Capítulo 755: Iris Desaparecida, Reuniéndose De Nuevo

En cuanto se escucho la voz, todos miraron al unísono a la mujer que estaba junto a Justin.

Nora iba vestida de manera informal con ropa de calle negra y el cabello suelto por detrás. Parecía perezosa y relajada mientras estaba de pie, como si todavía estuviera medio dormida.

Sin embargo, la mujer tenía una poderosa presencia que era difícil de ignorar.

Aun así, todos pensaron que debían haber escuchado mal lo que acababa de decir. Uno por uno, la miraron. Alguien preguntó incrédulo: «S-Señorita Smith, ¿Ha dicho algo hace un momento?».

Nora bostezó con impaciencia.

No estaba de humor para seguir con este show cuando el que tenía enfrente era un reportero.

No podía molestarse en hablar, así que Justin -que normalmente tampoco se molestaba en hablar y solía dejar que Lawrence hablara en su nombre- no tuvo más remedio que hablar en su nombre.

Justin dejo escapar un suspiro silencioso para sus adentros.

Después de entablar una relación con Nora, ¡Incluso él mismo se encontraba a veces como una persona prolija!

Dijo inmediatamente: «Sí, así es. Permítanme presentarles a todos. Mi prometida no es otra que Q. Sin embargo, Q es sólo su alias. Mi prometida nunca ha hecho nada ilegal con esta identidad».

¡Esta era una de las razones por las que estaba bien que la identidad de Q se hiciera pública!

Todo el lugar se quedó en silencio de repente. Sin embargo, alguien no tardó en hablar.

«No es de extrañar… no es de extrañar que Q fuera el que contraatacara cuando esa persona invadió la red durante la visita de la Señorita Smith a la villa. Y no es de extrañar que Q fuera quien construyera el firewall de internet de la villa…»

«Dios mío, la gente incluso dijo que fue porque Q tenía un romance con la Señorita Smith que comenzó a trabajar para los Smith después de que la Señorita Smith regresó a la familia… ¡Pero era la misma Señorita Smith! No es de extrañar que Q se convirtiera en el consultor de la red de los Smith después de que ella regresara a la familia!»

«Así que es así. No es de extrañar que el Señor Hunt dijera que él es el que estaba en una cita con la Señorita Smith todo el tiempo, e incluso cuando la identidad de Q fue expuesta, su postura no cambió… ¡Como resulto, esto fue en realidad sólo un malentendido!»

Mientras todos cuestionaban la afirmación de Nora, la voz chillona de Lauren los interrumpió, por supuesto. Exclamó: «¡Eso es imposible! ¿C-cómo es posible que ella sea Q?».

Cuando Justin dijo que no era Q, Lauren se había emocionado mucho.

Pero, inesperadamente, ¡¿Q no era Justin sino Nora?!

No, ¡Eso era absolutamente imposible! ¡Definitivamente era algo que se les había ocurrido para intentar manipular a la opinión pública!

Miró directamente a Justin. «¿Cómo pueden inventar semejantes historias? ¡Es imposible que ella sea Q! A menos que pueda presentar pruebas de ello».

Se burló Justin. Pero antes de que pudiera hablar, Nora preguntó de repente: «¿No estás convencida?»

Miró a Lauren despreocupadamente, y luego a los periodistas, que obviamente eran bastante escépticos. Dejó escapar una carcajada y dijo con frialdad: «Me parece bien que me desafíen cuando quieran».

Su mirada les infundió miedo.

¿Quién iba a seguir dudando de ella cuando ya había hablado tanto?

Un vídeo de Nora diciendo eso, así como la mirada de sus ojos cuando miraba a los periodistas, fue filmado y luego publicado en internet.

Durante un tiempo, Nora se convirtió en el blanco de la adoración y la admiración de todo el mundo.

De hecho, algunos llegaron a pensar que su mirada era demasiado fría, demasiado alfa y demasiado descarada. Un grupo de personas empezó a llamarla su husbando* en la publicación. <Nota (*): Persona a la que un fan define como alguien que quisieran de esposo, y eso es lo risible, dado lo dominante que es Nora… en su admiración la quieren como la posición del hombre en su relación de fantasía>.

Así de fácil se resolvió la crisis de opinión pública.

Cuando los periodistas se fueron, la Anciana Señora Hunt miró a Nora con una mirada complicada y tragó saliva. De repente, preguntó: «¿De verdad eres Q?».

Nora no habló.

Sin embargo, la Anciana Señora Hunt continuó sola. Su voz tembló al decir: «No sólo eres Anti, sino que también eres la discípula directa del Doctor Zabe. Y ahora, tú también eres realmente Q… ¿Qué otras identidades tienes?»

Nora curvó los labios con desdén. «Probablemente no tenga más, no lo recuerdo».

Justin: «…»

¿No era más bien que tenía demasiadas identidades y no sabía cuál mencionar?

Luego miró a la Anciana Señora Hunt y le preguntó: «Entonces, abuela, ¿Todavía tienes alguna objeción sobre Nora?».

