Sus mil secretos
Capítulo 732

Capítulo 732:

Susanne parecía aterrada, y sus pupilas no pudieron evitar dilatarse. Aquello era una señal de miedo máximo.

No importaba lo que Vinson le preguntara, ella permanecía en silencio y sólo le pedía que se alejara de Arielle.

«Si no saben que Arielle es de su estirpe, entonces todo está bien. Una vez que lo descubran, definitivamente se desharán de ella. Cuando eso ocurra, tú serás el único que tendrá el corazón roto». Tomando su mano con fuerza, ella continuó: «Todo lo que estoy haciendo ahora es por tu propio bien. Deberías romper con ella cuanto antes».

Sin embargo, él permaneció impasible y retiró la mano de su agarre. «Mamá, ya te he dicho que la quiero. Si quieres que me convierta en un soltero y me quede solo para siempre, no la aceptes entonces».

«¿De verdad te gusta tanto?», inquirió ella con impotencia.

«Ya te he dicho que la amo».

Al oír eso, Susanne palideció y cerró los ojos.

En ese momento, Geoffrey bajó e informó: «Señor Vinson, Señora Nightshire, la Señorita Moore está despierta».

«Iré a ver cómo está». Después de que Vinson avanzara dos pasos, se dio la vuelta y preguntó: «Mamá, ¿Realmente no estás dispuesta a aceptarla?».

En ese momento, ella vio la determinación en sus ojos. Suspirando, dijo: «Subiré contigo a verla».

En la habitación, Arielle sintió que sus fuerzas se habían recuperado después de descansar.

Sin embargo, pudo sentir que la cabeza le daba vueltas cuando se levantó de la cama.

Justo en ese momento, la puerta se abrió de un empujón, allí vio a Vinson y Susanne entrar juntos.

Aunque la expresión de Susanne era sombría, su mirada había cambiado un poco.

Sin embargo, Arielle no entendía muy bien a qué se debía el cambio.

«Señora Stone», tomó la iniciativa de saludarla.

Independientemente de la actitud de Susanne hacia ella, fue ella quien dio a luz a Vinson, así que no le guardaría ningún rencor.

Poco después, Susanne tosió secamente. «Me has salvado la vida, y esto es lo que te debo. Por lo tanto, pienso darte una oportunidad».

En un instante, los ojos de Vinson y Arielle se iluminaron al mismo tiempo.

Vinson tomó la delantera y preguntó: «Mamá, ¿Estás de acuerdo en que estemos juntos?»

«Todavía no». Levantando la cabeza, Susanne fijó su mirada en Arielle. «Tienes que demostrarme tu valía en tres meses. Si vales el riesgo, aprobaré tu relación».

«¿Riesgo?» Arielle parecía desconcertada.

¿Por qué ha dicho que es un riesgo para Vinson estar conmigo? Sin embargo, Susanne ignoró la duda en sus ojos y declaró: «Recuerda que sólo tienes tres meses para demostrar tu valor. No interferiré contigo en estos tres meses, pero si no puedes demostrarlo después de tres meses, no podrás volver a ver a Vin. ¿Puedes hacerlo?»

Apretando los puños con fuerza, Arielle asintió sin dudar. «Sí. ¡Puedo hacerlo!»

¿No es sólo para demostrar mi valor? Después de deshacerme de Henrick, ya no necesito ocultar mi identidad. Para entonces, ella naturalmente verá mi valor. Parece que tengo que lidiar con Henrick tan pronto como sea posible.

Al ver la determinación en sus ojos, Susanne movió los labios, pero al final, no dijo nada y se fue con Geoffrey.

Tras caminar varios pasos, Geoffrey se giró de repente, apretó el puño e hizo un gesto de buena suerte a Arielle.

En respuesta, Arielle curvó los labios y sonrió débilmente, viendo cómo él y Susanne se marchaban.

«Sannie». Vinson se adelantó para abrazarla y preguntó con el ceño fruncido: «¿Te encuentras mejor? ¿Necesitas ir al hospital?»

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