Una pareja disfrazada
Capítulo 1185

Capítulo 1185:

Después de que Ciudad Perdida se convirtiera en un éxito, «Ciudad Perdida 2» también se convirtió en el centro de atención.

Inversores, patrocinadores y plataformas acudieron a colaborar. La ceremonia de inauguración también atrajo mucha atención.

Además del reparto y el personal de «Ciudad Perdida 2», había también muchos periodistas.

«Ciudad Perdida 2» fue un éxito. Los reporteros que acudieron a la ceremonia de inauguración no eran, naturalmente, ordinarios. Eran muy sensibles y agudos en sus comentarios. Aunque Summer y Leonardo eran muy discretos, fueron rápidamente reconocidos por ellos.

Summer podía sentir que alguien la miraba fijamente. Había aparecido en los titulares. No era nada para ella, pero le preocupaba que Leonardo lo encontrara molesto.

Cuando ella dio un vistazo a Leonardo, éste miraba su alrededor con interés. Le cogía la mano y de vez en cuando se la pellizcaba como si fuera un juguete.

No parecía molestarle, así que ella se sintió aliviada.

Después de la ceremonia de apertura, había una cena esta noche.

Summer y Leonardo no pensaban ir, pero Carl los llamó más tarde y quiso que se unieran a la diversión, así que los siguieron.

«Ciudad Perdida 2» estaba bien financiada, y los organizadores eran muy generosos. La cena se celebró en el Club Caldero Dorado.

Carl llegó antes que ellos. Cuando se acercaron, estaba paseando por el salón de banquetes.

Al ver a Summer y Leonardo, se apresuró a acercarse y dijo: «Os estoy esperando».

Mientras Leonardo y Carl hablaban, Summer sólo sonrió.

En cuanto entraron, casi todo el mundo los miraba con ojos curiosos o de sondeo.

Eliza también se acercó y dijo: «Bienvenidos. Pasadlo bien. Si necesitáis algo, llamadme».

Se sintió honrada de que tanto Summer como Leonardo asistieran a la ceremonia de apertura y al banquete.

Eliz era muy inteligente y no trató de socializar con ellos, a pesar de que había colaborado con Summer en dos obras de teatro.

Cuando terminó de hablar, se marchó. Los demás vieron esto y por eso no se atrevieron a venir a hablar con ellos.

«¿Por qué has venido al banquete?» le preguntó Summer a Carl.

Carl sostuvo una copa de vino y dijo con una sonrisa: «Para cooperar en los negocios».

«Eso no es muy amable por tu parte. ¿Has venido por negocios a los banquetes de otras empresas?». A Summer le pareció que Carl era un poco descarado.

Carl se puso serio y dijo: «Ya te lo había mencionado antes».

Summer recordó por fin que Carl sí había mencionado que quería comprar Ciudad Perdida y adaptarla en una película, pero luego pasó algo más, así que seguía pendiente.

Summer respondió con seriedad: «De acuerdo, Señor Carl».

Carl se rascó la cabeza y dijo: «En cuanto al contrato, no tienes que preocuparte. Definitivamente no te voy a engañar». No se atrevía engañarla.

Summer asintió: «Ok».

De hecho, aunque Carl se llevara Ciudad Perdida gratis, para ella estaría bien. Después de todo, Carl siempre se había dedicado a Leonardo.

Carl parecía poco fiable, pero era un hombre muy considerado. Definitivamente no se lo llevaría gratis.

En este momento, la multitud estaba en una conmoción. Alguien gritó: «¡Fuego!» La sala de banquetes se sumió en el caos.

«¿Qué ha pasado?» La expresión de Carl cambió. Miró hacia atrás y dijo: «Salgamos primero».

En cuanto Summer les siguió fuera, oyó el sonido de la alarma, pero no pudo saber dónde estaba el fuego.

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