Amor verdadero
Capítulo 28

Capítulo 28:

Le ofrecí algo de beber y me pidió un café salí corriendo a la cocina para evitar continuar con ese incómodo silencio qué nos atacaba.

Preparé el café y se lo llevé a la cama.

La noté incomoda buscando su ropa y me pidió una camiseta para dormir se veía endemoniadamente sexy con mi playera blanca.

Se puso sus bragas y se sentó en la cama con la espalda en la pared para disfrutar su café.

Tal vez era algo estúpido, pero le propuse ver una película y ella acepto la trama era bastante interesante, los dos coincidimos en nuestra opinión sobre los personajes y gracias a eso pude salvar un poco la situación.

Porque gracias a la película tuvimos conversación para buen rato pasaba de medianoche cuando le dije que deberíamos dormir porque ambos debíamos trabajar al siguiente día.

Nos acostamos y la abracé tratando de compensar un poco lo mal que me porté cuando terminamos la relación se%ual.

En ese momento no pude soportar que me tocara, pero después me sentía con el compromiso moral de hacerla sentir apapachada.

Eso que les gusta a las mujeres y que esperan del hombre al que le entregan su cuerpo, así que la abracé y disfruté dormir a su lado con su cabeza en mi pecho aspirando su perfume y sintiendo el calor de su cuerpo junto al mío.

Amaneció y ella me despertó con un suave beso en el rostro.

Hacía tanto qué no me sentía tan bien a la hora de despertar qué me hizo recordar el tiempo en el que Karina y yo fuimos felices y disfrutábamos un despertar así, abrazados hasta que el sol entraba por la ventana y nos obligaba abrir los ojos.

Morelia se metió al baño y yo aproveché para vestirme deprisa ya era tarde y tenía una cita con un cliente, pero no quería llevar a Morelia a su casa sin desayunar, así que en cuanto salió del baño, le dije que iríamos a desayunar.

Estaba frente al espejo terminando de abrocharme la camisa cuándo sentí sus brazos rodearme por la espalda.

“Me gustas mucho”, dijo y yo me quedé paralizado no supe que decir, quizá ella esperaba un también tú me gustas mucho, pero yo no estaba listo para dar demostraciones de afecto que se pudieran malinterpretar y hacerla pensar que tendríamos una relación estable.

Ella no se merecía lo que yo estaba haciendo me sentía fatal y me daba cuenta qué le transmitía mis inseguridades.

Salimos del departamento y pasamos a desayunar ella pidió chilaquiles y pude ver en sus ojos la resaca por la desvelada, era evidente que no había dormido en toda la noche quizá por la incomodidad de estar entre mis brazos.

Comenzamos a hablar sobre su divorcio ni siquiera sé porque le pregunté sobre su trámite parecía que ella no tenía intenciones de divorciarse.

Eso a mí me generaba un conflicto porque yo tampoco había iniciado mi trámite de divorcio y sabía que tenía que hacerlo sí quería en el en algún momento reiniciar mi vida, aunque en realidad no estaba seguro de querer volver a compartir mi vida con nadie más.

Volvimos al auto y durante todo el trayecto hasta su casa viajamos presas del silencio incómodo eso hacía que el aire se sintiera denso.

Yo me sentía fatal porque la cita había sido un verdadero fiasco y quedó muy lejos de ser la noche apasionada que pensé que tendríamos y todo porque mi cerebro y mi miembro decidieron mantenerse incomunicados en el peor momento.

Lo que era un hecho es que yo tenía un problema, todavía no sabía si era físico o mental pero que tendría que resolver si es que quería volver a tener una vida se%ual placentera porque hasta el momento ni Mitzy ni Morelia habían conseguido que yo tuviera un orgasmo.

Yo pensé que con Morelia sería diferente puesto que el día que estuvimos en su casa ella me hizo acabar con su boca y creí que no iba a volver a tener ese mismo problema que tuve con Mitzy, pero me equivoqué.

Había vuelto a suceder y era una señal de alarma tenía que buscar ayuda médica de lo contrario mi vida se iba a convertir en un infierno porque no podía ir por la vida ilusionando mujeres para luego no ser capaz de satisfacerlas por completo.

