Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso
Capítulo 494

Capítulo 494: Jon es Abofeteado en la Cara 

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«¿Qué?»

Como si estuviera aturdido, y también como si no hubiera escuchado claramente a Jon, la voz de Silvester se alzó instantáneamente. Jon se apresuró a explicar con cautela: «Es la hija que los Smith acaban de reconocer. Se llama Nora Smith. He oído que también es la prometida de Justin Hunt… Ah, también tiene otra identidad importante, Anti la cirujana de fama internacional. Ella es muy admirada como Anti. Creo que la joven se ha vuelto muy engreída después de haber sido alabada un poco, por lo que cree que ahora es invencible en el campo de la medicina.»

Jon miró a Silvester con cautela en este punto.

La verdad es que se sentía un poco inseguro al respecto.

Dado que Yvonne había podido comprar la Píldora Calmante de la Corporación Zabe a Silvester, esto demostraba que Silvester estaba realmente en contacto con los Smith.

En particular, cuando Nora vino a pedir prestados los libros hace un momento, en realidad había logrado hacerlo…

Esto demostraba que Silvester tampoco estaba dispuesto a ofender a los Smith y a los Hunt, ¿no?

Teniendo esto en cuenta, tosió y dijo: «Señor Zabe, después de pensarlo un poco… Dada su condición, no es buena idea ofenderla -especialmente cuando tiene a los Smith y a los Hunt apoyándola-, pero considerando las posiciones que ocupamos en el círculo, ¡Hay ciertas cosas que debemos hacer! No podemos acobardarnos y dejar de lado nuestras creencias sólo por su estatus. Así que, me preguntaba, ¿Qué tal si usted lidera el camino y nosotros vamos a darle una lección?»

Silvester frunció el ceño y lo miró con una mirada complicada. «¿Acabas de decir que Nora Smith ha dicho que la medicina alternativa es inferior a la moderna?»

Jon asintió apresuradamente. «Sí, lo dijo delante de todas las enfermeras del hospital. Elaine Miller la escuchó. Ella es la que nos contó la historia debido a que no podía soportarlo más. Todas las demás enfermeras han sido sobornadas por los Hunts y los Smith, así que ninguna se atreve a hacer mención de esto.»

Eso fue lo que dijo Elaine.

En cuanto a si realmente habían sobornado a las enfermeras o no, a Jon no le importaba en absoluto.

Sólo quería arruinar a Nora.

Inesperadamente, cuando dijo eso, Silvester se burló de repente y dijo: «Eso es imposible».

Jon se quedó sorprendido. «¿Por qué no sería posible, Señor Zabe? La noticia de lo que hizo ya se ha difundido. A pesar del terrible impacto que ha causado el incidente, ella vino descaradamente a visitarlo. Seguramente no ha venido a darle una advertencia, ¿verdad?».

Había elegido deliberadamente la palabra ‘advertencia’. Dado el estatus de Silvester, hacer algo así sería demasiado.

Sin embargo, Silvester no se enfureció en absoluto. En su lugar, miró directamente a Jon y dijo: «Jon, ya tengo más de noventa años. Estos trucos tuyos son demasiado infantiles a mis ojos».

Jon: «…»

Silvester sacudió la cabeza y dijo: «Originalmente, pensaba recomendarte para que ocuparas mi puesto de presidente de la Asociación de Medicina Alternativa. Después de todo, a esa perezosa discípula mía no le gusta molestarse con esas cosas. Aunque no me agradas, eres lo suficientemente conocedor y también tienes los medios. Además, tu actitud hacia la medicina alternativa se considera todavía algo pura… Pero no esperaba que ahora que has entrado en edad, hayas perdido en cambio la capacidad de ver bien las cosas. Olvídalo, será mejor que elija a otro para el puesto».

Señaló directamente a la puerta y dijo: «¡Adiós!».

Su tono firme y decidido hizo que Jon se quedara atónito y congelado en su sitio.

Ni siquiera podía entender lo que estaba pasando. «Doctor Zabe, lo que he dicho es cierto. ¿Cómo puede no creerme? ¡Está llena de hostilidad hacia la medicina alternativa!»

«Hah, incluso si afirmas que todo el mundo está lleno de hostilidad hacia la medicina alternativa y desprecia la medicina alternativa, ¡No hay manera de que ella haga eso!»

