Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso -
Capítulo 722
Capítulo 722: ¡Oponente!
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Efectivamente, al ver el número de teléfono, las pupilas de Iris se encogieron ligeramente y el miedo volvió a surgir en ella.
Quiso coger el teléfono y apagarlo, pero antes de que pudiera tocarlo, una mano grande y bien definida cogió el teléfono.
La cabeza de Iris se levantó bruscamente y miró a Justin con incredulidad.
Justin la miró con firmeza. Su voz era tranquila y firme, y parecía capaz de proteger a Iris de todo lo que ocurría en el mundo. Dijo: «Déjame».
Iris sacudió la cabeza.
Estaba muy asustada.
Aunque los Hunt eran poderosos, realmente no estaban a la altura de familias globalmente poderosas que tenían cientos -incluso mil- años de historia.
Tragó saliva. «Justin, olvídalo».
Justin podía entender su miedo y pánico. A su madre le preocupaba que afectara a los Hunt por sus propios asuntos, pero no sabía que él tenía otra identidad lo suficientemente poderosa como para no tener miedo.
Sólo que, debido a ciertas razones, no podía revelar esa identidad suya.
Bajó la cabeza y dijo: «Mamá, no tengas miedo».
Tras decir eso, cogió el teléfono, se levantó y contestó a la llamada. Una voz masculina, profunda y agradable, viajó a través del teléfono: «Iris, has roto nuestro acuerdo».
Nora se puso al lado de Iris.
Sujetó los hombros de Iris y miró fijamente a Justin.
Justin dijo al teléfono: «A partir de ahora, seré yo quien cumpla ese acuerdo».
El acuerdo original consistía en que Iris envejecería y moriría sola en la villa suburbana como castigo. Si no podía contenerse y se acercaba a su hijo, entonces Philip tomaría medidas contra los Hunt y Justin.
Cuando Justin dijo que cumpliría el acuerdo, el hombre comprendió inmediatamente lo que quería decir.
Philip se burló: «Je, ese niño débil de entonces ha crecido y se ha vuelto independiente, ¿No es así? En ese caso, le enseñaré a comportarse».
En cuanto dijo eso, Iris entró en pánico. Se precipitó hacia delante y gritó: «¡Philip, ven hacia mí si quieres! No le hagas nada al niño, tú…»
Pero antes de que pudiera terminar, Philip le contestó: «¡Iris, ya está bien!».
Iris se quedó sorprendida.
Philip sonrió y dijo: «¿No lo dices porque estás muy segura de que no te haré nada? Ahora que el niño ha crecido, ¡Ya no puedes culparme de ser desagradable!».
Colgó justo después de decir eso.
Iris: «…»
El tono de desconexión del teléfono resonó en lo más profundo de su corazón como los golpes de un tambor, haciéndola sentir terriblemente turbada. Tragó saliva y miró a Justin, sintiendo que se había convertido en la pecadora de los Hunt.
La mega-corporación más misteriosa estaba a punto de tomar medidas contra su hijo.
Iris se agarró al brazo de Justin. Quiso decir que iría a disculparse con la otra parte, pero cuando las palabras llegaron a la punta de su lengua, no se atrevió a decirlas, porque si lo hacía, no sería diferente a tirar su propio orgullo al suelo y pisotearlo.
Iris respiró profundamente.
Justo cuando se llenó de preocupación y temor, vio que Justin la rodeaba y miraba a Nora. Le preguntó: «Nora, ¿Tienes miedo?».
Nora levantó las cejas. Los Hunt habían ofendido a la mega-corporación más misteriosa del mundo, lo que sonaba bastante emocionante. Además, si Justin realmente lo perdía todo, ¿No sería inútil el estatus de Pete como próximo jefe de la familia?
Pero…
Ella esbozó una sonrisa y levantó ligeramente los ojos. «Está bien, si quedas en la ruina, te mantendré…»
Tras decir eso, vio a Iris, por lo que el resto de sus palabras dieron un giro de 180 grados en su boca y añadió: «… les mantendré».
Justin: «…»
Originalmente había tenido la intención de decirle que no se asustara, pero no había esperado que Nora dijera algo así. De repente, le dieron ganas de ir a la quiebra por diversión.
Parecía que no era tan mala idea tener una sugar mommy y ser mantenido como su pareja…
Ejem.
Iris miró a los dos, encontrándose de repente sin palabras.
Esto debe ser amor.
Si ella hubiera confiado en Philip en aquel entonces, las cosas no habrían llegado a donde estaban. Ahora que lo pensaba, ¿Qué hubiera pasado si hubiera tenido que luchar a muerte con su familia?
