Contigo -
Capítulo 52
Capítulo 52:
POV: Rodrigo.
Un día el Señor Harper me cito en su oficina y me preguntó cuáles eran mis intenciones con su hija porque el así se dirige a Ester como su hija.
Le expliqué que aún nos estamos conociendo y se mostró complacido, voy a ganármelo, si el confía en mí no me será difícil adueñarme de esta empresa.
Él puso a Ester a trabajar en mi departamento bajo mi mando y me pidió que le enseñará todo, estoy seguro de que planea dejarla enfrente de la empresa.
Pasé mucho tiempo con Ester a veces me parece una mujer muy superficial y como toda niña rica es mimada.
La he manipulado para que haga algunos movimientos en la empresa a mi favor y ella no duda, siempre hace lo que le pido, obviamente la recompenso en la cama, aunque no le he pedido que seamos nada serio.
La haré mi esposa cuando el Señor Harper le entregue el poder y después yo seré el dueño de esta empresa.
En mi trabajo he sido meticuloso, el Señor Giordano es muy meticuloso, pero he sabido complacerlo y confía en mi criterio.
Hoy el Señor Harper convocó a una reunión, hace una semana que su hija Mónica está en la ciudad, pero no se ha asomado por la empresa, según Ester, apenas llegó se fue de viaje.
No dude de su palabra pues a los días explotó un escándalo que incluye al heredero de los Spencer, al parecer Alonzo y Mónica habían salido cuando eran adolescentes.
Él ahora está comprometido con Isabel, pero apenas Mónica llegó Alonzo hizo a Isabel a un lado y ahora se pasea con Mónica sin importarle los chismes.
A Isabel la conocí hace poco, fui a un bar y la encontré hablamos un poco y al parecer no era tan feliz con su compromiso, pero al igual que yo, busca los beneficios de una familia adinerada.
Ese día me la llevé a la cama y la hice gritar del placer su confesión de que no había tenido se%o igual en mucho tiempo, me dejó pensando en que el niño rico no es más que apariencia.
No me conviene que él y Mónica terminen juntos, la amistad del Señor Harper con los Spencer no es un secreto que, si Mónica se casa con Alonzo, no dudará en darle la empresa a él.
El día de la reunión llegó, cuando el Señor Harper entró a la sala de juntas acompañado con sus dos hijas no pude evitar mirar a Mónica, de verdad es una mujer atractiva.
Tiene un aura que te hace mirarla, claro que Ester también es muy guapa, pero son muy diferentes hay algo en Mónica que te atrapa y por alguna razón comienzo a preguntarme como se vería en mi cama debajo de mi mientras la hago sudar y gritar de placer.
El Señor Harper me saca de mis pensamientos cuando anuncia que dejara a Mónica al frente de la empresa, volteo a ver a Ester quien me ve nerviosa al parecer ella sabía del anuncio y no me lo dijo.
Le comparto mi preocupación al Señor Harper de dejar a Mónica al frente y por qué Ester sería una mejor opción, pero él se mantiene firme.
Los otros accionistas y ejecutivos se ven inquietos, pero cuando Spencer muestra su apoyo a Mónica y esta habla frente a todos con una seguridad que me deja impresionado parece que se convencen.
Voy a tener que cambiar mi juego y en lugar de ir con Ester voy a tener que enamorar a la castaña se%y.
Me acerco a ella y la saludo, estudio su comportamiento no se intimida ante mi presencia y no pasan muchos minutos cuando Alonzo se acerca a marcar territorio e indica que es su novia.
Me extraña su comentario, ya que hace unos días hablé con Isabel mientras teníamos uno de nuestros encuentros y me dijo que seguía comprometida con Alonzo que lo de Mónica solo era un chisme.
También me extraña que sus papás y el papá de Mónica no dicen nada del comportamiento de este, creo que Isabel no sabe que estas familias la hicieron a un lado, pero yo le voy a ayudar a que todo vuelva a como estaba.
