Sus mil secretos
Capítulo 540

Capítulo 540:

«Señor, señora, después de confirmar la situación con la policía, el hospital se pondrá en contacto con usted para hablar de la indemnización». Andrew no se olvidó de la orden de Carter. Añadió: «El hospital pagará los honorarios de todos los exámenes médicos que ha hecho hoy aquí. Para todos los exámenes posteriores, nos encargaremos de que una doctora los haga por usted. Por favor, venga con nosotros».

Cindy se negó al instante: «¡No quiero seguir con el examen! Aunque me pongan una doctora, tengo miedo. Sólo tienes que darnos los resultados de las pruebas que te hice antes. Iré a otro hospital para que me hagan otras pruebas».

Al oír eso, los demás pacientes abandonaron también el hospital, sin atreverse a hacerse más exámenes allí.

No cabía duda de que la noticia se extendería como un reguero de pólvora en Jadeborough.

El Hospital Morgan sufriría un golpe devastador sin precedentes al ver manchada su reputación.

Pensando en eso, Andrew parecía exasperado. Señaló con la cabeza a la enfermera que estaba a su lado y le dijo: «Traiga los resultados del examen de la paciente».

«De acuerdo, Doctor Collins». La enfermera se alejó y volvió con un informe en la mano.

Andrew miró a Arielle, aparentemente pidiendo su permiso. Nadie más entendió esa mirada.

Arielle frunció el ceño mientras pensaba en ello. Dado que el futuro de un médico varón estaba arruinado ahora, ella sabía que no podía dejar que nada malo sucediera. Por lo tanto, sólo pudo asentir con la cabeza.

Al ver eso, Andrew se acercó a Cindy y le entregó el informe.

«Según los resultados del análisis de sangre, señora, está usted embarazada. Felicidades»

«¿Qué?»

«¿Qué?»

Henrick y Cindy jadearon de sorpresa al mismo tiempo.

Sin embargo, Arielle pudo comprobar que esta última estaba fingiendo.

Aunque Cindy parecía sorprendida, Arielle notó que sus ojos estaban llenos de triunfo.

«Enhorabuena, Tía Cindy». Arielle sonrió mientras miraba fijamente a Cindy.

Inexplicablemente, ésta se sintió culpable.

La mirada de Arielle era tan aguda que parecía atravesar la mente de Cindy.

Cindy sintió que Arielle podía leer su mente ahora.

Sin embargo, rápidamente recuperó la compostura. Nadie más sabe de mi plan, excepto Matthias. Aunque Arielle lo haya adivinado, no podrá desenmascararme.

Matthias me dijo que mientras siga bebiendo el brebaje de hierbas, tendré todos los síntomas de un embarazo real. Si no me hago la ecografía b-scan, nadie descubrirá que estoy fingiendo mi embarazo.

Probablemente Arielle me felicite como señal de que se está echando atrás.

Con ese pensamiento, Cindy se tapó la boca y dijo: «No me felicites…

Ya soy tan mayor… ¡Oh, no! No sé qué hacer». Entonces se giró para mirar a Henrick.

El hombre no tenía ningún hijo. Como su esposa, Cindy sabía que él siempre quiso tener un hijo. Sin embargo, después de dar a luz a Shandie, no pudo concebir a pesar de que había consumido todo tipo de medicamentos para poder concebir. ¡Henrick debe estar encantado porque estoy embarazada!

Sin embargo, cuando Cindy se giró para mirar a Henrick, éste tenía una expresión compleja en su rostro.

Ella nunca había esperado que él reaccionara así.

Aturdida, su corazón empezó a acelerarse debido a la culpa.

Después de respirar profundamente, estaba a punto de hablar cuando Henrick le preguntó de repente al médico: «¿Qué edad tiene el bebé?»

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