Yo soy tuya y tú eres mío
Capítulo 956

Capítulo 956:

«Es así. Recuerdas a mi amiga directora, Mae? Ella está trabajando en una película que involucra explosivos, y pensé que podría ser útil consultar a Smith para algunos consejos. Podrías darme sus datos de contacto?».

Landen siempre confiaba en Raegan y respondió cordialmente: «Oh, no hay ningún problema. Le avisaré para que comparta contigo todo lo que pueda».

«Gracias, papá». La voz de Raegan volvió a entrecortarse un poco.

«Niña tonta, ¿por qué ser tan formal conmigo? Ten cuidado en el trabajo y cuida tu salud. A Janey la cuidamos Annis y yo, así que no te preocupes».

«De acuerdo. Papá, cuídate tú también…»

«Lo sé. Avísale a Erick con tiempo para que te recoja en el aeropuerto cuando regreses».

«De acuerdo. Papá, ahora voy a colgar».

Una lágrima cayó mientras Raegan colgaba el teléfono. Se sentía desgarrada. Si no hacía nada ahora, su tasa de supervivencia aumentaría, mientras que la de Mitchel sin duda disminuiría. Otra posibilidad era que tanto ella como él perecieran a causa de los explosivos.

Por lo tanto, se sintió obligada a actuar, a aferrarse aunque fuera a una pizca de esperanza.

Inició una videollamada con Smith y le envió fotos detalladas de los explosivos. Smith determinó que el artefacto era una bomba teledirigida de tipo continental. Identificó que el cable de control remoto era el amarillo.

Sin ser consciente de la peligrosidad del entorno de Raegan, Smith supuso que los explosivos que Raegan le mostró eran mero atrezzo, aunque parecían increíblemente realistas.

A pesar de llevar muchos años retirado, su pericia seguía siendo aguda.

Al observar el explosivo casero, comentó: «El atrezo que se utiliza hoy en día en las películas es increíblemente realista. Parece muy profesional».

Tras expresar su gratitud a Smith, Raegan contempló el cable amarillo durante largo rato.

Confiaba en el juicio de Smith y, como él había señalado, se trataba de un dispositivo simplificado. Parecía que no se disponía de las herramientas de fabricación adecuadas, que habrían permitido una construcción más refinada.

Aunque la influencia de Lorenzo era considerable, estaba principalmente fuera de Ambrosia.

Ambrosia mantenía un estricto control sobre tales dispositivos ilegales. Debido a la falta de condiciones de fabricación adecuadas, Lorenzo no podía producir explosivos más sofisticados y tuvo que conformarse con menos.

Esta limitación, sin embargo, brindó a Raegan la oportunidad de aprovechar esta debilidad y cortar fácilmente el cable.

Armándose de valor, Raegan levantó las tijeras con la mano, armándose de valor. Después de prepararse mentalmente durante mucho tiempo, cuando por fin llegó el momento de actuar, le temblaba toda la mano.

Las palmas de las manos de Raegan estaban resbaladizas por el sudor, lo que le dificultaba sujetar las tijeras. Con determinación, apuntó las tijeras al cable amarillo, cerró los ojos y se preparó para cortar.

De repente, un fuerte grito estalló detrás de ella. «¿Qué estás haciendo?

Entonces, se oyó un fuerte estruendo cuando una figura oscura le arrebató bruscamente las tijeras de las manos.

Raegan levantó la vista y se encontró con el rostro apuesto y habitualmente refinado de Henley, que parecía decididamente inquieto. Frunció el ceño: «¿Por qué estás aquí?».

«¿A quién más esperabas?» replicó Henley, con una voz cargada de odio.

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Nota de Tac-K: Espero esten teniendo una linda linda semana queridas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (^◡^ )

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