Como mucho, habría empezado de nuevo desde cero.
La mujer, de casi cincuenta años, se sintió conmovida por el amor entre Nora y Justin. Esto le inspiró el mayor espíritu de lucha.
Dijo: «De acuerdo, si vamos a la quiebra, entonces… ¡Dejaremos que Nora nos mantenga!».
Justin: «…»
Las comisuras de sus labios se estrecharon. ¡Los que no supieran de la situación habrían pensado que Iris estaba diciendo que Nora los mantendría después de que él terminará en la quiebra!
No podía revelar su identidad, pero al ver que las dos mujeres parecían tan llenas de espíritu de lucha, salió de su lucha interna. Sonrió y dijo: «No te preocupes, aunque me gustaría mucho depender de una mujer, me abstendré de intentarlo». Habló con solemnidad. «Conmigo cerca, los Hunt no irán a la quiebra».
Las palabras firmes y seguras de su hijo hicieron que el corazón agitado de Iris se calmara.
Para ser sincera, antes de decir la verdad, todavía se había arriesgado.
Pensó que como habían pasado veinte años, tal vez Felipe ya la había olvidado hace tiempo, o tal vez ya no le importaba. Pero ahora que las cosas habían llegado a este punto, era inútil seguir pensando en ello.
Cuando era joven, por el bien de Justin, había sufrido tantos agravios y desperdiciado veinte años de su juventud en esta villa.
Ahora que su hijo había crecido, era hora de que la apoyara y protegiera.
Después de que Iris lo aceptara, salió de su lucha interna. Sugirió: «¿Qué tal si comemos algo antes de irnos?»
«No, está bien».
Justin la rechazó. Iris asintió y dijo: «Bueno, seguro que tienes muchos preparativos que hacer. En ese caso, ¡adelante!».
Justin intercambió una mirada con Nora al oír esto.
Había algunas cosas que a Justin le daba vergüenza decir, pero Nora entendió lo que estaba pensando, así que dijo: «Bueno, sí que tiene muchas cosas que hacer, pero lo más importante ahora es ayudarte a mudarte, Iris».
Iris se sorprendió un poco.
Miró a Justin con incredulidad, sólo para ver que él asentía con la cabeza.
Iris se mordió el labio. «¿Seguro que no es necesario? Ya me he acostumbrado a vivir aquí».
«¿De verdad?» Nora estaba un poco preocupada. «Pero los dos estaremos muy ocupadao en el futuro. Estaba pensando en pedirte que cuidaras de los tres niños en casa…»
Al mencionar a los niños, Iris dudó.
Nora volvió a suspirar. «Pete ha estado con Justin desde que era un bebé y tiene un autismo leve. A Cherry también le gusta mucho la compañía de su abuela. En cuanto a Xander, la situación es aún más difícil. Ese chico fue criado por Trueman Yale, por lo que carece de la compañía de su familia y es muy inseguro. Cielos. Me pregunto si Xander acabará desviándose por el camino equivocado en el futuro…»
Convencida, Iris apretó los dientes de inmediato y dijo: «¡Iré con los dos!».
Iris era alguien cuyos actos hablaban más que las palabras.
Ahora que se habían puesto de acuerdo, ya no tendría miedo. Inmediatamente llamó a la Señora Landis para que empacara sus cosas por ella.
Justin la sujetó por los hombros, se acercó y le dijo en voz baja: «Mamá, cuando vuelvas, tienes que hacerte cargo de la casa».
Iris quiso negarse, pero Justin dijo con una mirada fría: «La abuela tiene problemas con Nora. Ahora que Herman ha vuelto, seguro que volverá a flaquear. Se ha vuelto una cabeza de chorlito, no puedo dejar que siga controlando la casa. De lo contrario, cuando Nora se case conmigo en el futuro, la familia será definitivamente un gran embrollo».
Justin suspiró. «No entiendes a Nora. Lo único que le gusta hacer es dormir, y lo que más odia son las cosas molestas. Si se entera de que tendrá que enfrentarse a tantos problemas al casarse conmigo, hay muchas posibilidades de que no se case más conmigo.»
Iris: «…»
Su hijo estaba siendo demasiado exagerado. Nora ni siquiera había pronunciado una sola palabra de refutación a pesar del súper enorme problema que acababa de causar. Sólo por eso, se podía ver que Nora nunca se negaría a casarse con él sólo por algo tan trivial como eso.
Sin embargo, su hijo tenía razón al decir que ella debería hacerse cargo de la casa. De este modo, cuando Nora se casara con la familia, habría muchos menos problemas para traspasar los asuntos familiares.
