Sus mil secretos
Capítulo 171

Capítulo 171:

Aunque no fuera la responsable de la muerte de mi madre, las cosas que me hizo después de volver a casa son motivo más que suficiente para despreciarla.

Mientras tanto, Cindy, que llevaba leña a la montaña, estornudó de repente.

¿Alguien me está maldiciendo?

Molesta, Louisa se dio la vuelta y gritó: «¡Deprisa o no podremos volver antes del atardecer!».

«Sí», respondió Cindy con una mirada hosca.

Después de que termine con Henrick, vendré a por ti, pequeña moza.

Mientras tanto, Arielle volvía al plató para su sesión comercial. Por fin podía continuar con el rodaje ahora que el incidente de la explosión se había calmado. Vinson, por otro lado, fue despertado por una llamada del director en el set. «Señor Nightshire, ya estamos listos para el rodaje. ¿Puede venir?»

Sorprendido, Vinson se levantó de la cama y preguntó: «¿Están listos para el rodaje? ¿Ya está Arielle?»

«Sí, la Señorita Moore ya ha llegado».

Vinson se quedó estupefacto. ¿No se siente agotada después de lo ocurrido ayer? No sé si es trabajadora o simplemente estúpida. Sin embargo, así es su carácter. Dejó escapar un suspiro resignado antes de responder: «Vale. Ustedes pueden empezar el rodaje primero. Yo me dirigiré allí en cuanto pueda».

«Sí, Señor Nightshire». El director colgó la llamada. Vinson hizo unos cuantos estiramientos y fue a lavarse los dientes.

Me pregunto si Arielle ya habrá desayunado.

Debería comprarle el desayuno de camino. Vinson recordó de repente la pregunta que le hizo Carter ayer sobre si estaba o no enamorado de Arielle. Para evitar cualquier malentendido, Vinson decidió comprar el desayuno para todos en el set.

Cuando Vinson terminó de lavarse los dientes, bajó corriendo las escaleras. Justo cuando bajó al salón, su camino se vio obstruido por una mano que llevaba una pulsera de jade.

Era su madre, Susanne. Vinson levantó las cejas y preguntó con impaciencia: «¿Qué pasa, mamá?».

Susanne frunció los labios. «Te he dicho innumerables veces que vuelvas a casa antes. ¿Por qué no me haces caso? Me he quedado despierta para esperarte».

Vinson respondió con apatía: «Últimamente he estado ocupado con el trabajo. No hace falta que me esperes».

Susanne frunció el ceño ante Vinson. «¿Acaso tu trabajo es más importante para ti que tu matrimonio? Basta de eso, quiero que comas conmigo y con la Señorita Greene. Hace mucho tiempo que no comemos juntos».

Vinson alineó sus ojos con los de Susanne. «¿Señorita Greene?»

Susanne sonrió antes de responder: «En principio, los Greene debían regresar hoy a Horington. Sin embargo, ahora que la Señorita Greene se ha matriculado en una universidad de aquí, están aquí para quedarse. De hecho, la Señorita Greene se quedará con nosotros durante todo su período de estudios».

Los ojos de Vinson parecían sin vida y fríos mientras permanecía en silencio. Al ver que Vinson estaba callado, Susanne lo arrastró rápidamente hasta la mesa del comedor.

«Ven, déjame presentarte a la Señorita Greene». Encantada, Susanne tenía una gran sonrisa en la cara. La Señorita Greene no sólo pertenecía a una familia prestigiosa, sino que además era muy educada y femenina. Además, como los Greene tenían bastante influencia en Horington, casarse con ella beneficiaría sin duda a los Nightshires.

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