Sus mil secretos
Capítulo 1028

Capítulo 1028:

Arielle había estado de pie ante la puerta de la sala de conferencias durante un buen rato antes de entrar, así que había oído toda la discusión entre Kimi y Calvin.

Por lo tanto, su declaración había aprobado directamente el punto de Kimi y desacreditado las acusaciones de Calvin.

«¡Y una mi%rda! Pues escribe ahora mismo un código de programa que funcione». gritó Calvin furioso con las mejillas coloradas.

«Eso es exactamente lo que voy a hacer», respondió Arielle con calma.

«¡Ja! ¡Para que lo sepas, este brazo biónico necesita al menos cientos de códigos de programa para funcionar! ¿Sabes siquiera por dónde empezar?» se burló Calvin con sarcasmo.

Arielle frunció el ceño. «Eres demasiado ruidoso».

«¿Eh?»

Lo siguiente que supo Calvin fue que Sasha y Blake aparecieron y empezaron a arrastrarlo fuera de allí.

«¡Eh, suéltenme! ¿Quiénes son? No pueden lanzar este producto sin mí».

El lacayo de Oliver empezó a entrar en pánico ya que no pensaba soltar a Calvin de esa manera.

«¡Para! ¡Para ahora mismo!»

Apenas había dado un paso cuando Arielle le advirtió: «Serás el siguiente en irte si intentas detenerlos».

El hombre se detuvo en seco de inmediato.

No soy más que un don nadie que trabaja a las órdenes de Oliver, ¡Así que Arielle no tendría ningún problema en deshacerse de mí si quisiera!

Con eso en mente, el hombre sólo pudo callarse y ver cómo Calvin era arrastrado lejos por los dos que eran la mitad de su tamaño.

Las pertenencias personales de Calvin fueron arrojadas fuera del edificio de oficinas junto con él, haciendo que hiciera una mueca de dolor por el impacto.

«¡Se arrepentirán de esto!», rugió mientras temblaba de dolor y humillación.

Su voz era tan alta que incluso Kimi podía oírla desde el interior de la sala de conferencias.

«Yo también puedo escribir el código del programa, Señora Presidenta. El problema es que el producto se lanzará muy pronto. Todas las tiendas han asignado ya el espacio para nuestro producto, así que no tenemos tiempo de cambiar el código. Puede que no lleguemos a tiempo si Calvin se marcha». exclamó Kimi con cara de conflicto.

Mirándole, Arielle preguntó: «¿Cuántos días nos quedan?».

«Tres días como mucho. Tenemos que terminar de probar el brazo biónico en tres días».

Arielle asintió. «Lo tendré todo listo antes de que salgan del trabajo mañana».

Todos se quedaron boquiabiertos al oír eso, especialmente Kimi, que había supervisado cada paso del proyecto desde el principio.

Es increíblemente difícil conseguir que este producto funcione, ¿Y esta hermosa joven afirma que lo tendrá listo mañana por la tarde?

«S-Señora Presidenta… ¿Habla en serio?» preguntó Kimi.

«Sí», respondió Arielle asintiendo con la cabeza. «He manejado proyectos mucho más difíciles antes, así que este está bien. Puedo ponerlo en marcha a tiempo, así que asegúrate de mantener a la gente como Calvin fuera de aquí. No quiero que nadie lo sabotee ahora».

Los ojos de Kimi se iluminaron al instante. «¡Entendido!»

«¿Te importa si me llevo este brazo biónico a casa?». preguntó Arielle mientras volvía a guardarse el teléfono en el bolsillo.

«¡No, en absoluto!» respondió Kimi y le hizo un gesto para que se adelantara.

«Gracias. A partir de ahora eres el jefe del equipo, Kimi. Quiero que te encargues de todos los proyectos de Calvin».

Aunque Kimi estaba realmente sorprendido, no rechazó la oferta. «¡Claro, no te defraudaré!».

«Kimi, ¿Estás seguro de que podemos confiar en ella?», preguntó uno de los diseñadores después de que Arielle saliera de la habitación.

«Ahora mismo no tenemos más remedio que confiar en ella. Además, definitivamente no es una persona corriente si fue capaz de contactar con la vicepresidenta de la Universidad Maxwell.»

Por alguna inexplicable razón, Kimi se encontró confiando bastante en Arielle.

Fue entonces cuando los demás recordaron la llamada telefónica de antes.

«¡Oh, tienes razón! Incluso el jefe de programa de Calvin estaba siendo muy educado y respetuoso con ella, como si fuera alguien importante o algo así.»

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