Ahora que podía hacer algo por ellos, Iris sentía que su regreso ya no era del todo inútil.
Había casi cien macetas de orquídeas en el invernadero. Pero con sólo una llamada de Justin, más de veinte guardaespaldas entraron uno a uno y empezaron a sacar las flores.
Al verlos entrar y salir, Nora se acercó a Justin y le comentó: «Pete dijo que siempre llevas más de veinte guardaespaldas cuando sales. Así que es verdad».
Justin asintió. «Sí, a veces llevo más».
Desde que fue secuestrado a los cinco años y posteriormente rescatado, Justin siempre viajaba con esa cantidad de gente.
Nora lo miró en silencio con una mirada de lástima en sus ojos.
Justin pensó que ella sentía pena por él porque había sido secuestrado a una edad temprana, pero al final, Nora dijo inesperadamente algo que arruinó totalmente el ambiente: «¡¿Cuánto miedo a morir tienes?»
¡¿Qué tanto miedo tenía?!
Justin «…»
La noche era tan agradable y el ambiente también. Había un ambiente romántico en el aire incluso hasta que la mujer hablo, ¡¿Cómo es que se arruinó en el momento en que ella habló?! Las comisuras de sus labios se estrecharon.
El grupo acabó separándose.
Nora se dirigía al laboratorio para continuar su investigación sobre los asuntos de Xander. Para ella, por muy importante que fuera algo, y por muy grande que fuera la fortuna de los Hunt, los asuntos de Xander debían ser tratados primero.
Porque dentro de tres días le llegaría la hora de inyectarle el V15.
Nora se había debatido entre inyectárselo o no.
¿Realmente moriría si no se le inyectaba con el suero genético?
¿Era el suero genético realmente letal, o era más bien como una adicción a las drogas que hay que consumir continuamente? Tenía que estudiarlo y averiguarlo bien antes de la fecha límite.
Además, como Philip había dicho que iba a tomar medidas contra los Hunts, definitivamente no iba a ser algo que pudiera lograr con unas pocas palabras.
También tenía que hacer los preparativos. Se necesitarían algunos días para que las cosas fermentaran. Por lo tanto, su principal tarea durante estos tres días seguiría siendo estudiar el V15.
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En el hospital.
Cuando Nora llegó al laboratorio, Lily estaba analizando los componentes del V15. Al ver entrar a Nora, Lily dijo inmediatamente: «Jefa, efectivamente los componentes del suero no son analizables. Es demasiado complejo, me temo que tardaremos unos años en estudiarlo a fondo».
Nora no se sorprendió.
Si la fórmula del suero genético fuera tan fácil de analizar, Trueman y los demás no habrían perseguido a su madre con tanta insistencia.
Habían pasado ya veinticinco años y, sin embargo, Trueman y los demás seguían depositando en ella sus esperanzas de encontrar pistas. En ese caso, sin duda debía ser una tarea hercúlea.
Para ser sincera, Nora ya se esperaba los resultados, pero aún no podía hacerse a la idea.
Asintió con la cabeza. «Yo me encargo».
Lily se apartó y Nora se sentó. Tenía varios instrumentos en las manos y separaba los componentes del suero, con la esperanza de encontrar pistas en él.
Tres días después. Los ojos de Nora estaban inyectados en sangre y tenía ojeras.
Después de tres días consecutivos de trabajo sin dormir, por fin había obtenido la fórmula del V15, pero al mismo tiempo, su corazón también se hundía.
Se trataba realmente de una droga reparadora de genes y no de algún tipo de estupefaciente.
En otras palabras, Xander debía ser inyectado con la droga, de lo contrario, realmente moriría.
Respiró profundamente.
Un rato después, sacó su teléfono y llamó a Caleb, que estaba en el extranjero.
En cuanto la llamada se conectó, Caleb dijo: «Nora, he estado esperando tu llamada». Nora se quedó callada un rato antes de preguntar: «¿Es necesario inyectarle el V15?». «Sí, lo es». Caleb dijo: «Si no lo haces, la reparación de los genes previamente reparados no será adecuada, y su cerebro explotará, lo que seguramente lo matará. Ya lo he investigado: las modificaciones de Xander están en los genes de su cerebro. Si no se inyecta el V15 en el momento estipulado, morirá».
Nora suspiró. «La fórmula del V15 no parece muy compleja».
«Sí, ninguna de las fórmulas de la V1 a la V15 es compleja. La más compleja es la V16. Además, hay algunos tipos de sueros genéticos. Algunos mejoran el coeficiente intelectual y otros la fuerza física. Las fórmulas de V1 a V15 son todas diferentes para cada tipo de suero. Lo único que tienen en común es que todas necesitan el último V16».
