Cuando sus ojos se abrieron
Capítulo 527

Capítulo 527:

En las oficinas del Grupo Sterling, Chad se sentó en el despacho de Ben con una taza de té.

«¡Hacía tiempo que no estaba el Señor Foster tan contento!» Chad se rió.

«Hice guardia en las puertas de su oficina a propósito y le vi traer una enorme bolsa de fruta y bocadillos. ¿Puede Avery comerse todo eso? ¡Jajaja!»

«¿Avery finalmente entró en razón? ¡Las mujeres son tan difíciles de entender!» dijo Ben con las cejas fruncidas.

«¿Podría ser porque Zoe Sanford y Cole Foster se juntaron?» Chad adivinó. «Aparte de eso, no se me ocurren otras posibilidades».

«Esperemos que sea así». Ben levantó su propia taza de té y chocó las tazas con Chad.

Avery se detuvo frente al edificio del Grupo Sterling media hora después.

Después de su pequeña sesión de té con Ben, Chad había estado esperando en la entrada del edificio.

Cuando vio el Rower de Avery, corrió inmediatamente hacia ella.

Avery bajó la ventanilla al ver que Chad se acercaba y le dijo: «Chad, el aparcamiento está lleno. Voy a buscar un sitio para aparcar fuera».

Chad sonrió y dijo: «¡Puedes aparcar en cualquier sitio en este enorme lugar de aquí! También está bien aparcar el coche en la entrada». Avery estaba desconcertada.

Chad agitó la mano y le indicó: «¡Aparca justo aquí!».

«¡Eso no es un aparcamiento!»

«¡Está bien! Todo este terreno pertenece al Señor Foster. Puedes aparcar donde quieras». Chad le dijo. «¿O puedes bajar y yo puedo aparcar tu coche por ti?».

Avery sacudió la cabeza avergonzada y dijo: «Está bien. Lo aparcaré yo misma».

Aparcó el coche, abrió la puerta y se bajó.

«¡Está usted muy hermosa hoy, Señorita Tate!» Chad la halagó sinceramente.

Avery llevaba una camisola de flores con una falda ajustada a juego.

El atuendo mostraba su piel de marfil y su esbelta figura, haciéndola lucir se&y y hechizante.

Chad temía que Elliot no pudiera contenerse en cuanto pusiera los ojos en ella.

Avery sintió cierto pesar.

Sólo venía a ver a Elliot, así que ¿Por qué se había tomado la molestia de cambiarse especialmente de ropa?

Acababan de conocerse el día anterior, y no es que no pudieran verse todos los días.

¿Qué pensaría la gente de que se presentara en su lugar de trabajo vestida así?

«Yo…» Avery quiso explicarse.

«Hace calor aquí fuera, Señorita Tate. Démonos prisa en entrar. El Señor Foster la ha estado esperando».

Chad le indicó el camino con una sonrisa.

Avery le siguió directamente hasta el despacho del presidente de la empresa, en la última planta del edificio.

«¡Entra! Los dejo a ustedes dos». Chad condujo a Avery hasta las puertas del despacho de Elliot, y luego se despidió astutamente.

Avery llamó a la puerta y luego la empujó para abrirla.

Cuando sus ojos se encontraron con los de Elliot, saltaron chispas al aparecer diferentes tipos de sorpresa en cada uno de sus rostros.

Avery vio a Elliot sentado en el sofá, y estaba pelando uvas.

El plato de la mesa que tenía delante estaba lleno de uvas peladas.

La miró sorprendido mientras su manzana de adán se balanceaba en su garganta.

«¿No tienes frío vestida así?».

Avery se obligó a inventar una excusa y dijo: «Las embarazadas se calientan con facilidad».

Elliot se limpió las manos con una servilleta húmeda, luego se acercó a ella y la condujo a la habitación.

«Recuerdo que te gustaban las uvas, así que te he pelado algunas», dijo mientras la sentaba en el sofá.

El aire se llenó de una seductora mezcla de su colonia y la fragancia de las uvas.

Avery cogió una uva con inquietud y se la metió en la boca.

«¿Qué tal?» Los profundos ojos de Elliot observaron su recatado rostro con expectación.

Su mirada hizo que Avery se sonrojara y una repentina oleada de coraje surgió en su interior.

Alargó la mano para rodear la nuca de él y plantó sus labios rojos en los fríos y finos labios de él…

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