Solo para poder recuperar tu amor
Capítulo 117

Capítulo 117:

Chelsea no tenía ningún deseo de discutir con Edmund sobre todo teniendo en cuenta que se encontraba en ese estado de embriaguez. Sin embargo, él la sujetó de la cintura con fuerza y no dio muestras de soltarla. En cambio, insistió: «Todavía no me has dado una razón».

Chelsea levantó la cabeza y miró al hombre que tenía delante. Sus profundos ojos estaban llenos de preguntas.

Había algo que no encajaba. Edmund no era el tipo de hombre que molestaría a su ex mujer.

Parecía agotado. Chelsea no sabía por qué estaba aquí. Se dijo que era el alcohol lo que le hacía comportarse así.

Miró fijamente a Edmund y dijo con indiferencia: «¿Quieres una razón? Vale, te la diré».

Parecía que Edmund era todo oídos. Respirando hondo, dijo con calma: «No quiero que me relacionen con un hombre casado a menos que sea por motivos de trabajo. Y por eso pensé que era mejor que no nos hiciéramos amigos de Facebook».

Edmund, que estaba más borracho de la cuenta, la miró incrédulo y preguntó: «¿Quién demonios es un hombre casado?».

Chelsea le dedicó una sonrisa forzada, como si quisiera decir que él era el hombre al que se refería.

Recordó que últimamente Diane estaba en todas las noticias. La habían pillado comprando en joyerías y tiendas de bodas. Casi todo el mundo lo sabía. ¿Cómo podía Edmund no saberlo?

Esto parecía indicar que su matrimonio tendría lugar en un futuro próximo. Era obvio que Edmund sería un hombre casado en poco tiempo.

Sin embargo, Diane aún no lo había admitido explícitamente. Cuando los periodistas la felicitaban, ella ponía cara fría y los despachaba diciendo que simplemente estaba dando un paseo. Negaba que esto tuviera algo que ver con Edmund.

Si hubiera sido en el pasado, Diane habría accedido dulcemente.

Aunque Diane lo negara, todos entendían que Edmund y ella se iban a casar.

¿Por qué alguien visitaría una tienda de bodas si no se estuviera preparando una boda? Edmund apretó con fuerza la cintura de Chelsea. Con rostro frío, exigió: «Entonces dime cuándo me casé con ella».

Chelsea seguía muy tranquila. Aclarándose la garganta, dijo: «Aunque ahora no estés casado, la llevas en el corazón. Para mí, ésa es razón suficiente para mantenerme a distancia de ti. Ya te considero un hombre casado».

La furia se elevó en el corazón de Edmund al oír estas palabras. ¿Qué le pasaba?

No había nada entre él y Diane, ¡y sin embargo lo tachaba de casado!

Cuando Edmund estaba a punto de decir algo, Chelsea le dirigió una sonrisa de desaprobación y dijo: «Parece que tanto tú como tu padre disfrutáis manteniendo a más de una mujer».

El padre de Edmund, Jaime, tuvo una aventura hace unos años. Por aquel entonces, los rumores sobre el romance de Edmund con Diane habían sido una de las discusiones más acaloradas.

Y ahora, Edmund parecía seguir los pasos de su padre. Justo antes de casarse con Diane, Edmund estaba haciendo un intento de reconectar con su ex mujer. Con cierta amargura se dio cuenta de que padre e hijo tenían muchas similitudes.

Las palabras de Chelsea hicieron que Edmund se despejara un poco, y su mano alrededor de su cintura se aflojó involuntariamente.

No esperaba que Chelsea fuera a tocar este tema y arrastrara a su padre. En el pasado, su padre y su hermano le habían caído mal, pero ahora parecía que Chelsea también tenía una pésima opinión de su familia.

No habia nada que quisiera decir en defensa de Jamie, asi que guardo silencio por un rato.

«Señor por favor conduzca». Cuando Edmund se distrajo, Chelsea aprovecho para empujarlo y entrar en el coche.

Ella sabia que era inapropiado que dos personas atacaran a los padres de la otra cuando discutian. Pero ahora, Edmund había puesto a prueba sus límites al no dejarla marchar. La había puesto furiosa y hablaba sin pensar.

Culpó a Edmund por todo. ¡Él la había hecho perder la calma!

¿Por qué no podía aceptar el hecho de que estaban divorciados? ¿Por qué la abrazaba sin su consentimiento? ¿Qué clase de mujer se creía que era?

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