Capítulo 131:

Edmund admitió que se equivocó al no haberle explicado las cosas a Chelsea después de pasar la noche con Diane. Razonó que debería haberlo hecho mejor en lugar de entristecerla más de lo que ya estaba.

Varios chismes sobre él y Diane se extendieron por todas partes después de aquel incidente. Aunque sabía que era obra de Diane, hizo la vista gorda. No le perturbaba que Chelsea fuera despreciada en ese momento debido a su supuesta infidelidad.

Aunque sabía que no debía hacerlo, lo hizo de todos modos. Disfrutaba haciéndole daño.

Esto se debió a que la odiaba tanto en ese momento. ¿No lo había engañado para que se casara con ella? Estaba atrapado con ella en ese matrimonio, así que se empeñó en hacerla sufrir por haberla engañado.

Ser indiferente, despiadado y grosero con ella era una forma de vengarse. Quería ver cómo podía soportar el sufrimiento incesante.

Tal vez hubiera dejado de hacer todo eso si ella hubiera llorado a moco tendido y se hubiera enfrentado a él.

Todo lo que quería era verla triste y dolorida.

Era la única forma de disipar la ira que sentía en su corazón.

Para su consternación, Chelsea nunca lloró en su presencia ni le pidió que la amara durante su matrimonio. Parecía que no estaba triste en absoluto. Así, fue aumentando su crueldad hacia ella a medida que pasaban los días.

No fue hasta que Chelsea le acusó de haberla engañado que se dio cuenta de que había estado reprimiendo su dolor durante mucho tiempo.

Su corazón estaba con ella en ese momento. Quería explicarle las cosas. Pero después de que ella le colgara el teléfono por milésima vez, su corazón volvió a endurecerse.

Era bastante extraño que Chelsea hubiera llamado para expresar su gratitud, pero acabaran discutiendo.

Tras colgar el teléfono, Chelsea se controló y entró en Facebook para enviar a Edmund una solicitud de amistad.

Un leve remordimiento se apoderó de su corazón. Pensó que no debería haber colgado de aquella manera. Después de todo, él había acudido hoy en su ayuda. Pero no podía tragarse su orgullo y llamarle para disculparse. Enviarle una solicitud de amistad era una forma de demostrarle que lo sentía.

Pensaba enviarle un mensaje de disculpa a través del messenger de Facebook, así quedarían bien.

Chelsea le envió una solicitud de amistad. Estaba pendiente porque se necesitaba la aprobación de Edmund.

Sin embargo, pasaron varios minutos y él no aceptó su solicitud. Chelsea se quedó un poco atónita. ¿No había querido siempre ser su amigo en Facebook? ¿Por qué no aceptaba ahora? ¿Era porque todavía estaba enfadado?

«¡Uf! Qué hombre tan infantil».

Chelsea puso los ojos en blanco y cerró la sesión de Facebook, ya que no tenía sentido esperar tanto tiempo. Entró en su cuenta de Twitter y comenzó a borrar sus viejos tweets sobre su vida amorosa.

Sería extraño que borrara todos sus tweets, así que dejó las reseñas de películas y obras de televisión y las fotos de comidas deliciosas.

Después, llamó a Luka para informarle de que prefería defenderse en Twitter a través de su cuenta.

A Luka, que no se sorprendió en absoluto, le pareció una buena idea. «Vale, puedes hacerlo».

Luego añadió: «En realidad pensaba que no estabas en Twitter. Por eso decidí usar la cuenta oficial de la empresa para defenderte, puesto que ya tiene muchos seguidores. De todas formas, tu idea es buena».

Chelsea dijo agradecida: «Sí, soy consciente de su amabilidad, señor Pierce. Muchas gracias. Pero creo que es mejor que me defienda a través de mi cuenta. Hay muchos actores populares contratados por Peak Entertainment. Sus carreras estarían en riesgo si el público decide boicotear a la compañía. No quiero que nadie sufra pérdidas por mi culpa».

Chelsea continuó contándole a Luka que Edmund le había dado un registro de sus transferencias de dinero a Hilton y Garry a lo largo de los años Luka exclamó: «¡Vaya! Eso es genial. Seguro que ganas esta batalla con esas pruebas. Creo que juzgué mal a Edmund. No parece un hombre despiadado».

Fue en ese momento cuando Luka comprendió por fin por qué Chelsea había cambiado de opinión de la nada. Edmund debió haberle dado esa idea.

No era la primera vez que Edmund desbarataba su plan. ¿Cuál era su problema?

¿Por qué le preocupaba tanto lo que pasaba en la vida de su ex mujer? ¿Por qué no quería que otros hombres la cortejaran? Luka reflexionó profundamente.

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