Al oír esto, las pupilas de Nora se encogieron.
Caleb suspiró. «Me estoy muriendo, así que ya no necesito el V16. Sin embargo, toda persona modificada genéticamente necesitaría el V16 al final. Por lo tanto, deberías conocer la importancia del V16 ahora, ¿verdad?».
Nora asintió para expresar que había entendido.
No es de extrañar que su madre le dijera que no debía exponer sus habilidades, no fuera que acabara siendo un objetivo.
Era posible que algunas de las personas más destacadas del mundo fueran humanos modificados genéticamente. Además, había mucha gente que necesitaba el V16 como antídoto.
De repente sintió una presión aún mayor.
Con semejante grupo de personas buscándola, ¿Podría realmente obtener el V16 para Xander?
Además…
Si lo que su madre había dejado atrás era realmente la fórmula… Si realmente producía el V16, eliminando así la última restricción a las modificaciones genéticas exitosas, ¿En qué se convertiría el mundo?
¿Alguien entrenaría deliberadamente a un grupo de guerreros modificados genéticamente y unificaría el mundo?
¿O se desarrollarían a gran velocidad seres humanos con genes de coeficiente intelectual modificados genéticamente y agotarían los recursos de la Tierra en una docena de años, o quizá sólo en unos pocos?
No se atrevía a imaginar tales consecuencias.
Pero tal y como estaban las cosas, tampoco tenía tiempo para preocuparse por esas cosas.
Nora dijo: «Ya veo».
Caleb guardó silencio durante un rato. De repente, dijo: «No esperaba que Xander fuera también tu hijo. No te preocupes, me pondré en contacto contigo a tiempo si encuentro pistas sobre el V16».
Nora se había esforzado por encontrar pistas a partir de las cosas que su madre había dejado atrás, pero aún no podía encontrar ninguna.
Lo mejor sería que Caleb le informara si encontraba alguna pista.
Nora respondió: «Muchas gracias».
Caleb guardó silencio durante un rato antes de decir finalmente: «De nada». Tras colgar el teléfono, Nora llamó a Justin.
El teléfono sólo sonó una vez antes de que Justin contestara. Preguntó: «¿Qué tal?».
Nora se quedó en silencio durante un momento. Finalmente, dijo: «Vamos a inyectarle».
Cuando Justin escuchó esto, supo de inmediato que el suero era seguro y que podía inyectarse tal cual. Pero al mismo tiempo, la inyección sólo prolongaría la vida de Xander tres meses.
Si todavía no podían encontrar el V16 en tres meses, Xander moriría. Dijo: «De acuerdo». Antes de colgar, Nora preguntó: «¿Cómo está Xander?»
«Ha estado bien los últimos días, pero hoy ha empezado a tener dolor de cabeza al despertarse. He conseguido que el médico de cabecera le inyecte un anestésico, así que ahora está dormido». Justin explicó el estado de Xander: «Ahora le inyectaré el suero genético».
«Bien, voy en camino. Observa todas las reacciones de Xander después de la inyección».
«De acuerdo».
Nora se marchó y condujo directamente a los Hunt.
El coche se detuvo justo delante de la villa. Cuando subió, vio que Justin aún no había inyectado el suero a Xander. Cuando la vio, le explicó: «Nuestro equipo médico observa constantemente el estado de Xander, así que no causará ningún retraso. Quería que lo vieras con tus propios ojos».
Nora asintió.
Probablemente habría reacciones físicas después de la inyección. Se trataba de pistas y datos experimentales importantes, que podrían desempeñar un cierto papel en la posterior investigación y desarrollo del V16 por parte de Nora.
Lastimosamente Nora se dio cuenta, después de estudiar el V15, de que probablemente no sería capaz de desarrollar el V16 en sólo tres meses con sus propias habilidades.
Su única opción ahora era buscar las pistas que su madre le había dejado.
Xander estaba tumbado tranquilamente en la cama. Ella inyectó personalmente a Xander el V15. Poco a poco, el líquido fue inyectado en su cuerpo. Xander, que había estado anestesiado, abrió de repente los ojos después de que le inyectaran el suero.
Sus ojos eran limpios y claros, como si no le hubiera afectado en absoluto.
Se sentó aturdido. Miró a Nora y luego a Justin. Luego, se frotó la cabeza.
Justin preguntó nervioso: «¿Te sientes incómodo en algún sitio?».
Xander sacudió la cabeza, con sus grandes ojos llenos de perplejidad. Respondió: «No siento ninguna incomodidad. Es sólo que un problema de la Olimpiada Matemática que estaba discutiendo con Pete ayer se ha convertido de repente en algo muy sencillo…»
Esta era la consecuencia de tomar el suero genético para mejorar el coeficiente intelectual.
