Sus mil secretos -
Capítulo 607
Capítulo 607:
Los iris de Cindy ya se habían contraído tanto como era físicamente posible, y sus ojos se abultaban tanto que estaban a punto de estallar.
Sin embargo, al segundo siguiente, Arielle se rió y respondió: «Eso era mentira». Cindy se quedó sorprendida. La confusión y la sospecha la invadieron.
Estaba a punto de volverse loca cuando exigió: «¿Cuál es la verdad?».
Arielle apartó su sonrisa y contestó con calma: «Tía Cindy, has afirmado que Shandie es una miedosa, pero parece que tú también lo eres. Lo único que hice fue una broma, y ya estás tan asustada que casi tienes un ab%rto. Para ser sincera, ahora te ves muy chistosa».
«Tú…» Cindy estaba tan alterada que casi vomita sangre.
Arielle la ignoró y se dirigió al mausoleo.
Había estado allí una docena de veces porque era donde rendía respeto a su madre.
Se suponía que era un monumento para los Moore, pero los Southall habían ocupado la mayor parte del espacio.
Así de desvergonzados eran los Southall. Eran capaces de robar hasta un mausoleo.
Cindy miró mal a Arielle. La primera apretó tanto los dientes que fue un milagro que no se le rompieran.
Tengo que echarla de la residencia de los Southall hoy mismo.
Arielle creció en un pueblo, y su estatus social es inferior a la media. Es imposible que Vinson siga interesado en ella si el Grupo Southall la echa.
Además, aunque a Vinson le guste su cara bonita, su madre nunca les dejaría estar juntos. Ella es muy sensible a los estatus sociales.
¿Casarse con Vinson Nightshire? ¡Ja! ¡Ni en sueños!
Cindy apretó los dientes y siguió a Arielle.
Al otro lado.
Alfred fue a la habitación del segundo piso para despertar a Malorie.
Era comparativamente fuerte, pero ya no era tan ágil después del anterior ‘accidente’. Necesitaba dormir más horas.
De hecho, estaría cansada toda la noche si no hacía la siesta por la tarde.
Al principio, a Malorie le molestó que la despertaran, pero escuchar que el vidente estaba allí la entusiasmó.
Ya había planeado todo con Cindy y utilizaría a el vidente para echar a Arielle de la casa.
¡Las z%rras que no respetan a sus mayores y son tan retorcidas como esa Maureen no tienen cabida en los Southalls!
Un brillo maligno pasó por los ojos de Malorie. No perdió el tiempo y se apresuró a bajar las escaleras.
Justo cuando llegó al último escalón, perdió el equilibrio y se cayó.
«¡Señora Southall!», dijo Alfred mientras se apresuraba a ayudarla a levantarse.
Después preguntó: «¿Está usted herida? ¿Debemos ir al hospital para que la revisen?»
Los ancianos tenían huesos frágiles, por lo que una caída podía ser problemática.
«Estoy bien», respondió Malorie mientras agitaba la mano.
La verdad era que sentía el pecho un poco hinchado. Sin embargo, no creía que fuera un gran problema ya que sólo había perdido un paso. Por eso no quería ir al hospital y se apresuró a ir al mausoleo.
La tarea más importante es ahuyentar a esa joven. ¡Caer y lesionarse es un asunto menor comparado con eso!
Alfred no vio ninguna herida externa en Malorie, así que no insistió. Simplemente la siguió.
Cuando Malorie llegó al mausoleo, vio que Arielle estaba presentando sus respetos a Shandie.
Para Arielle, Shandie era una persona del pasado. La primera lo dejaba todo después de enviar esas últimas oraciones.
Cindy se quedó a un lado. No quería que Arielle apareciera cerca de la tumba de Shandie, pero tenía que dar un espectáculo.
Suspiró profundamente y se dio la vuelta. Fue entonces cuando vio que Malorie se acercaba.
Los ojos de Cindy brillaron y fue a recibir a Malorie.
«¡Mamá, te has levantado! Rick ha ido a abrir la puerta a el vidente. Deberían llegar pronto».
Malorie asintió con la cabeza antes de desviar la mirada hacia Arielle.
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