Porque, aunque haya logrado qué Morelia tuviera dos orgasmos pude ver en su rostro que no estaba satisfecha del todo y era más una cuestión que tenía que ver con mi actitud y con el hecho de que yo no podía disimular que no estaba sintiendo nada.

Tuve que dejar que Adrián se hiciera cargo de los clientes, yo no lograba concentrarme, menos mal él había entrado al negocio con todas las ganas de salir adelante porque a mí en los últimos días todo mundo me cancelaba.

…

Entré en mi casa y me di una ducha.

Sentía el cuerpo pegajoso y necesitaba refrescarme la boca porque también había olvidado llevarme un cepillo de dientes.

Todo lo que había pasado la noche anterior paso por mi mente, yo no sabía que era lo que pasaba entre Adrián y yo de que nos gustábamos era un hecho.

Eso era algo que se notaba y que cuando estábamos juntos se podía palpar en el aire, pero no ocurría esa magia que uno espera cuándo hay tanta química entre dos personas.

En realidad, parecía que más que disfrutar de una noche de pasión solo logramos una pijamada entre amigos viendo una buena película.

En sí, eso fue lo más rescatable de la noche, podría pasarme horas conversando con él de cualquier tema y no voy a negar que me regaló dos orgasmos deliciosos, pero con eso y todo no fue lo que yo esperaba o quizá mis expectativas estaban demasiado altas para cumplirlas.

Revisé el buzón de mi teléfono porque lo había mantenido apagado durante toda la noche los mensajes comenzaron a llegar sobre todo los de mi amiga Peri con su horóscopo del día.

Esta vez me envió un video, era bastante largo, pero yo necesitaba despejar mi mente así qué para dejar de pensar en lo que había ocurrido con Adrián abrí el video y comencé a escuchar el horóscopo.

‘No hay nadie que pueda decirte más exactamente que lo que sientes más que tú mismo. Busca en ti las respuestas a tus interrogantes. Siempre has sido un signo muy intuitivo y en esta ocasión no será la excepción. Si consideras qué hay alguien en tu vida qué no es para ti déjalo ir, no permitas que el pasado bloque tus energías el amor verdadero está llegando a tu vida abre tu corazón y recíbelo porque es un amor que ya está escrito en tu destino y el universo lo pondrá en tu camino’.

No sabía si reírme o llorar después de lo que había pasado con Adrián mi intuición me decía qué no era la persona correcta para mí, a pesar de lo que sentía cuando conversaba con él cuando sus manos me tocaban y cuándo escuchaba su voz y leía sus mensajes.

Todo se arruinaba al momento detener intimidad, en definitiva, no creía que Adrián fuera el amor de mi vida o al menos no ése, del que hablaba el horóscopo que me enviaba mi amiga.

Boté el teléfono para no seguir perdiendo el tiempo en estupideces tomé mi libro y comencé a leer para ponerme a trabajar.

Sí había algo importante en la vida era vivir y para vivir tenía que comer y para eso necesitaba trabajar.

Por lo tanto, no podía perder el tiempo pensando y haciendo estupideces mucho menos podía comenzar a creer en el horóscopo todo lo que decía era absurdo y yo sentía que todos los días decía lo mismo con diferentes palabras.

No me explicaba como Peri podía creer en esas charlatanerías y pretendía que yo creyera que mi alma gemela era Adrián Morales.

Un mensaje de la asistente de mi dentista me recordó que tenía cita por la tarde yo lo había olvidado debía darme prisa con el trabajo si quería llegar a tiempo.

No había manera de cambiar la fecha, tenía que ir porque una muela me estaba causando molestias y no quería que fuera a ponerse peor.

Terminé el trabajo antes de la hora y me fui al dentista cuando volví me recosté en el sofá y me quedé dormida después de la desvelada de la noche anterior mi cuerpo necesitaba recuperarse, estaba tan cansada que lo único que quería era olvidarme de todo y de todos.

Un mensaje de texto de Peri me despertó pasadas las once de la noche agradecí qué me despertara porque de lo contrario me hubiera quedado en el sofá y habría terminado lastimada del cuello.

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