Yo soy tuya y tú eres mío
Capítulo 636

Capítulo 636:

El estudio bullía desde el momento en que llegó, sin dejarle espacio para pensar en asuntos personales.

Al caer la tarde, Elin le propuso que hablaran de trabajo durante la cena.

Eligieron un centro comercial cercano al estudio para cenar.

Mientras comían, Elin recibió una llamada relacionada con el trabajo y tuvo que marcharse temprano.

Después de comer, Raegan decidió comprar un regalo para Janey y se dirigió a la tienda de bebés de la primera planta.

Al entrar en la tienda, un empleado bloqueó el paso a Raegan y se disculpó: «Lo siento, señorita, pero ahora mismo no estamos atendiendo a los clientes».

Confundida, Raegan preguntó: «¿No están abiertos?».

El empleado le explicó: «Estamos atendiendo a un cliente VIP y le pedimos su comprensión».

A veces, los centros comerciales cerraban sus puertas al público para atender exclusivamente a los compradores VIP.

Raegan estaba al tanto de esta práctica y se disponía a salir cuando oyó que alguien la llamaba por su nombre. «¡Raegan!»

Raegan miró hacia allí y su expresión se tornó gélida de inmediato.

Katie salió de la tienda, apoyándose en Luciana. «Raegan, ¿también has venido a comprar a la tienda de bebés? ¿De quién es la ropa que vas a comprar?»

Katie era consciente de que Raegan había estado fuera cinco años, durante los cuales se casó y tuvo un hijo.

Katie formuló la pregunta con una clara intención.

Raegan echó un vistazo a la barriga de Katie, observando que sólo era ligeramente pronunciada, lo que sugería unos tres meses de embarazo.

Sin embargo, Katie parecía acentuarlo para aparentar estar más avanzada.

Prefiriendo evitar más interacción, Raegan se dio la vuelta para marcharse, pero Katie no estaba dispuesta a dejarla ir fácilmente.

Katie extendió la mano, agarrando el brazo de Raegan, y la saludó con una sonrisa: «Raegan, cuánto tiempo».

Raegan apartó enérgicamente el brazo, con tono gélido. «No creo que seamos tan amigas, ¿verdad?».

Sorprendida por el brusco rechazo de Raegan, Katie perdió ligeramente el equilibrio.

Luciana le espetó de inmediato: «¿Estás ciega? No te atrevas a hacerle daño a Katie o te arrepentirás».

Luciana seguía furiosa con Raegan por su último encuentro en la sala de Mitchel. Ella no esperaba que Raegan volviera con su hijo e incluso tenía conexiones con ese bastardo. Consideró a Raegan una manipuladora.

El rostro de Raegan se volvió frío como la piedra. Replicó: «Señora Dixon, seamos claros, ¿quién empezó esto?».

Luciana ignoró a Raegan y, hirviendo de rabia, ladró: «Katie sólo estaba siendo educada, ¿y tú le pagas con daño?».

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Nota de Tac-K: Espero les gustarán los capítulos lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (=◡=) /

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