Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso
Capítulo 93

Capítulo 93: La Foto de la Transmisión en Vivo

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Seth volvió a tirar de su manga. «Cherry, una niña no podrá convertirse en un niño. Perderás definitivamente, ¡Así que no aceptes!»

Con voz suave y tierna, Cherry respondió: «Tengo una forma de lograrlo».

Brandon se tocó el cabello y volvió a resoplar. Sólo entonces se alejó con las manos en los bolsillos.

Cuando se fue, Sinead se apresuró a acercarse a Cherry. Le levantó la barbilla y le dijo: «¡Cheryl, estás en problemas! ¡Tu vida será definitivamente muy dura ahora que Brandon ha puesto sus ojos en ti! ¡Lo que más le gusta es hacer que sus ‘compinches’ ladren como un perro! Mañana vas a ser Cherry la perrita!».

En medio de su regodeo, la perplejidad brilló en los grandes y redondos ojos de Cherry y preguntó: «¿Pero cómo se ladra como un perro?».

Sinead se agachó inmediatamente, levantó las manos como si fueran patitas y dijo: «¡Guau! Guau!»

Luego, se puso de pie y dijo: «¡Así!».

Cherry volvió a preguntar: «¿Cómo?».

Sinead frunció el ceño y dijo: «¿Por qué eres tan estúpida?».

Entonces, volvió a hacer la misma pose e imitó de nuevo a un perro. «¡Guau! ¡Guau! Guau!»

Cherry sonrió y exclamó: «¡Ya veo! Así que eres Sinead la perrita».

Sinead, «…»

Cuando se dio cuenta de que Cherry se estaba burlando de ella, volvió a romper a llorar con un fuerte lamento.

«…»

Las clases del día terminaron rápidamente. Por la tarde, los padres vinieron uno a uno a recoger a sus hijos.

Cuando Cherry salió de casa por la mañana, ya sabía que Tanya sería la que la recogería después de las clases, porque mamá se descuidaría definitivamente. Y, efectivamente, cuando salió, vio a Tanya de pie.

Saltó, se subió al coche con Tanya y se fue a casa con ella.

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En casa de los Anderson.

El jardín se encargaba de las tres comidas diarias de los niños, así que Cherry, que ya había cenado en el jardín, no solía comer más después de ir a casa. Así, mientras el resto de los Anderson cenaban, ella se escondió en el piso de arriba y le hizo una videollamada a Pete.

En cuanto la videollamada se conectó y vio a su hermano, Cherry sonrió inmediatamente con dulzura y dijo: «¡Te he echado de menos, Pete!».

Pete estaba haciendo sus deberes con seriedad y el fondo del vídeo era su estudio.

Tomo sus auriculares, se los puso y dijo: «Yo también las echo de menos a ti y a mamá».

Cherry preguntó: «En ese caso, ¿Podemos cambiar un rato?».

Pete, «??»

Estaba un poco indeciso. «¿No has empezado ya a ir al jardín? Parece que el uniforme del jardín de infantes es una falda».

«Pero…» Cherry agachó la cabeza y se puso a hacer girar los pulgares. Una mueca apareció en su adorable carita y dijo: «Alguien me acosa en el jardín. Quiere que sea su compinche».

A Pete le entró el pánico en cuanto escuchó eso. Dijo: «¡Me cambiaré contigo!».

Su hermana menor sólo podía seguirle y ser protegida por él. ¿Quién era el mocoso que se atrevía a intimidar a su hermana menor?

Los ojos de Cherry se iluminaron de inmediato y arrojó a su hermano debajo del autobús sin ninguna duda. Dijo: «Tenemos clases de baile todos los días para la actuación durante las celebraciones, así que también tendrás que practicar».

Pete, «!»

No quería llevar falda ni bailar, pero por el bien de su hermana… Sólo podía sonreír y aguantar.

Cherry saltó de la silla y alejó un poco su teléfono. «¡Practiquemos los movimientos de baile, Pete!»

«… De acuerdo».

En casa de los Hunts.

Justin tenía una reunión importante y misteriosa más tarde, así que terminó todo su trabajo temprano. Después de la cena, de camino a su estudio, pasó por la puerta del pequeño estudio de su hijo.

Estaba hablando por teléfono con el psiquiatra de su hijo. «… Sí, ha pasado bastante tiempo desde su última recaída. Ha estado bastante normal durante los últimos días. Su comportamiento y demás ya no son tan extraños como antes».

El psiquiatra respondió: «En ese caso, es probable que el estado de Pete se haya estabilizado. Si no hay una recaída después de unos días más de observación, entonces tal vez se haya recuperado».

Justin dejo escapar un suspiro de alivio.

