Sus mil secretos
Capítulo 150

Capítulo 150:

Los bomberos se miraron entre sí y volvieron a mirar a los padres. Comprendían lo importantes que eran sus hijos para ellos. Uno de los bomberos se levantó y dijo: «¡Capitán, déjenos entrar! Mi trabajo es poner a salvo a todas las personas y me sentiría mejor aunque sólo pudiera salvar a un niño».

Los ojos del capitán estaban escarlata mientras gritaba: «¡Es orden del comandante que todos ustedes se queden quietos! Ahora, ayúdenme a impedir que esos padres se precipiten. No permitiré que ninguno de ellos arriesgue su vida de esta manera».

El bombero estaba indignado. «¡Capitán! Hay aproximadamente una docena de vidas atrapadas ahí arriba. Además, ¡Son niños! ¿Cómo puedes tener un corazón tan frío?».

El capitán respondió sin emoción: «Tienes razón. Tengo el corazón frío. Por eso no te permití entrar en el edificio».

«¿Qué quiere decir?», preguntó el bombero.

El capitán se puso el casco y respondió: «¿No lo entiendes? He estado aquí todo este tiempo y no he entrado en el edificio. Así que si el comandante pregunta, ya sabes lo que tienes que decir. ¿Entendido?»

Los ojos del bombero se llenaron de lágrimas al instante, «Capitán, ¿Planea ir por su cuenta?»

«El edificio está a punto de derrumbarse en cualquier momento y no puedo ver cómo arriesgan sus vidas. Así que he decidido que, si la muerte se iba a llevar a alguien hoy, sería a mí. ¡Preparados, todos! Voy al baño». Entonces, entró corriendo en el edificio mientras decía esas palabras. Por otro lado, Arielle estaba completamente agotada. Estaba a sólo diez metros del vestíbulo, pero no podía moverse ni un centímetro más. Su respiración se había vuelto muy difícil porque había inhalado demasiado humo. En consecuencia, su visión comenzó a ser borrosa. Sabía que estaba al límite. Entonces, sus pies cedieron y cayó hacia adelante. Sin embargo, se dio la vuelta instintivamente porque sabía que llevaba dos niños en brazos.

Su cabeza fue la primera en entrar en contacto con el suelo al caer. «¡Señorita!» Los niños mayores corrieron a su lado. «No puedo dar un paso más. ¿Podría llevar a estos bebes con sus madres? Caminen otros diez metros y verán la puerta. Sus madres les esperan allí», dijo Arielle.

Unos cuantos niños negaron con la cabeza y gritaron: «No, quiero que vayas con nosotros…». Un niño incluso intentó ayudarla a ponerse en pie.

Sin embargo, el niño tenía muy poca fuerza para soportar el peso de Arielle. Así que cayó al suelo una vez más. Sacudió la cabeza y dijo débilmente: «No queda tiempo. Ve tú primero y pide ayuda. ¿De acuerdo?»

Los niños asintieron, con los ojos llorosos, mientras cogían a los dos bebés de Arielle y se apresuraban hacia la salida. Arielle agotó sus últimas energías al verlos salir corriendo por la puerta y suspiró aliviada. Estaba aliviada de que los niños estuvieran lejos del peligro, pero su visión había empeorado al mismo tiempo. No pudo evitarlo y se entregó a la oscuridad mientras sus ojos se cerraban.

Antes de perder el conocimiento, vio vagamente a un hombre con traje de bombero que se acercaba a ella. «Señorita, ¿Me oye? Despierte». Arielle no respondió a las palabras del capitán, pero éste se dio cuenta de que aún respiraba. Por eso, inmediatamente cargó a Arielle en su espalda y se dirigieron hacia la salida.

Correr llevando a alguien a la espalda era una tarea fácil debido a sus años de entrenamiento. Así, tanto él como Arielle salieron del edificio en poco tiempo. Los niños se habían reunido por fin con sus madres, y se oyó el sonido del llanto.

Iris se precipitó al lado de Arielle y gritó: «Señorita Sannie, ¿Está bien? ¿Sigue viva?»

«¡Sí, está viva! ¡Agua! ¡Necesito agua por aquí!»

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Nota de Tac-K: Tengan una linda linda noche, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔO‿=)ɔ ♥

Nota 2 de Tac-K: Gracias por todo el apoyo en patreon, gracias particulares a Gabi Ro, Elkana Sancho, Cristel Flores, Claudia Donoso, Sandra Sami, Lu García, Lavida Esunam y Yuly Matos, quienes se sumaron recientemente n.n

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