Destinos entrelazados – Mi bebé es hijo del CEO
Capítulo 24

Capítulo 24:

“Eso suena interesante. Hice mi residencia con algunos mexicanos aquí en Estados Unidos hace unos años, terminé haciendo amistad con dos de ellos.”

“¿Quiénes son?” preguntó curiosa, tal vez podría conocer a algunos de ellos.

“Uno se llama Diego Medina y el otro Mateo Flores.”

Escuchar su nombre hizo que su corazón se acelerara. Aunque intentara olvidarlo, cuando escuchaba algo sobre él, sus sentimientos volvían a surgir. Sentía que nunca podría olvidarlo.

“Yo era secretaria de Mateo,” confesó.

“Este mundo es realmente pequeño,” dijo él. “¿Sabías que Mateo viene a pasar una temporada aquí en Estados Unidos?”

“¿En serio?” preguntó incrédula.

“Sí, vamos a supervisar la especialización de algunos residentes en Nueva York. Cuando llegue, podríamos reunirnos para cenar, ¿qué te parece?”

La idea de volver a verlo después de tantos años la dejó un poco nerviosa. Sabía que lo que sentía por él aún estaba vivo, y sentía que volver a verlo podría hacer que ese sentimiento regresara con más fuerza.

“Bueno, creo que tendré una agenda bastante ocupada de aquí en adelante, tal vez no podamos encontrarnos,” dijo, tratando de evitar ese encuentro.

“Él estará por aquí bastante tiempo, creo que tendrá tiempo para organizarse y encontrarse contigo,” insistió Tyler.

“Sí, tal vez,” respondió.

Aunque no tuviera la intención de verlo, no diría nada en ese momento. En el futuro, cuando él planeara ese encuentro, ella inventaría una excusa. Lo último que quería era ver a Mateo, aún más cuando su barriga estuviera tan evidente. Los caballos en el hipódromo estaban en posición, y las sillas en el palco comenzaban a llenarse.

“¿En cuál apostaste?” preguntó Tyler.

“En ninguno, una vez más, solo vine para acompañar a mi amiga.”

“¿No te parece aburrido que tu amiga empiece a salir con alguien? Digo, ¿no crees que sería más interesante si los dos empezáramos a salir como pareja de ahora en adelante?”

Ella entendió la jugada de Tyler. No podía negar que era muy guapo y parecía muy interesante, sin embargo, no iba a arriesgarse en una relación. Primero, porque no quería contarle a nadie sobre su embarazo, y luego, tendría muchas cosas en qué preocuparse de ahí en adelante, y una relación no estaba en sus planes tan pronto.

“Creo que todo tiene su momento para suceder, estoy feliz por mi amiga, independientemente de si salimos como pareja o no.”

“¿Tú tampoco estás buscando una relación?” preguntó él.

“Bueno…” Ella hizo una pausa antes de continuar. “Siempre he querido tener a alguien a mi lado para compartir momentos, pero últimamente he dejado de creer en eso.”

“No puedes dejar de creer, eres joven, hermosa, hablas bien, estoy seguro de que estás llena de pretendientes.”

“Aquí está el problema, no tengo ningún pretendiente,” reveló.

“Eso me hace feliz, ¿sabes?” dijo Tyler.

“¿Por qué estarías feliz por eso?”

“Porque significa que no tengo que competir con nadie por tu corazón.”

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