¿Si seguía teniendo alguna objeción sobre ella?

Para ser sincera, la razón por la que la Anciana Señora Hunt encontraba a Nora tan objetable era, en realidad, el hecho de que siempre parecía tan perezosa y floja todo el tiempo, como si no pudiera despertarse en absoluto. Simplemente no podía soportarlo.

Pero teniendo en cuenta lo impresionante que era, ¿Cómo no iba a verla bajo una nueva luz?

La Anciana Señora Hunt apretó la mandíbula, reacia a admitir que se había equivocado con Nora. «Si todo esto era un malentendido, ¿Por qué no lo has dicho antes? Al hacerlo, ¿No estás dejando que el malentendido se haga mayor sin un motivo?».

Nora levantó las cejas.

Tsk, ¡La anciana seguía intentando justificar sus acciones a la fuerza!

Sin embargo, la anciana era un poco engreída y no muy honesta con sus sentimientos, así que no podía cambiar su forma de pensar. No quiso molestarse con ella.

En cambio, fue Justin quien dijo de repente: «Abuela, si no pretendiera ser un tonto, ¿Cómo podría hacerte ver los verdaderos colores de ciertas personas?».

La Anciana Señora Hunt se quedó atónita. Desconcertada, preguntó: «¿Qué?».

Justin se burló: «¿Quién crees que difundió al público la noticia de que Nora mantenía a Q como amante? Además, ¿Crees que la gente corriente puede permitirse contratar a un hacker como K para investigar a Nora? ¿O estás diciendo que sólo estaba siendo entrometido, por lo que quería comprobarlo por sí mismo? Entonces, casualmente descubrió que era Q, y también casualmente te lo contó a ti. ¿Estoy en lo cierto, Lauren?»

Cuando Justin vio que Lauren planeaba irse, la miró directamente al decir su última frase y la llamó.

Lauren se detuvo.

La Anciana Señora Hunt comprendió algo de repente. De inmediato, la miró y exclamó: «¡¿Fuiste tú?! ¡¿No te lo había dicho ya?! ¡Podemos resolver los asuntos familiares de los Hunt por nosotros mismos! ¡No deberíamos colgar nuestros trapos sucios en público! ¡¿Y sin embargo has reventado el asunto por tus propios intereses?!»

Lauren quería explicarse. «Mamá, yo…»

«¡No me llames mamá! ¡No tengo una nuera como tú! ¡Fuera! ¡Sal de la casa! No se te permite entrar nunca más de nuevo!»

La Anciana Señora Hunt golpeó su bastón contra el suelo y ordenó en voz alta.

Lauren y Herman podían entrar y salir libremente de la Mansión Hunt sólo porque la Anciana Señora Hunt había accedido a dejarlos entrar en la mansión.

Además, pasara lo que pasara, Justin tampoco podía impedir que un hijo visitara a su madre, ¿no?

Pero ahora que la Anciana Señora Hunt había dado la orden, Lauren podía olvidarse de volver a entrar en la mansión.

Con eso, Lauren había sido completamente expulsada de los Hunt.

Después de que la Anciana Señora Hunt echara sin piedad a Lauren de la mansión, miró a Justin con una expresión complicada.

Al cabo de un rato, la anciana murmuró: «Oh, Justin… Me he hecho vieja… ¡Ya no voy a molestarme con los asuntos de los Hunt!».

Después de decir esto, dejo escapar un suspiro. Fanny la sostuvo del brazo y apoyó a la temblorosa anciana. Luego, las dos se marcharon.

Mientras Nora miraba la espalda encorvada de la anciana, supo que probablemente ésta no volvería a causarle problemas en el futuro.

Miró a Justin. Justo cuando estaba a punto de hablar, el mayordomo entró de repente. Con el ceño fruncido, dijo: «Señor, Madame Iris ha ido esta mañana a comprar algunos ingredientes para Pete y los demás, pero aún no ha vuelto. Acabo de llamarla, así como a los hombres que la acompañaban, pero ninguno de ellos ha contestado. Madame Iris… ¡Ha desaparecido!»

Justin frunció el ceño de inmediato. «¡¿Qué has dicho?!»

Su voz se tornó repentinamente severa y grave. ¿Iris… ha desaparecido?

Miró directamente a Nora.

Nora comprendió algo al instante. «¡Debe ser Philip!»

Philip había llegado a Nueva York recientemente, por lo que todos habían estado muy atentos. Sin embargo, el enfoque de Philip había permanecido en las disputas de negocios todo el tiempo, por lo que les había dado la idea errónea de que pretendía ganarlas a través de su lucha en el comercio.

¿Quién iba a pensar que de repente secuestraría a Iris?

En una villa en los suburbios de Nueva York.

Una fría Iris miró con frialdad al hombre que tenía delante.

Veinte años después, el hombre se había convertido en un familiar y a la vez en un extraño para ella.

.

.

.

Consejo: Puedes usar las teclas de flecha izquierda y derecha del teclado para navegar entre capítulos.Toca el centro de la pantalla para mostrar las opciones de lectura.

Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.

Reportar