Todopoderosa Señora Finn
Capítulo 13

Capítulo 13: 

Pero si Hattie era su madre natural o su madrastra no era asunto suyo.

No importaba si se casaba con él o no, su plan seguiría adelante.

Era una buena idea tenerlo como esposo, ya que era menos probable que un lisiado obstaculizara su plan. Pero si interfería en sus negocios…

Ruby entrecerró los ojos y se lamió la comisura de los labios sin cuidado.

…

Cuando Hattie se apasionaba discutiendo los asuntos de la ceremonia nupcial, Ruby se sentía aburrida de la conversación y no paraba de bostezar.

«Así que, según el programa, la recogeremos en tu casa a las 9 de la mañana del día 8 del mes que viene. Le prepararemos un matrimonio decente y todos los detalles de la ceremonia se programarán según las tradiciones».

Al ver a Ruby sentada en una postura inadecuada, la Señora Finn sonrió satisfecha. Confirmó el acuerdo en detalle con Spencer y luego pidió a su criado que trajera los regalos antes de despedirse de los Harold.

«Son antigüedades, ¿Verdad? Qué generosa es la Familia Finn».

Estas antigüedades, pinturas y joyas parecían tan valiosas. Parecía que a la Familia Finn le importaba mucho el matrimonio.

Sentada en el sofá, Ruby soltó para recordar a Susan mientras ponía una mirada codiciosa en aquellos regalos: «Ten cuidado cuando toques estas cosas, Susan. Si lo rompes, me vas a compensar por ello».

«¿Compensarte?» Susan la fulminó con la mirada.

«Estos son los regalos que me hacen, así que me los voy a llevar conmigo cuando me case con la Familia Finn. ¿Qué pensarán si te encuentran apropiándote de todas estas cosas? Deben de pensar que son muy pobres», sonrió Ruby y les echó en cara el comentario.

¡Pero Susan no podía aceptarlo!

¡Esos tesoros valían más de un millón de dólares! ¿Por qué tenía que dejárselos a Ruby?

«¡Basta! ¿En qué estás pensando? Sólo pon estas cosas en la habitación de arriba y dáselas a Ruby cuando se case», Spencer miró a Susan con desdén.

Estaba persiguiendo intereses a corto plazo mientras ignoraba los beneficios a largo plazo de la alianza con la Familia Finn. ¡Qué mujer tan superficial!

Susan ordenó a los criados que subieran las cosas de mala gana.

Ruby sonrió fríamente.

«¡Ruby!»

Cuando Ruby se sentía aburrida, se disponía a marcharse, percibió un olorcillo a perfume y oyó una dulce voz que venía de algún lugar de los alrededores.

«¡Hola, mi querida hermana! ¿Cómo va tu vida en Francia? He oído que en el país donde vivías había mucha delincuencia, sobre todo vi%laciones. Para una chica tan guapa como tú…».

Rita miró con envidia su atractivo rostro y se sintió injusta.

Al fin y al cabo, ella era la primogénita de la familia. ¿Cómo podía Ruby ser más guapa que ella?

Ruby la miró lánguidamente y esbozó una leve sonrisa: «Si de verdad quieres saberlo, pídele a tu padre que te envíe allí y quédate varios años». Rita se sintió avergonzada por su respuesta.

«Qué graciosa eres, Ruby. Hacía tanto tiempo que no te veía. Ahora que has vuelto, he organizado una fiesta de bienvenida por tu regreso. Ya que no tienes nada que hacer ahora, ¿Por qué no vienes conmigo? Hay mucha gente que quiere saber de ti».

La vergüenza de su rostro fue rápidamente sustituida por una sonrisa. Extendió la mano y agarró el brazo de Ruby.

Al ver esto, Ruby levantó una ceja y sacó su mano lentamente: «No estoy familiarizada con tus amigos, ni contigo».

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