Sus mil secretos -
Capítulo 968
Capítulo 968:
Jared apagó su teléfono y se preparó para entrar en la sala de examen. Estaba sorprendido y algo confundido después de ver a Arielle.
«¡Jefa! ¿Estás aquí para apoyarme?»
Arielle negó con la cabeza. «No, sólo pasaba por aquí».
Estaba a punto de terminar de leer la información del archivo, pero de repente pensó en Jared, así que inmediatamente se apresuró a ir hacia allí.
La expresión de Jared se ensombreció al oír eso, pero vio que Arielle sonreía. «Estoy bromeando. He venido a ver cómo estás».
Jared se quedó atónito momentáneamente. «Jefa, por favor, no bromee conmigo. No estoy acostumbrado».
Arielle se sintió en cierto modo ofendida por sus palabras.
¿De verdad se me da tan mal bromear?
Se encogió de hombros sin poder evitarlo. «Está bien. Vengo a decirte que te relajes antes del examen. Henry dijo que estabas tan nervioso que no pudiste dormir en toda la noche».
Jared se mordió el labio al escuchar eso. «Maldito sea ese Henry. Es un bocazas».
Arielle miró a los ojos de Jared. «No sólo Henry, sino que también he sabido de Carter. Desde que tu hermano se metió en problemas, ha estado estresado y queriendo hacer algo por los Júpiter. Te aseguro que tu hermano se recuperará en poco tiempo. No te presiones demasiado».
Jared miró fijamente a Arielle. Su corazón agitado se fue calmando poco a poco.
«Entendido». Asintió ligeramente con la cabeza. «Me lo tomaré con calma».
Arielle asintió y luego sacó una pequeña botella de su bolsillo.
«Casi lo olvido. He venido a darte esto». Sacó una píldora verde del pequeño frasco.
«¿Qué es esto?» Preguntó Jared enseguida.
«Me he enterado de que no has desayunado ni almorzado. Es para reponer tu energía».
Jared asintió y se tragó la pastilla sin dudarlo.
Si fueran otros los que le dieran una pastilla de repente, incluso habría llamado a la policía.
No sabía si era un efecto psicológico, pero se sentía mucho mejor después de tomar la pastilla.
El examen estaba a punto de comenzar. Arielle no quería que Jared se atreviera a volver mientras hacía un gesto hacia él. «Entra entonces. Tómatelo con calma».
«¡Está bien!» Jared levantó la cabeza y entró en la sala de examen.
Arielle se quedó mirando su figura de espaldas, con una mirada extremadamente complicada.
No le dijo a Jared que la píldora no sólo repondría su energía, sino que también mejoraría su concentración.
La píldora estaba destinada a Trisha. Pero Trisha no la necesitó al final, ya que Arielle tuvo tiempo suficiente para realizar la hipnosis con ella. Por lo tanto, le dio la píldora a Jared.
El examen de la clase normal era diferente al de la clase preparatoria, ya que era un examen combinado. Se examinaban las cuatro asignaturas en un solo examen y el examen duraba tres horas.
Era realmente agotador mantener la concentración durante una hora tan larga.
Jared, que ni siquiera había desayunado y almorzado, podría no aguantar hasta el final.
Con su talento y la ayuda de la píldora, Arielle confiaba en que podría conseguir la única plaza para la clase normal.
Sin embargo, cuando Arielle estaba a punto de irse, Jared salió de repente corriendo.
«¿Qué pasa?»
Vio que Jared se inclinaba hacia ella al segundo siguiente con las manos cruzadas.
Luego, volvió a entrar corriendo en la sala de examen.
Arielle se quedó atónita momentáneamente, mostrando una sonrisa de impotencia.
Al sonar la campana, el examen de la clase normal comenzó, mientras que el evento de caridad también arrancó.
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