Una pareja disfrazada
Capítulo 72 - Engañando a Leonardo

Capítulo 72: Engañando a Leonardo

Jerome condujo durante un rato. Summer estaba a salvo. Ella dijo: «Por favor, deténgase aquí. Gracias».

Jerome se detuvo en silencio al lado de la carretera. Summer quería bajarse, pero no podía abrir la puerta. Se volvió para mirar a Jerome y dijo: «La puerta del coche está cerrada».

Jerome entonces la miró muy extrañado: «Summer, sería más seguro que me eligieras a mí y no al primo de Leonardo».

«¿Qué?» ¿Estaba diciendo lo que ella pensaba?

Al notar que Summer no le interrumpía, Jerome se mostró más seguro: «Nos gustamos. Seremos felices juntos. Y lo que es más importante, no dejaré que otros lo descubran».

«¿Tú y yo, juntos?» Summer le señaló a él y luego a sí misma.

Jerome asintió y sonrió. Intentó tocarle el rostro. «Lo estás pasando mal con Leonardo. Lo entiendo. No te culpo».

¿Pasarla mal?

Realmente lo dijo suavemente. Se refería a que Leonardo no podía rendir se%ualmente, así que ella se sentía sola. Por eso acudió a su primo.

¡Qué hombre tan sórdido!

Summer se giró para evitar su mano: «¿Quieres decir que quieres que engañe a Leonardo?».

Jerome vio la noticia. Pensó que Summer se había metido con el primo de Leonardo porque se sentía sola.

A Summer le gustaba. Si él decía que ella también le gustaba, Summer dejaría al primo de Leonardo sin dudarlo.

A Jerome no le importó que Summer evitara su contacto. En cambio, se excitó más: «Eres demasiado buena para Leonardo. Nos queremos, ¿verdad?»

«Lo siento. Vicky es la que te quiere. Si no abres la puerta del coche, llamaré a la policía». Summer se apoyó en la puerta y miró fijamente a Jerome.

¿Por qué no se había dado cuenta de que Jerome era tan descarado?

La actitud de Summer lo puso un poco ansioso. Se acercó a Summer y le dijo: «Vicky no es rival para ti».

Summer no dijo nada. Directamente sacó su teléfono para llamar a la policía.

Tuvo que volver a sentarse en su asiento y abrir la puerta.

Summer se bajó del coche. Se giró para mirarle y le dijo fríamente: «Jerome, me gustabas. Pero ahora se acabó. Y no voy a engañar a Leonardo».

La rostro de Jerome se puso pálida. Summer se dio la vuelta y se fue, sin mirar atrás.

Al cabo de un rato, otro coche se detuvo junto a ella.

Pensó que era Jerome de nuevo, así que no se detuvo hasta que escuchó una voz familiar.

«Señora Emerson».

Summer giró la cabeza sorprendida: «¡Tim! Has vuelto».

Como asistente especial de Leonardo, Tim solía seguirlo a donde fuera.

Después de que Leonardo dejó el país, ella no vio a Tim. Así que supuso que habían dejado el país juntos.

«Sí, el Señor Emerson me pidió que te llevara a casa», se bajó del coche y respondió respetuosamente.

Summer tenía ciertas ganas de ver a Leonardo, pero sabía que éste sólo le mostraría su espalda.

Aun así, Summer estaba bastante contenta.

Después de subir al coche, se calmó y se puso ansiosa.

¿Por qué iba a volver Leonardo ahora?

¿Regresó justo ahora o por la mañana? ¿Vio las noticias sobre ella y ‘Douglas’?

Si vio las noticias, ¿podría…?

Incluso si él mismo no lo viera, otros se lo dirían también.

Sólo los Emerson podían suprimir las noticias.

Si un Emerson lo sabía, Leonardo definitivamente lo sabría.

Estaba un poco asustada y ansiosa. El coche pronto llegó a la villa.

«Señora Emerson, por favor». Se adelantó y le abrió la puerta del coche.

Cuando Summer bajó del coche, miró el estudio de Leonardo en el segundo piso. Le preguntó a Tim: «¿Está Leonardo en su estudio?»

«No, el Señor Emerson está descansando».

Summer asintió. En cuanto entró por la puerta, vio a ‘Douglas’ bebiendo café en el salón.

Estaba enfadada con él, pero no quería perder los nervios delante de Tim. Así que se limitó a mirar fríamente a ‘Douglas’ y subió las escaleras.

En cuanto Summer se fue, Tim se acercó a Leonardo y le dijo: «Señor Emerson, Jerome fue a ver a la Señora Emerson antes de venir a casa».

Leonardo dijo con indiferencia: «¿Oh? ¿Qué hizo?».

Tim era lo suficientemente inteligente como para saber que a Leonardo le importaba por dentro.

Tim vio que Jerome y Summer estaban cerca en el coche. Pero no se atrevió a decírselo.

Así que lo dijo suavemente: «Se quedaron un rato en el coche. Y luego la Señora Emerson se bajó».

«¿Un rato?» Leonardo dejó el café sobre la mesa y se apoyó en el sofá.

Cruzó las piernas, con un aura de nobleza.

Tim estaba nervioso: «Bueno, unos diez minutos».

«¿Diez minutos? Has tardado más de una hora en llevarla a casa». Leonardo le dirigió una mirada muy aguda.

Tim no se atrevió a hablar más.

Leonardo entrecerró los ojos y no preguntó más. No esperaba una respuesta satisfactoria por su parte.

Cuando Summer bajó las escaleras, ‘Douglas’ no estaba en el salón.

Preguntó al guardaespaldas de la puerta: «¿Dónde está Douglas?».

El guardaespaldas respondió: «Ha salido».

«De acuerdo». Summer asintió y fue a la cocina.

Le pareció que el aire era más fresco sin él.

Leonardo acababa de regresar. Debía estar agotado. Decidió preparar algunos platos deliciosos para él.

Antes de que la cena estuviera lista, Tim entró y dijo: «Señora Emerson, tengo que hacer un recado. Por favor, tráigale algo de comida al Señor Emerson».

Summer estaba un poco confundida. Era casi de noche. ¿Por qué tenían tantas cosas que hacer?

«De acuerdo, se lo llevaré cuando esté listo». Summer estaba feliz de hacer algo por Leonardo.

Después de un rato, le llevó la cena a su estudio en una bandeja.

Llamó a la puerta, pero nadie respondió. Entonces empujó la puerta y entró.

Dejó la bandeja y se dispuso a salir. Pero se encontró con ‘Douglas’ cuando se dio la vuelta.

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