Sus mil secretos
Capítulo 46

Capítulo 46:

Henrick no lo pensó mucho y se alegró de que la colaboración con Arielle no se cancelara. «¡Eso es genial, es genial! Sannie, ¡Agradece al Señor Nightshire rápidamente!»

Arielle miró a Henrick con atención. Henrick la llamaba ‘Sannie’ cuando era útil. Pero cuando era inútil, Henrick la llamaba ‘Arielle’.

Qué gran contraste… miro hacia Vinson y forzó sus palabras. «Gracias».

«No hay problema. En cambio, debería agradecer a la Señorita Moore por colaborar con nosotros». Dijo Vinson y continuó hablando con Henrick. «Me gustaría hablar con la Señorita Moore en privado para conocer los detalles de la colaboración. Señor Southall, por favor, siga a mi personal para firmar el contrato al lado».

«Claro, claro. Tómese su tiempo». Henrick siguió al personal hasta la sala de reuniones de al lado para firmar el contrato con una sonrisa. En la sala de reuniones quedaron Vinson y Arielle. Arielle se mordió los labios y rompió el silencio.

«Siento que tengas que ver a mi padre así…»

«No has hecho nada malo. ¿Por qué te disculpas?» Arielle miró a Vinson. Su mirada era oscura, y ella no pudo encontrar ni una pizca de desdén ni de sarcasmo en sus ojos.

Protegía su dignidad. Arielle frunció los labios y dijo: «Gracias…».

Vinson señaló el asiento junto a ella y dijo: «No agradezcas ni te disculpes más. Toma asiento. Vamos a hablar de negocios».

«De acuerdo». Arielle retiró la silla y se sentó. Se sentaron frente a frente, y ella pudo incluso ver claramente las pestañas de Vinson. Vinson sacó un contrato y dijo: «Soir Coffee es un proyecto importante para nosotros este año. Mañana comenzaremos las campañas de publicidad y marketing. Tu tarea de rodaje puede ser dura durante los días siguientes. Este es tu horario para la semana. Échale un vistazo».

Arielle se hizo cargo de la apretada agenda. Además de las tareas de rodaje, había una serie de tareas como transmisiones en directo y ceremonias de corte de cinta. Miró cuidadosamente y asintió. «De acuerdo, cooperaré con usted».

Tras un breve silencio, Vinson habló: «Creía que no estabas a favor de ser nuestra embajadora. ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión?»

Arielle sonrió ligeramente. «Tengo mis propias razones. Pero no tienes que preocuparte, ya que he aceptado esto, daré lo mejor de mí».

«De acuerdo». Vinson se levantó y dijo, «Deberían terminar con el contrato pronto. Puedes volver y descansar durante el día. A partir de mañana, habrá un equipo que te seguirá en todo momento. Hazles saber si necesitas algo».

«Gracias».

Arielle se levantó también. Vinson la contempló con una mirada dudosa y preguntó de repente: «¿Es Henrick tu padre biológico?».

Arielle se quedó atónita. «¿Si no?» Aunque mi madre había fallecido, pero era cierto que ella y Henrick se casaron. Si mi padre biológico no era Henrick, ¿Quién más podría ser?

«Tal vez deberías hacer una prueba. No te pareces en nada a tu padre». Arielle se quedó en silencio. Henrick era, de hecho, muy diferente a ella en términos de aspecto y personalidad. Pero nunca pensó que Henrick no fuera su padre biológico. Pero desde que Vinson lo había mencionado, una semilla de sospecha se plantó en su cabeza sin saberlo.

Arielle salió de la sala de reuniones. Henrick abrazaba el contrato firmado como si fuera su precioso bebé. «Deja que te acompañe». Vinson hizo un gesto con la mano.

Henrick saludó rápidamente. «Tengo el honor de que el Señor Nightshire firme el contrato personalmente. ¿Cómo puedo molestarle para que nos acompañe?»

Vinson respondió sin cambiar su expresión. «Este proyecto es muy importante para el Grupo Nightshire. Así que seguiré el proyecto personalmente».

El responsable que estaba detrás de él se quedó atónito al escuchar sus palabras. ¿Cómo puede compararse el Soir Coffee con los demás proyectos de Vinson? El responsable dirigió una mirada cómplice a Arielle. Sintió que probablemente había descubierto un secreto impactante.

.

.

.