Parecía que el coeficiente intelectual de Xander sería el más alto de la familia en el futuro.
Nora observó todos los datos numéricos del cuerpo de Xander. Al final, llegó a la conclusión de que todo en el cuerpo de Xander estaba normal.
Era tan normal que Nora incluso se preguntó si había sido engañada por Trueman.
¿Habría tomado la decisión correcta al inyectar a Xander con el V15 o no?
Entonces, alguien empujó la puerta para abrirla. Pete y Cherry siguieron a Iris obedientemente, y los tres se acercaron juntos. Cuando vieron a Xander sentado, los tres dejo escapar una enorme respiración contenida.
Los dos niños y los movimientos de Iris eran exactamente iguales, lo que les produjo una sensación de alegría.
Nora y Justin se miraron y sonrieron.
Sin embargo, el estado de ánimo de Nora se volvió cada vez más pesado.
Cuanto más se entendiera el suero genético, más se daría cuenta de lo sorprendente que era.
Era demasiado poco humano.
Suspiró en silencio.
En ese momento, escucharon de repente un ruido procedente del piso inferior.
Justin bajó las escaleras y vio a Herman de pie. Cuando Herman lo vio, gritó inmediatamente: «Justin, ¿Te has vuelto un cabeza de chorlito? ¿Cómo puedes dejar que Iris vuelva aquí? ¿Tienes idea del gran desastre que traerá a los Hunt al volver aquí?»
Herman estaba furioso. Señaló a Iris y dijo: «Y a ti también. No importa que hayas ofendido a una persona influyente, ¿Pero todavía tienes la desfachatez de volver aquí ahora? ¡¿Realmente sólo te detendrás cuando hayas implicado a todos los Hunt?! ¡Abandona la mansión de los Hunt de inmediato! De lo contrario, los Hunt estarán realmente en un gran problema».
Iris frunció el ceño.
Con respecto a eso, no tenía derecho a hablar.
Justin se adelantó y preguntó: «¿Dónde está el mayordomo? ¿Quién le ha dejado entrar?»
El mayordomo se limpiaba el sudor en silencio a su lado. No importaba, Herman seguía siendo el padre de Justin. Los guardaespaldas no se atrevieron a tomar ninguna medida real contra él cuando irrumpió por la fuerza.
El mayordomo no habló. En cambio, fue Herman quien gritó con rabia: «¿Sabes que Philip Coleman ya ha empezado a tomar medidas contra los Hunt? He oído que ha estado haciendo una adquisición a gran escala de las acciones de la Corporación Hunt, el precio de nuestras acciones está subiendo como la espuma en estos momentos. Muchos de los accionistas han decidido vender sus acciones. Ha tomado la decisión de hacerse con la Corporación Hunt».
Justin respondió con calma: «Sí, lo sé».
«¿Lo sabes? ¿Seguro que lo sabes? Con las acciones cada vez más caras, ¡Tendremos cada vez menos liquidez para volver a comprar las acciones! Al mismo tiempo, también tendremos cada vez menos acciones en nuestras manos. Sé que también has estado enviando gente a comprarlas en secreto, pero ¿Cómo puede compararse el flujo de caja de los Hunt con el de ellos? ¡Ellos han acumulado generaciones de riquezas! ¡Nadie sabe cuántos billones de dólares tienen! ¿Puedes vencerlos? Por lo que sé, los Hunt sólo tienen unos cientos de billones de dólares de flujo de caja».
Herman le señaló. Luego, bajó la voz y dijo: «También he oído otra noticia importante: he oído que Philip es miembro de la Liga Imperial. ¿Sabes qué es la Liga Imperial?
«¡La docena de personas que hay allí controlan las tendencias económicas mundiales! ¡Los Hunt no pueden vencerlos en absoluto! ¡Lo que están haciendo no es diferente de arriesgar toda la Corporación Hunt! ¡Todo el mundo ya lo sabe y todos están esperando para reírse de los Hunt…! La familia de tu tío también está esperando que renuncies».
Después de decir todo eso, Herman continuó ansioso y enfadado. «Eres mi hijo, así que definitivamente tendré que ponerme de tu lado. Justin, tu única opción ahora es expulsar a Iris o enviarla con Philip. Si no, no podrás aplacar su ira. ¡Nuestra familia no puede permitirse meterse con ellos! ¡La Liga Imperial! Son parte de la Liga Imperial, ¿sabes?»
Justin frunció el ceño al oírle decir lo que no debía, y la mirada de sus ojos se volvió fría.
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