Alquilando una mamá
Capítulo 69

Capítulo 69:

Amanda lo miró mientras le acariciaba el rostro con suavidad. Anthony se preocupó un poco porque ella no decía nada y porque se le había caído una lágrima.

“¿Qué pasa, mi amor? ¿No estás feliz?”

“Claro que sí, estoy muy feliz. No sé qué hice para merecer esta felicidad; para encontrar un hombre tan maravilloso, una hija hermosa y una nueva familia”.

“Siempre seremos tu familia”.

“¿Estás seguro de que quieres estar conmigo?”

“Absolutamente”.

“¿Incluso sin conocer mis defectos, mi pasado, mis manías?”

“Quien no tiene defectos, que tire la primera piedra. Manías tenemos todos, y tu pasado es pasado. Te ayudaré a olvidar y a sanar todas las heridas que tienes en tu interior”.

“Te mentí”.

“Lo sé”.

“¿Cómo lo sabes?”

“Te escuché hablando con Cindy en la puerta del dormitorio cuando fui a buscar algo de ropa”.

“¿No estás molesto?”

“En el momento lo estuve, pero quiero saber por tu boca por qué mentiste. Cuando quieras hablar de eso, lo hablaremos”.

“Me echaron de la casa.

“¿Qué?”

Seguían abrazados mirándose a los ojos y, aunque ella intentó irse, Anthony la sujetó, impidiendo que dejara su abrazo. La tristeza en la mirada de esos ojos llenos de lágrimas era evidente. Ella bajó la cabeza y comenzó a hablar.

“Mis padres no murieron, y también tengo una hermana. Lo siento, te mentí a ti y a tu familia. No era mi intención mentirles, pero para mí ya no tengo familia”.

“Está bien, no llores”.

“Tuve un novio con el que salí durante tres años. Mis padres no son ricos, pero viven bien. Hace unos meses, mi hermana Elsa me invitó a una fiesta en casa de su amiga; yo no quería ir, pero ella insistió y dijo que mi exnovio también iría. Fui a la fiesta y estábamos todos juntos, todo iba perfecto hasta que comencé a sentirme mal, me debilité y todo comenzó a girar. Escuchaba la música y las voces, pero no podía ver bien”.

“Estabas drogada” dijo Anthony.

“Sí, un calor se apoderó de mí. Estaba cubierta de sudor y enloquecida; quería sentirme bien y reaccionar, pero no lo lograba. Escuché a Elsa decir que me iba a mejorar y recuerdo que me llevaron a una habitación en donde ella llamó a otra persona para que entrara. Yo estaba acostada en la cama con una agonía que no se aliviaba y solo seguía aumentando”.

“Cielos, ¿Tu hermana te hizo eso?”

“El que había entrado al cuarto era mi exnovio; los vi besándose, pero en ese momento no tenía fuerzas para levantarme. Entonces, ella se fue y él vino hacia mí diciéndome amor y que mi malestar se iba a pasar. Me quitó la ropa y abusó de mí. Aún hoy siento sus caricias, cómo apretaba mi cuerpo, su voz en mi oído, todo el dolor que me causó” habló rápido y sin pausa. Se alejó de Anthony llorando y dejó caer los brazos sin fuerza.

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