Destinada a amarte -
Capítulo 6
Capítulo 6:
Llego a la sala de descanso del edificio, mi pierna se mueve de arriba abajo mientras miro el café al frente de mí. La rabia en mi interior no me deja pensar con claridad.
“Debería de llamar a mis ex”, menciono para mí, pero, declino eso… todos me enviarían al infierno.
Tengo que buscar uno que esté listo para casarse y me acepte con todo y mi hijo que tiene un padre el cual desconozco su identidad Si mi plan falla y se me acaba el tiempo ¿Qué haré? Me cuestiono, sosteniendo mi cabeza.
De repente alguien se sienta al frente de mí, levanto la mirada para encontrarme con los ojos avellanas de Jade, tiene una sonrisa enorme y me sorprende verla en este lugar.
“¡¿Qué haces aquí?!”, pregunto emocionada para levantarme y abrazarla con fuerza.
“No podía dejar sola a mi mejor amiga, además… volver a la ciudad donde sucedió todo me hizo pensar que necesitas de mi compañía ¿Me tienes buenas noticias?”, dice y dejo salir un suspiro, invitándola a sentarse.
“Será mejor que pidas unos Cosmopolitan”, propongo.
“¿Tan grave es?”, cuestiona alzando su brazo para pedirle el camarero que sirva dos cocteles.
Suelto un resoplido para comenzar a explicarle todo a detalle.
“¡Esos malditos!”, gruñe en cuanto termino.
Sostengo el Cosmopolitan bebiéndolo por completo.
“Eso mismo dije”, espeto quedándome sin ideas para conseguir un esposo
“¿Conoces a algún empresario que se quiera casar conmigo?”, oigo con una sonrisa cansada.
“Muchos se quieren casar contigo, solo que, dentro de la sociedad es todo un proceso… es un negocio oscuro”, expresa y ruedo los ojos.
“Tendré que buscar un vagabundo y casarme con él”, espeto ya rindiéndome.
“¡No digas eso!”, suelta sacando su celular de su lujoso bolso Hermes.
Arrugo mi cejo mirándola en su concentración.
“¿Qué haces?”.
“Estoy creándote un perfil en una aplicación dónde hombres y mujeres buscan con quién casarse, tal vez haya un desesperado como tú en este lugar”, dice con una sonrisa.
“Gracias por lo de ‘desesperada’”, comento y ella ríe.
“No te desanimes, eres Valeria Morat, una Diosa inteligente de ojos celestes. Encontrarás un esposo en menos de lo que canta un gallo… creo que así se dice”, declara apuntándome con la cámara de su celular.
“Dame una buena pose, seduce a la cámara”, acota y le hago caso en medio de risas.
Alza su copa con la mía y bebemos unos Cosmopolitan más. De repente mi celular suena con una notificación, arrugo mi cejo al ver que quien me envía un mensaje es Akim Baker… mi ex prometido.
“¿Qué sucede?”, pregunta Jade.
“Akim me envió un mensaje, invitándome a un concierto ¿Cómo supo que estaba en la ciudad?”, digo encarándola.
Ella encoje los hombros y es muy mala mintiendo.
“¡Jade!”, exclamo al darme cuenta que fue ella.
“Al parecer no está casado con la odiosa de tu hermanastra y hace unos minutos le notifiqué que estabas en la ciudad… acepta, tienes que vivir, eres madre al cien por ciento y Zayn te lo agradecerá cuando sea grande”, expresa bebiéndose su coctel.
Se levanta de un salto.
“Vive, Valeria. Lo que tenías con Akim no tuvo un cierre y ve a menear un poco el trasero, quien quita y un polvo te ayude a liberar al estrés”, menciona al ver mi rostro renuente.
Dejo salir un resoplo levantándome del asiento.
“Eres un peligro con ese celular”, digo y ella ríe.
“Gracias, jade”, comento con sinceridad.
“Soy la mejor. Lo sé”, declara meneando su cabellera.
“Lo digo en serio, por todo, no estaría viva si no”.
