Sus mil secretos
Capítulo 1311

Capítulo 1311:

«¿Qué ocurre, Señorita Moore?». preguntó Sasha tras ver el drástico cambio en la expresión de Arielle.

«¡Todo va bien!» Arielle se dio la vuelta y se alejó mientras le indicaba a Sasha que no se moviera.

Aunque Sasha hizo lo que le decían y se quedó quieta, sus ojos estaban fijos en Arielle. Al fin y al cabo, era la guardaespaldas de Arielle y su deber era protegerla.

Sasha no sólo debía obedecer las órdenes de Arielle, sino también velar por la seguridad de ésta.

«¿Quiénes son? ¿Dónde están mis padres?» preguntó Arielle solemnemente mientras agarraba con fuerza el teléfono.

Resultó que quien llamaba no era Andrea, sino un desconocido.

«Tranquila. Por ahora están a salvo», dijo el hombre al otro lado de la línea. Sonrió satisfecho mientras echaba un vistazo a los Wilhelm, a quienes sus subordinados habían atado las manos.

Arielle frunció las cejas al oír su voz familiar. ¿Por qué me parece haber oído su voz antes?

«Mmm… Mmm…»

Los Wilhelm quisieron advertir a Arielle que se mantuviera alejada, pero no pudieron pronunciar ni una sola palabra porque tenían la boca llena de trapos.

Los sonidos apagados del otro lado del teléfono interrumpieron los pensamientos de Arielle.

El corazón le dio un vuelco. «¿Qué quieres? No te atrevas a ponerles los dedos encima. Ven a por mí si te atreves».

Arielle intentó mantener la compostura en la medida de lo posible, aunque estaba muy preocupada por los Wilhelm.

De hecho, había evitado ponerse en contacto con ellos durante años porque temía meterlos en problemas.

Sin embargo, su mayor temor se había hecho realidad.

Mientras tanto, en Lightspring, el hombre estaba sentado junto a la ventana y sonreía.

Amenazó: «Si no quieres que hagamos daño a tus padres, ven por tu cuenta ahora mismo. No digas que no te lo advertí. Podrían meterse en problemas si se lo cuentas a Vinson o a cualquier otra persona».

En cuanto supo lo importantes que eran los Wilhelm para Arielle, corrió hacia Lightspring y se apoderó de la pareja. Sabía que podría controlar a Arielle una vez que los Wilhelm estuvieran en sus manos.

Arielle presionó con fuerza el teléfono al oír la amenaza.

¿Cómo se ha enterado de mi relación con Vinson? ¿Quién es? ¿Y cómo ha conseguido contactar con mis padres?

«No se lo diré a nadie. No te atrevas a ponerles un dedo encima, te lo advierto. Te haré responsable si les ocurre algo malo», advirtió Arielle con frialdad.

Ya que me investigó tan a fondo, debería saber que soy una persona vengativa.

«No los tocaré mientras vengas sola” prometió el hombre. Tras una breve pausa, continuó: «Será mejor que vengas a reunirte conmigo en los próximos dos días, o no me haré responsable de nada malo que ocurra después».

«Allí estaré, no te preocupes. Cuida bien de mis padres y de mi hermano». Arielle presionó los dientes mientras enfatizaba sus palabras.

Naturalmente, el hombre aceptó su condición.

Arielle terminó la llamada con una mirada sombría y se recompuso. Tras pasarle el teléfono a Sasha, volvió al plató y continuó rodando la última escena.

Cómo deseaba poder ir corriendo a Lightspring en ese mismo momento, pero temía que Vinson se enterara.

Como el hombre había amenazado con matar a sus padres si Vinson o cualquier otra persona se enteraba, no podía contárselo a nadie y arriesgarse a poner en peligro la vida de sus padres.

«¿Seguro que estás bien para continuar hoy con el rodaje?» preguntó Arielle a Jason, pues no quería perder más tiempo. Las meteduras de pata de Jason eran demasiado para Arielle.

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