Déjeme ir, Señor Hill
Capítulo 2717

Capítulo 2717:

«Quizá a mí también me pasa algo. ¿No están todos desesperados por conseguir dinero? En ese caso, os criticaré e insultaré. Todos los días tengo mucho estrés en el trabajo, al tener que operar y dirigir una empresa tan grande. Además de presionarme más, mis padres se quejan de mí y me echan la bronca.

Por eso, digo lo que se me pasa por la cabeza. No oculto las cosas. Seguro que todos me han maldecido a mis espaldas, pero no pasa nada. No me importa porque estoy agotada e incómoda, así que nadie debería sentirse feliz también».

“…”

En ese momento, Charity no supo qué decir.

Nunca había oído hablar tanto a Chester ni en su vida anterior ni en la actual.

Llegó a la conclusión de que la personalidad de Chester se había vuelto extrema probablemente después de que rompiera con ella.

Además, era el que más se relacionaba con mujeres del mundo del espectáculo.

A decir verdad, era fácil ganar dinero en la industria del entretenimiento, pero el ambiente era muy turbio. Independientemente de que fueran hombres o mujeres, mucha gente se había olvidado de ser fiel a sí misma a causa del dinero, la reputación y el estatus.

«Pero éstas no deberían ser las razones por las que me forzaste».

Charity dijo fríamente: «Puesto que no me gustabas, no deberías haberme obligado. Además, soy amiga de Charity. ¿No deberías tener una base moral? Espera, ni siquiera tienes una».

«Eliza, no pretendía forzarte. Lo hice porque te resististe mucho a mí cuando te perseguía».

Una mirada conflictiva apareció en el elegante rostro de Chester.

«Por un lado, puede que se trate de la naturaleza malvada innata del hombre. Cuanto más me rechazas, más te deseo. Por otra parte, no puedo evitar pensar en… Charity cuando te veo. »

Charity tembló y, por un momento, sintió que la sangre le fluía hacia atrás.

«De algún modo, tus ojos me recordaron a los de Charity la primera vez que te vi. Se parecen mucho a los de ella». Chester la miró a los ojos seria e inquisitivamente. «¿No te diste cuenta de que disfrutaba sobre todo mirándote la nariz y la boca cada vez que estábamos en la cama?».

De repente, Charity sintió como si su mente volara en pedazos.

Creía que Chester odiaba su cara, pero resultó que la tomaba por Charity.

No. Ella era Charity.

De hecho, era distinta de Eliza.

Sin embargo, los ojos de una persona estaban estrechamente vinculados al alma, y por eso Chester encontraba sus ojos similares.

Charity podía sentir una sensación de amargura que la asfixiaba.

Parecía como si Dios le estuviera gastando una broma.

Antes de morir, siempre se había preguntado por qué Chester la odiaba tanto y la pisoteaba así.

Sin embargo, murió y empezó a vivir en el cuerpo de Eliza, sólo para que Chester dijera que era porque sus ojos se parecían a los de Charity.

«Charity está muerta. Ya estaba muerta cuando la enviaste a la cárcel».

Charity hizo todo lo posible para que su cuerpo dejara de temblar y enunció: «No soy Charity, así que deja de molestarme».

«Tienes razón. No eres Charity». Chester asintió mientras se levantaba y caminaba lentamente hacia ella.

«Pero tampoco sé por qué estoy aquí. Tenía muchas ganas de matarte cuando estaba en la cárcel, pero cuando apareciste en la sala de reuniones de la Corporación Jewell como Reborn, me quedé bastante sorprendido y emocionado. ¿Entiendes lo que siente un lobo cuando ve a su presa? Eliza, hacía mucho tiempo que no me sentía así».

«Creo que nunca he conocido a una mujer como tú, aparte de Charity». Chester dejó de ocultar sus emociones. «Yo tampoco tengo ni idea de por qué te deseaba tanto».

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