“También te quiero, ahora vamos a tu hotel, escogeré un lindo atuendo para ti y te despedirás del revoltoso de Zayn”, interviene, asiento dándole una sonrisa para entrelazar su brazo.
Ella paga los tragos con la tarjeta azabache de la familia Harrison y nos subimos al auto que nos esperaba a las afueras del edificio, su guardaespaldas Gideon la admira como siempre, como si fuera la única mujer en el planeta tierra.
Me inclino hacia Zayn para llenar su rostro de besos mientras él ríe.
“Pareces princesa mami”, menciona con dulzura.
“Gracias mi pequeño príncipe”, digo alzándolo en mis brazos para abrazarlo con fuerza.
“Ya deberías de irte, Gideon te llevará al lugar”, comenta Jade apresurada al ver la hora.
“Te amo ¿Ok? No hagas que la tía Jade se vuelva loca y no estés saltando en las camas pensando que vuelas”, expreso al pequeño de ojos azules.
Él asiente y espero que no enloquezca más a mi amiga.
Nunca habían estado solos tanto tiempo. Dejo a Zayn en el suelo para mirar a jade.
“Ya vete, no te preocupes, Zayn y yo hacemos un buen equipo… pediremos papas fritas, hamburguesas y veremos películas hasta dormir”, expresa.
“No les des dulces, luego se cree Superman y no podrás con él”, digo, ella me hace una seña militar burlona y beso su mejilla para ser empujada por ella hacia la puerta de la habitación de hotel.
Bajo del ascensor y busco con mi mirada a Gideon en la recepción. Alzo mi brazo cuando él me ve. De repente; el mismo hombre que perturbó mis sentidos aparece con su traje de tres piezas, se denota imponente y mis sentidos parecen alterarse. Camina como si flotara y tiene una mano metida en el bolsillo.
‘Ya dos veces es mucha casualidad’, él pasea sus ojos por mí y luego los retira ignorándome por completo. Me quedo sin habla mientras que él parece ni inmutarse por mi presencia.
‘Idiota egocéntrico’, pienso y sigo mi camino para verle subir a un auto que le esperaba. Gideon me saluda.
“¿Todo bien?”, pregunta, pestañeo ya que aquel hombre me había enviado a flotar en órbita nuevamente.
Asiento subiéndome al auto. Miro la pantalla de mi celular para leer el último mensaje de Akim, donde dice esperarme con ansias.
Él se convirtió en un empresario e inversor de renombre, está comenzando con el negocio de la música, representando a una banda nueva que parece ya sonar en las estaciones de radio.
Me ha invitado a uno de los conciertos más importantes ya que será en un lugar importante para los artistas, comienzo a cuestionarme qué conseguiré de todo.
El auto se detiene, y bajo de él despidiéndome de Gideon quien me pasará a buscar cuando culmine el concierto.
Camino a la entrada donde están amontonadas las personas y el de seguridad pregunta por mi boleto, le muestro mi pantalla donde está la foto que me envió Akim con el QR y me dejan entrar al área VIP del lugar.
Me introduzco entre las personas el olor a tabaco, alcohol y perfume inundan mis fosas nasales y comienzo a respirar con exaspero.
Mi corazón se acelera en un estallido cuando la tarima se ilumina de luces y la música empieza a sonar con fuerza. Leo el nombre en las pantallas led ‘The Blackstone’ el vocalista se posa al frente del micrófono y el baterista golpea la batería.
No puedo explicar lo que está sintiendo mi cuerpo en este momento, son tantas emociones juntas y me siento como una adolescente observando a sus músicos favoritos.
Una sonrisa se plasma en mis comisuras y la música inunda el lugar con letras lascivas, las tonadas son sensuales y muy sugestivas. Todos a mí alrededor las corean con tanta emoción y podría jurar que es como si ellos lanzaran feromonas porque me comienzo a calentar.
Mi pecho sube y baja provocándome jadeos, deslizo mi vista a una mirada que me observa de lejos para encontrarme con los ojos verdes de Akim, quien tiene una cámara en sus manos, con una sonrisa seductora la apunta hacia mí.
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar