Sin escape -
Capítulo 123
Capítulo 123:
¡Franklin!
Grace finalmente supo cuál era el objetivo de la trampa de hoy.
Celina dijo que había sido encomendada por una persona.
No importaba quién era esa ‘persona’.
Pero, ¿Franklin aparecía aquí por casualidad?
Ella perdió su riñón, no su cerebro.
En su corazón, ella ya había entendido. No dio un vistazo a Franklin, sino a Celina que estaba a un lado. Celina naturalmente notó la mirada de Grace. Giró la cabeza, pero no vio la expresión derrotada o avergonzada en el rostro de Grace, pero vio la claridad de los ojos de Grace, que parecía podía ver a través de todo.
Celina se sintió desconcertada. Bajo los ojos de Grace que podían ver a través de todo, parecía volver a cómo se sentía cuando se enfrentaba a Grace hace tres años… En ese momento, ella y Grace estaban en una confrontación cara a cara. No importaba lo que ella hubiera hecho, los ojos de Grace eran siempre claros, ¡Como si Grace conociera cada uno de sus trucos!
Parecía que sus pequeños trucos no eran nada a los ojos de Grace… ¡Pero eso fue hace tres años!
Hace tres años, ¡Grace tenía un fondo fuerte y era arrogante!
¿Y ahora?
¿Grace, que había perdido todo lo que tenía, todavía tenía los ojos tan claros?
¡Dios, qué injusto!
¿Por qué una p$rra podía conservar semejante mirada?
Franklin apretó el puño: «¡No me lo creo! Ella no es la hija de la Familia James. No ha sobornado a unos delincuentes. ¡Grace es una mujer común y corriente! ¿De dónde sacó el dinero para hacer esto?».
Celina estaba molesta con Grace. En este momento, ella vio a Franklin haciendo todo lo posible para proteger a esta mujer.
Los celos en su corazón parecían tragarla, «Señor Cordon, usted es realmente interesante. ¿No es el hermano de Grace, Payne James, quien está a su lado? Pero no es culpa suya. Usted se mudó a los Est$dos U antes y no sabías estas cosas. No es sorprendente».
Celina comenzó a hablar, e incluso se burló. «Una chica normal y corriente, dijiste. Se llama Grace. Hace tres años, era la hija de la Familia James. En aquella época, todo el mundo en Ciudad S la conocía.
Sin embargo, le tendió una trampa a su amiga para que ésta fuera vi%lada por un grupo de delincuentes. Su amiga no pudo superarlo y se s$icidó. Este incidente causó sensación esa época en Ciudad S, y todo el mundo lo sabe. Lo más ridículo de todo es que el hombre al que amaba, fue el que la envió a la cárcel».
Franklin dio un vistazo a Payne. Sus ojos se llenaron de preguntas: «… ¿Es cierto?».
Payne no dijo nada, pero asintió.
Franklin se sintió como si hubiera sido golpeado por algo.
Volvió a dar a Grace, «¿Es cierto?»
Grace miró a Franklin a través de la multitud… El caos en los ojos del niño grande fue claramente visto por ella.
Celina añadió: «¿Sabe quién es Caden? Señor Cordon, usted debe conocerlo. En ese momento, él personalmente envió a Grace a la cárcel.
Si no sabe quién es… entonces puedes preguntarle al Señor Payne que está a tu lado. Tú puedes preguntarle si la Familia James aún reconocen a Grace… »
«Recuerdo que la Familia James declaró en el periódico que no consideraban a Grace como miembro de la Familia James». Agrego Celina, pero miró fijamente a Payne: «Esta bien que nosotros no le creamos a Grace. Pero ni siquiera su familia le cree, así que, Señor Cordon, dígame, ¿Es culpable?»
«Si su familia no le cree, entonces, Señor Cordon, dígame, ¿Es ella culpable?» Esta frase hizo que Franklin se sintiera un nudo en su corazón.
Miró a Payne, pero éste giró la cabeza… ¡Esta acción significaba que lo que Celina y los otros decían era cierto!
Franklin todavía estaba aturdido… Siempre pensó que Grace tenía sus propias dificultades.
¡Ni siquiera sabía que era esa hija de la Familia James y que había hecho algo tan despreciable!
Incriminación, soborno, planeación, vi%lación en grupo… ¡Todos esos crímenes eran totalmente horribles!
Estaba un poco confundido. De repente, miró la maleta de billetes y recordó lo que Celina y los demás acababan de decir: «¡Grace, puedes hacer de todo por dinero!».
