrumpiendo a Kate. “Soy yo quien no quiere, ¿está bien? Ahora mi preocupación es otra, no me arriesgaré a tener una relación, todo lo que quiero es cuidar a este bebé.”

“Pero… Sofía.”

“Vuelve al palco y diviértete, por favor. Me sentiré culpable si arruino tu cita,” reveló.

“¿Estás segura de que eso es lo que quieres?”

“Sí, sí, no te preocupes.”

Abrazó a su amiga, despidiéndose de ella. Al salir del hipódromo, esperaba que pasara un taxi para ir a casa.

“¿Realmente vas a dejar a tu pareja en la cita y te vas?” Ethan se acercó a ella, preguntando.

“¿Tú de nuevo?” hizo una mueca de disgusto.

“Si fue por mi culpa, te pido que vuelvas, no diré nada más.”

“No es por tu culpa,” respondió. “No te creas tan especial.”

“Entonces, ¿por qué te fuiste y te despediste de mí en lugar de despedirte de tu acompañante?” Realmente, estaba tan estresada que se fue sin decir una palabra a Tyler, ni siquiera por educación.

“Después le pediré disculpas a él.”

“Creo que las cosas no son como yo pensaba,” dijo Ethan.

“¿Qué quieres decir con eso?” preguntó ella, confundida.

“Creo que quien no estaba interesada en la cita eras tú.”

“Vaya, tenemos aquí a un Sherlock Holmes.” Se burló, provocando una sonrisa sarcástica en los labios de él.

“¿Te vas a casa?” preguntó él.

“¿Por qué quieres saber? ¿Acaso me vas a ofrecer un ride?” ironizó.

“En realidad, sí,” dijo él, haciendo que ella lo mirara con incredulidad. “Necesito saber qué pasó ayer, ¿por qué no me lo cuentas mientras comemos algo?” sugirió Ethan.

“No, gracias, todo lo que quiero es olvidar lo que pasó ayer,” comentó ella, ignorándolo, al ver que se acercaba un taxi. “¡Taxi!”

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