Una vez Mónica caiga en mis garras, le voy a enseñar lo que es un hombre de verdad.
Mónica pide un informe del último trimestre y no me pongo nervioso se lo entrego a su secretaria, la niña al parecer quiere que creamos que sabe lo que hace, hay que dejarla sentirse la dueña.
Cuando nos convoca a una reunión y dice que encontró irregularidades en el reporte, no puedo evitar enojarme ¿Cómo es posible que lo haya encontrado?, he sido muy cuidadoso, a menos que Ester no haya maquillado bien los informes.
Una vez Mónica nos deja solos, enfrentó a Ester.
“¿Cómo es posible que lo haya notado, ni siquiera tu papá lo ha hecho?”
“No lo sé”, dice nerviosa casi al borde del llanto, esa actitud me molesta.
Tomo los informes y en mi oficina los estudio, realmente Mónica es muy buena porque, en efecto, cualquiera no los hubiese notado, pero estoy seguro de que el Señor Harper sí.
Esta vez Ester no maquillo tan bien los informes, voy a su oficina y no está, la veo tranquila parada por los ascensores me ve y sonríe tiernamente, pero no me importa ella ya no es mi objetivo.
“¿Quieres ir a almorzar conmigo?”, dice de manera dulce.
“No maquillaste bien el informe”, le digo en tono bajo, pero molesto que solo nosotros dos escuchamos.
“Tú hermana lo descubrió”
“No sé qué pasó”
“Pasó que eres una tonta”
“Lo siento, como lo arreglo”
“No lo sé Ester, pero tienes que arreglarlo”
Justo se abre el ascensor y dentro están Mónica y Alonzo, este último tenía sus manos en la cintura de ella ni siquiera de soltaron cuando entramos al ascensor.
Ester les hizo el comentario de que deberían de dejar de dar espectáculos y Mónica al parecer nos escuchó a ella y a mi discutir por lo que no dudo en hacerlo notar, al llegar al estacionamiento ellos se fueron tomados de la mano.
No me gusta esa cercanía de esos dos le he hecho observaciones al Señor Harper sobre el manejo que Mónica está dando a la empresa, pero él parece que confía mucho en ella, eso no me gusta.
Tengo que jugar mis cartas con Mónica antes de que sea tarde.
Al llegar de almorzar con Ester, veo que mi equipo está trabajando en algo nuevo que llama mi atención.
Al parecer vamos a lanzar un nuevo vino y yo no lo sabía, veo la información, contacto a nuestros mixólogos en Italia porque es de aquí de donde viene el vino y ninguno de ellos lo hizo y me aseguran que tampoco fue el Señor Giordano.
Me llama la atención, no sé qué pretende Mónica, pero no la dejaré sacar un vino en el que no se nada del mixólogo, quien sabe que tiene esa mezcla o a que saber porque al parecer tampoco nadie lo ha probado.
Voy a su oficina, su secretaria no está por lo que entro de una vez, se nota que se molesta por mi atrevimiento, pero quiero que entienda que aquí las cosas no se hacen como ella dice solo por ser la hija del dueño.
Desde que la vi en el ascensor pude notar que ese vestido le queda muy bien, se ajusta a su cuerpo delgado y curvilíneo, me reta y me asegura que el vino va a salir.
Ya veremos, su abuelo y su padre no lo van a permitir, aunque sea ella yo me voy a encargar de decirles los riesgos y que nadie sabe quién es el mixólogo.
Se me viene a la mente los comentarios de Isabel sobre Alonzo y aprovecho para insinuarle a ella que yo soy mejor, me mira asombrada y me echa de su oficina.
Puede que se resista al principio, pero estoy seguro de que apenas la toque se derretirá en mis brazos al parecer con Mónica no funciona lo mismo que con Ester, con Mónica hay que ser más directo.
Salgo de su oficina, voy a mi oficina y ordenó a los empleados que detengan todo sobre el dichoso nuevo lanzamiento hasta nueva orden tengo que hablar con el Señor Harper.
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