Después de colgar, se coló en el estudio de su hijo para ver cómo estaba y comprobar si había encontrado alguna dificultad en sus estudios.

Al supervisar personalmente los estudios de Pete recientemente, descubrió que su hijo genio había regresado.

Como era de esperar, su absoluta ignorancia en historia y matemáticas cuando estaban en California se debía a razones psicológicas.

Abrió suavemente la puerta del pequeño estudio. Al principio pensó que vería la imagen habitual de su hijo sentado en su escritorio y leyendo con seriedad, pero inesperadamente…

La adorable voz de Cherry sonó en los auriculares de Pete: «¡Gira las caderas, Pete!»

Pete sacó las caderas y las torció.

«¡Pete, haz esta acción cuando las flores florezcan! Después, debes sonreír».

Los dedos de Pete se curvaron en una pose delicada y se sujetó la barbilla con las manos antes de esbozar una dulce sonrisa. Después, preguntó: «¿Está bien así?».

«Pete, en vez de eso deberías decir: ‘¿Está bien Cherry?’. Así es como hablo, ¡sí!»

Con mucha dificultad, Pete dijo: «… ¡Okie-Dokie!»

«De forma bonita, ¡sí! ¡Adorablemente, sí! …»

Después de decir eso, se giró e inmediatamente vio a Justin que estaba en la puerta.

Las miradas del hombre y del chico se encontraron, durante un rato, hubo un silencio absoluto en el estudio.

Cinco segundos después…

*¡Bam!*

Justin cerró la puerta. Debe de ser porque no la ha abierto de la forma correcta ahora mismo.

Se dio la vuelta, cogió el celular y llamó al psiquiatra. «Parece que Pete… está teniendo una recaída de nuevo».

«…»

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En los Anderson.

Cuando Cherry vio que Pete no se movía, preguntó ansiosa: «¿Qué pasa, Pete?».

Pete se enderezó y volvió a ser el mismo inexpresivo de siempre. Respondió: «El tirano acaba de llegar».

Cherry dijo: «¿De verdad? ¡Hace tanto tiempo que no veo al guapo de papá! Le echo tanto de menos».

Pete cambió de tema. Preguntó: «¿Hay alguien con quien seas especialmente buena amiga en el jardín?».

«¡Sí, sí!» Cherry se emocionó ante la pregunta. «¡Soy muy amiga de Seth Walker! Es muy guapo, ¡Y hasta sabe contestar las preguntas de la Olimpiada Matemática!»

Pete, «…»

Miró las hojas de trabajo de la Olimpiada Matemática en su escritorio. Una mirada contemplativa pasó por sus grandes ojos que eran idénticos a los de Cherry. Dijo: «He dominado el baile. ¿Colgamos por ahora?».

«¡Okie-Dokie!»

Después de colgar, era el momento de la transmisión en vivo de Cherry.

Empezó una transmisión en vivo. Y vio que su fan número uno, Patrocinador Abuelo, ya estaba allí. Cherry le saludó inmediatamente y le dijo: «¡Hola, Patrocinador Abuelo!».

La respuesta de Ian fue: «El abuelo te ha enviado 9999 aviones».

Cherry soltó una risita. De repente, apareció un mensaje en la interfaz de transmisión en directo: «¡El concurso de retransmisión en directo de mitad de año está aceptando solicitudes! Ven a inscribirte».

La plataforma de transmisión en directo que utilizaba organizaba dos concursos de transmisión en directo cada año. Uno se celebraba a mediados de año y el otro a finales. En el concurso, se enfrentaban dos personas que transmitían en directo, y el ganador pasaba a la siguiente ronda. Los diez mejores finalistas ganarían recursos promocionales e incluso pasarían a formar parte del Top Tendencias de Fa&%$ook.

Sin siquiera echar un vistazo al mensaje emergente, Cherry pulsó inmediatamente «Únete».

Todos los participantes en la transmisión en directo debían rellenar sus datos personales durante el proceso de registro. Por lo tanto, las solicitudes fueron aceptadas por defecto.

Cherry no se lo pensó mucho y encendió inmediatamente la interfaz del juego.

Así, no se dio cuenta de que un miembro del servicio de atención al cliente le había enviado un mensaje privado: «Hola sweetcherry, soy Kay, del servicio de atención al cliente, a tu servicio. Me he dado cuenta de que te has inscrito en el concurso de transmisión en directo. Necesitaré una foto tuya para la inscripción. ¿Puedes enviarme una, por favor?».

Al cabo de unos minutos, al ver que no respondía, el personal de atención al cliente le envió otro mensaje: «Por favor, ten en cuenta que si no recibimos ninguna respuesta, por defecto, tendremos que usar una foto tuya durante tu transmisión en vivo».

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