Segunda oportunidad
Capítulo 220

Capítulo 220:

Sabía que el concurso de esta noche podía hacer o deshacer a muchos de los aspirantes. El vestido arruinado era, sin duda, el resultado de los esquemas solapados entre los rivales.

«¿Y si voy y te consigo un nuevo vestido blanco?» Le ofrecí.

«¿Crees que todavía podemos arreglar esto?» Estaba realmente preocupada por Becky, y esta era la mejor idea que se me ocurrió con tan poco tiempo. Ella lo meditó un momento antes de asentir.

«Hay un centro comercial cerca, y todavía queda algo de tiempo antes de la transmisión en directo. Tú podrías trabajar si te das prisa. Gracias, Eveline. Eres la única en la que puedo confiar».

«Por supuesto, de nada. Pero me temo que no puedo prometer que te guste el diseño que elija. Sólo tengo que asegurarme de que sea blanco, ¿Verdad?».

Becky asintió de nuevo. «El estilo no importa. Se trata de una emergencia, así que con tener un vestido adecuado basta». No perdí más tiempo y salí del local.

Ni siquiera me molesté en informar a Derek y a los demás antes de subirme a un taxi y dirigirme al centro comercial tan rápido como pude.

La suerte quiso que hubiera un montón de vestidos de gasa blanca para elegir. A pesar de mis palabras, hice lo posible por elegir el más hermoso de la selección. Seguía siendo un concurso, y no quería avergonzar a Becky siendo descuidada.

Me llevó media hora encontrar finalmente un diseño satisfactorio. Además, era bastante parecido al vestido roto. Lo pagué rápidamente y volví a la estación de televisión a toda prisa, dirigiéndome al camerino. Sin embargo, cuando estaba a punto de entrar en la zona de bastidores, una mujer me bloqueó el paso.

«Aquí sólo pueden entrar los artistas y el personal».

De su cuello colgaba un permiso de trabajo. Debe de ser una empleada de la cadena de televisión. Levanté la bolsa de ropa y pregunté: «¿Está Becky ahí? He venido a darle su vestido. ¿Puede entregarle esto, por favor?».

La mujer frunció el ceño y se quedó mirando la bolsa. «Ya ha salido al escenario». Me quedé helada, sin palabras.

¿Cómo podía Becky salir al escenario con un vestido estropeado?

Me apresuré a volver al estudio para comprobarlo por mí misma.

La transmisión en directo ya había comenzado. Las luces brillantes y coloridas parpadeaban en el escenario y rebotaban en las paredes. Era la actuación inicial de todos los concursantes, y el ambiente era muy animado. Becky estaba de pie, alta y bonita, en la posición central. La reconocí enseguida.

Su vestido blanco estaba intacto y abrazaba su cuerpo perfectamente.

¿Quizás había encontrado una solución diferente mientras yo no estaba?

No pude evitar culparme por no haberme movido lo suficientemente rápido. Había llegado demasiado tarde. En el fondo de mi mente, una preocupación persistente comenzó a formarse.

¿Y si ella pensaba que lo había hecho a propósito?

Volví a mi asiento con el corazón encogido. En cuanto me senté, Louise se giró y me preguntó dónde había estado.

Me acerqué y le susurré al oído: «He ido al baño».

Después de la actuación inicial, el presentador subió al escenario y dio la bienvenida a todos al espectáculo. Una vez hechas las formalidades, insinuó misteriosamente que un invitado importante iba a unirse a los jueces del concurso de esta noche. El público se entusiasmó.

Evidentemente, sus palabras habían despertado el interés de todos. Una música de suspenso empezó a sonar de fondo y todas las luces se centraron en el escenario. En el siguiente segundo, las cortinas se abrieron en medio de un estruendoso aplauso mientras este misterioso invitado caminaba lentamente hacia el frente del escenario. ¿Era ella?

La misteriosa invitada no era otra que la Señora Mayer. Llevaba un vestido exquisitamente confeccionado, un ligero maquillaje y una ligera permanente en su corte de cabello. Se la veía muy elegante y con estilo.

«¡Demos todos la bienvenida a la Señora Lavinia Mayer!»

Otra ronda de aplausos siguió al anuncio de la anfitriona. Procedió a hacer una larga presentación, mostrando que Lavinia era una artista cosmética reconocida internacionalmente, y que también era la asesora de imagen del show de talentos. Ni que decir tiene que esta noche iba a desempeñar un papel fundamental como parte del jurado.

Lavinia sonrió y sus ojos recorrieron el público. Cuando su mirada se posó en mí, se quedó un instante. Luego, asintió ligeramente con la cabeza antes de seguir adelante.

El presentador seguía parloteando y lo que dijo a continuación dejó a todos boquiabiertos.

Resultó que la estimada Señora Mayer ya había superado los sesenta años. Sin embargo, tenía una piel clara y unos rasgos delicados, que la hacían dar la impresión de tener como mucho cuarenta años. Incluso yo tuve que admitir que admiraba el régimen de piel que empleaba para conseguir ese brillo juvenil.

El presentador terminó finalmente la presentación justo cuando Lavinia se sentó entre los jueces. Se volvió hacia el público una vez más antes de decir: «Puede que no sea tan exigente en lo que respecta al talento para cantar, pero sí estoy cualificada para juzgar la imagen y la presencia escénica de los concursantes. Dicho esto, les deseo a todos buena suerte».

Apartándose del escenario, Becky también dio una mirada de sorpresa a Lavinia.

El programa continuó tal y como estaba previsto, y a continuación llegaron las actuaciones individuales. Los concursantes actuaron según las suertes que habían sacado antes, y fueron pasando por el escenario uno a uno.

«¿Por qué no he visto a Cindy?» preguntó Felix de repente.

Ahora que lo había mencionado, recordé vagamente que tampoco había visto a Cindy en el número inicial. Esa chica era muy testaruda y competitiva, por fin había tenido la oportunidad de realizar sus sueños. Esperaba sinceramente que al final tuviera éxito. Pero, ¿Dónde estaba?

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Nota de Tac-K: Tengan dulces sueños, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (=◡=) /

Nota 2 de Tac-K: Evelyn Rasch, Evelyn Rasch, Dayana Martinez, Ana Filomena y Karla Maria gracias por el apoyo al suscribirse n.n

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