Segunda oportunidad
Capítulo 300

Capítulo 300:

Cuando cesó el sonido del agua corriente, guardé rápidamente el teléfono.

Al día siguiente, después de que Derek se fuera a trabajar, me cambié de ropa y salí a Sousen estaba cubierto de nieve; sólo había unas pocas personas en la carretera. Al pasar por la frutería, compré algunas fresas y manzanas, entonces me dirigí al hospital.

La puerta de la sala de Alvaro estaba abierta, y él estaba solo dentro. Estaba tumbado en la cama dando vueltas a su teléfono.

Al oír los pasos, dio un vistazo a la bolsa de fruta que tenía en la mano y sonrió. «¿Cómo sabes que me gustan las fresas?»

Puse la fruta en la mesita de noche y fruncí el ceño.

«No sabía que te gustaban las fresas. Compré algunas al azar. Si hubiera sabido que te gustaban las fresas, no las habría comprado».

Sin embargo, no parecía enfadado, más bien me dio una sonrisa juguetona. «Me gusta todo lo que compras». Puse los ojos en blanco y le miré la pierna escayolada. Comprendí que debía de haberse roto los huesos.

Mi imitación disminuyó cuando me di cuenta de que se había lesionado para salvarme.

«¿Qué ha dicho el médico?» Le pregunté.

«Es un poco grave». Al oír eso, me puse nerviosa.

«¿Cómo de grave es?» Alvaro suspiró y me miró con ojos resentidos.

«Soy discapacitado; el médico ha dicho que ya no puedo caminar. Tú tienes que hacerte responsable de mí». Fruncí el ceño y di un vistazo al informe de diagnóstico que colgaba de la mesilla de noche. Respiré aliviada cuando vi que sus resultados eran normales.

«Antes era enfermera. Sé que es un engaño». Lo fulminé con la mirada.

Alvaro sonrió y me dio la mano. «Sólo estoy bromeando».

Me deshice de su mano.

«No tiene gracia. ¿Deseas ser discapacitado?» Se rió.

«Tengo sed. ¿Puedes traerme un vaso de agua?»

Le miré fijamente mientras me tiraba de la manga con cuidado.

«Está bien. Sé lo patético que soy. Nadie se ocupa de mí. Tengo que pedir ayuda a la enfermera hasta para beber agua. Si sigo llamando, mostrarán su actitud y me ignorarán. ¿Puedes traer agua, por favor?». Finalmente le conseguí un vaso de agua.

Le entregué el vaso de agua y estudié su rostro. «¿Por qué nadie se ocupa de ti? ¿Dónde están tus amigos?»

Alvaro tomó un sorbo de agua y arrugó la nariz con disgusto. «Son todos unos patanes. Lo único que saben es pelearse con la gente en lugar de cuidar de mí. Olvídalo. Quiero vivir una vida larga y sana».

Mi mente revoloteó hacia su abuela, pero era demasiado vieja. Probablemente no quería que ella se enterara de esto. Me pregunté si no tendría a nadie más que lo cuidara, pero no me molesté en preguntar.

«Muy bien. ¿Qué me vas a mostrar?» le pregunté. Me dio un vistazo y sonrió.

Pensando que me había engañado, cogí mi bolsa y me di la vuelta para irme.

«¿Qué pasará si Derek ve este vídeo?» dijo Alvaro.

Me detuve y me di la vuelta cuando cogió su teléfono y me lo mostró. Mis ojos se abrieron de par en par con horror. Aunque el vídeo estaba oscuro, mi rostro y el de Alvaro seguían siendo claros.

Estábamos en la habitación de la casa de Hunter. La forma en que Alvaro me abrazaba y me besaba la frente se veía ambigua a través del objetivo. No sabía que Alvaro había encendido la cámara junto con la linterna la noche anterior.

«¡Tú eres un hombre despreciable!»

Cogí su teléfono, encontré el archivo original, lo borré y tiré el teléfono sobre su colcha. Alvaro me dio un vistazo con las manos cruzadas detrás de la cabeza.

«Bueno, hay una copia de seguridad de ese vídeo en mi nube».

Apreté los puños mientras la rabia me recorría las venas. «¿Qué quieres?»

«Tú tienes que venir siempre que te llame, o le enviaré el vídeo a Derek», me amenazó.

Levanté mi bolso y quise romperle el rostro con él. «¿Quieres morder la mano que te da de comer? Dios lo está viendo todo», dijo sonriendo, retiré mi bolso, me di la vuelta y me fui enfadada.

Lean apareció en la puerta. Me miró, pero le ignoré y me fui enfadada.

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Nota de Tac-K: Tengan una linda tarde, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿=)✌

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