Capítulo 1081:

En efecto, hacía mucho tiempo que no veía la luz del sol. Se sintió muy abrigada. Era como si estuviera aislada del mundo y fuera una prisionera.

Esta era la libertad que no había experimentado en mucho tiempo.

La voz de Lester volvió a sonar: «Hoy tengo dos invitados».

Summer se detuvo un momento al escuchar esto, pero fingió estar tranquila. Así que no abrió los ojos. Seguía disfrutando del sol y apoyada en el respaldo de su silla de ruedas.

«Sin embargo, no estoy seguro de cuándo llegarán estos dos invitados. ¿Por qué no hacemos una apuesta?» La voz de Lester era suave, como si estuviera charlando con un amigo.

Al oír esto, Summer abrió de repente los ojos y se sentó derecha para dar un vistazo a Lester.

Le preguntó: «¿A qué quieres apostar?».

Estaba casi segura de que uno de los supuestos invitados que Lester mencionó era definitivamente Leonardo.

Lester era realmente difícil de tratar. Después de que Stanley escapara con éxito, con el fin de evitar que Leonardo creara problemas, incluso tomó la iniciativa y pensó en una forma de hacer que Leonardo fuera verle.

«¿Qué quieres apostar?» Lester dio un vistazo a Summer con una expresión irónica.

La expresión de Lester era extremadamente seria. Summer sintió que la cosa no sería tan sencilla. Así que preguntó: «¿Puedo apostar por algo?».

Efectivamente, al momento siguiente, Lester sonrió y dijo: «Entonces apuesto por tu vida».

Antes de que Summer pudiera entender lo que estaba pasando, alguien se adelantó y la ató.

Summer fue atada firmemente a la silla de ruedas. Se le saltaron los ojos y miró fijamente a Lester. Luego, se burló. «¡Eres un hipócrita!»

Lester entrecerró los ojos y pareció un poco descontento.

Sin embargo, pronto se calmó. «Tú eres demasiado joven. Cuando no confíes en el resultado, empezarás a sentir pánico. Tú eres siempre impulsiva y quieres maldecir a alguien. Puedo entender esto, y te entiendo».

Summer quiso refutar, pero tuvo que admitir que Lester tenía razón. En efecto, estaba insegura y empezó a sentir pánico.

«¿Has adivinado a qué dos invitados he convocado?» Lester puso una mano en el reposabrazos de la silla y la golpeó rítmicamente con los dedos. Parecía tan casual y descuidado.

Summer guardó silencio un momento y preguntó: «Si adivino a quiénes has invitado, ¿Qué me toca?».

«Nada». Lester negó con la cabeza.

«Entonces no lo adivinaré». Summer se dio la vuelta y no miró a Lester.

Lester sólo quería ver su expresión de pánico y confusión. Pero, Summer no le dejó conseguir lo que quería.

Lester dijo con decepción: «Así que parece que no puedes adivinarlo. Ya que es así, puedo decírtelo si me dices que quieres saberlo”.

“No quiero saberlo». Summer le miró y se negó.

El rostro de Lester se ensombreció ligeramente. Después de un rato, dijo lentamente: «Eres tan testaruda como una vieja amiga mía. No me extraña que le gustes a Stanley y también a Trevin».

Al oír a Lester mencionar a Trevin, Summer se quedó atónita por un momento. Trevin era como un pródigo normal.

Summer había sido controlada por Lester para realizar experimentos durante este periodo de tiempo. No pudo encontrar ninguna conexión entre Trevin y Lester. Era difícil imaginar que fueran padre e hijo.

«Sé que te llevas bien con Trevin. ¿Quieres considerar ser la novia de Trevin? Es un buen hombre». Lester era muy astuto. Naturalmente sabía todo sobre su propio hijo.

Lester incluso conocía cada detalle que ocurría entre Trevin y Summer. No era nada sorprendente.

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