También recordó que cuando estaba ayer en la sala privada, las extrañas palabras de Cayne… Así que resultó que todos lo sabían menos él.
Él podía aceptar todo lo de Grace, pero…
¡Él esto no podía!
Franklin no podía aceptarlo. La primera vez que trataba a una mujer con sinceridad… ¡Pero era una mujer tan viciosa! Era tan orgulloso. ¿Cómo pudo enamorarse de una asesina tan egoísta y fea?
¡Puede que no sea hermosa, ni linda, ni afectuosa! ¡Pero!
¡No podía ser viciosa! ¡Su corazón era feo, sucio y negro!
Él no podía aceptarlo. ¡No era aceptable!
No, no, no… Sólo estaba obsesionado con su cuerpo y sus labios. Sólo estaba fuera de sí por un tiempo. Para que él pensara que esto era amor… Él, Franklin, era el heredero de la Familia Cordon. ¿Cómo podría enamorarse de una asesina desvergonzada, mala y fea?
¡No lo haría!
¡Desde el fondo de su corazón, olvido firmemente todo!
Franklin finalmente dejó caer su mirada en la multitud. Se quedó mirando a la mujer que se arrodillaba sobre una rodilla y masajeaba el pie de un anciano… «Te daré una oportunidad. Lo que han dicho… ¿Es mentira?»
En este momento, Franklin ya no era el niño grande a los ojos de Grace. Era diferente de antes. No muy lejos, la vista de Grace cruzó la multitud para caer sobre el hombre que había estado con ella durante muchos días… Después de todo, él vio el lado más humilde de ella. Le dejó ver quién era ella y su pasado.
Grace ignoró el dolor de su corazón. Miró hacia Franklin a través de la multitud… pero no esperaba que él destapara la caja de Pandora de esta manera. No esperaba que él conociera su humilde pasado de esta manera.
Dijo lentamente: «Franklin», era la primera vez que llamaba así a este chico grande, «Si dijera que no le tendí una trampa a Wallis. Y que no soborné a los delincuentes para que la vi%laran. ¿Lo creerías?»
Celina se rió, «Grace, te atreves a hacerlo, pero no te atreves a admitirlo. ¡Qué desvergonzada eres! Si no hubieras hecho nada, ¿Te habremos culpado siendo inocente? Incluso si nos equivocamos, ¿También se equivocó Caden?
Si no lo hiciste, ¿Puedes explicar por qué tus padres biológicos no te creyeron? Tu hermano Payne está ahí de pie. ¡Te están intimidando! ¿Por qué no se levanta para ayudarte? ¿Dejas que te intimiden? »
¡Cada frase y cada palabra apuñalaban el corazón de Grace!
«Si tú no lo hubieras hecho, ¿Caden te haría daño?
«Si no lo hubieras hecho, ¿Por qué tus padres te niegan?
«¡Si no lo hubieras hecho, tu hermano no se limitaría a ver cómo te acosan!»
¡Frase tras frase!
Grace respiró profundamente. El dolor en su pecho la asfixiaba… Ella también quería gritar de vuelta.
¿Es mi culpa que Caden me haya hecho daño?
¿Es mi culpa que mis padres no me admitan?
¿Es mi culpa que mi hermano esté frente a mí viendo cómo me acosan y sea indiferente?
Por culpa de Caden, por culpa de mis padres, por culpa de la elección de mi hermano… Por lo tanto, aunque no soy culpable, ¡Me vuelven culpable! ¿A quién le importaba la llamada verdad?
De todos modos, incluso Caden la castigó, así que por eso ella fue quien hizo eso.
De todos modos, sus padres se negaron a admitirla más, ¡Así que por eso ella fue quien hizo eso!
De todos modos, cuando la intimidaron tanto, su hermano se quedó parado y se negó a decir una palabra por ella… ¡Ella debe haber sido responsable de eso!
Su mirada dio vueltas a todos… Todos pensaban lo mismo. De todos modos, no era asunto suyo. Podían ser amigos si no pasaba nada. Pero en el momento siguiente, si uno de ellos estaba en el suelo y fuera de combate, ¡Sería muy probable que la primera persona que le hiciera daño fuera su ‘buen amigo’!
Grace cerró los ojos de repente. ¡Solo así podía tapar las tormentas de emociones que surgían en sus ojos!
Ella no quería que la vieran. No quería que la vieran… ¡Ellos no merecían ver!
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