Silvester sonaba muy seguro, lo que hizo que Jon se desconcertara aún más. «¿Es tan parcial con ella? ¿Por qué? ¿Los Smiths o los Hunts le han dado algún tipo de beneficio? ¡Doctor Zabe! ¿De qué tiene miedo cuando ya es tan viejo? ¿Cómo puede ceder al encanto de tales posesiones mundanas?» Silvester se quedó aún más sin palabras al oír esto.

Le dirigió una mirada a su hijo, entonces éste llamó inmediatamente al mayordomo y mandó expulsar a Jon de inmediato.

¡Jon fue expulsado sin contemplaciones de los Zabes!

Cuando la puerta se cerró de golpe, Jon seguía de pie, sin poder reaccionar.

¿Por qué estaba Silvester tan seguro de que Nora nunca diría esas cosas?

Nora era Anti. Como cirujana de renombre internacional, ¿No era lógico y razonable que menospreciará la medicina alternativa?

¡Nora debía de haberle dado bastante dinero ahora mismo!

¡Esto era inaceptable! Pensar que incluso Silvester había sido sobornado.

¡¿Estaban los practicantes de medicina alternativa del país… realmente condenados a una caída?!

Nora no estaba al tanto de los eventos en casa de los Zabes. Ya había regresado a casa. Con la pila de libros en los brazos, subió las escaleras y entró en el estudio.

Después de sentarse, comenzó a leer y se sumergió en la investigación.

Quería curar a Quentin.

No fue hasta que una mano apartó el libro que tenía delante que finalmente se detuvo. Nora frunció el ceño con desagrado, giró la cabeza y reprendió: «¿Cherry?».

Normalmente, Cherry era la única que hacía travesuras mientras leía.

Inesperadamente, cuando giró la cabeza, vio en cambio a Cherry y a Pete sentados en el sofá junto a ella y mirándola con preocupación.

La persona que había tomado su libro era en realidad… ¿Justin?

El ceño de Nora se frunció al instante.

En cuanto se formó esta expresión suya, Cherry susurró inmediatamente a Pete: «¡Creo que papá está acabado, Pete!».

«… ¿Por qué está acabado?», preguntó Pete.

Cherry continuó susurrando: «¡Mamá está a punto de explotar! Definitivamente, ¡Le va a dar un golpe en el trasero a papá!».

Pete: «…»

Nora: «…»

Se tocó la cabeza torpemente. Entonces, miró a Justin… sólo para ver que el rostro cincelado del hombre parecía en realidad un poco… ¿expectante?

Uh… Sus ojos deben estar jugándole una mala pasada.

Se frotó las sienes y preguntó: «¿Qué hora es?».

Justin: «Son las siete. Tienes que comer algo y luego lavarte. Es hora de acostarse».

Nora: «…»

Ella tosió. «Es demasiado temprano».

Justin dijo: «Normalmente te vas a la cama a esta hora. Puedes seguir leyendo cuando te despiertes mañana».

Nora, sin embargo, trató de arrebatarle el libro. «No tengo ningún apetito. Déjame leer un par de horas más».

Pero en cuanto estiró la mano, el ágil hombre dio un paso atrás, Nora no consiguió tomar el libro.

Justin levantó las cejas y la miró. «Ve a comer».

Nora se levantó. Justo cuando a Cherry le preocupaba que mamá le diera una gran paliza a papá, en cambio vio inesperadamente que Nora se daba la vuelta y bajaba las escaleras. En realidad estaba… ¿Obedeciendo para conseguir algo de comer?

¿Eh?

¿Había cambiado mamá?

Cuando bajó las escaleras, Nora descubrió que la cena de esa noche era pasta.

Después de sentarse, sacó su teléfono. Cuando lo encendió, vio que varias personas le habían enviado mensajes.

Uno de ellos era un mensaje de texto del pequeño psicópata: [Mi pequeña sirviente, ¿Estás preparada para mi desafío? Voy a contratar a Q a un alto precio. ¿Crees que tendré éxito?].

Un destello de luz brilló en los ojos de Nora mientras tomaba un bocado de pasta. Ella respondió: [No].

El pequeño psicópata: [¡Jeje, entonces tengamos una competencia!].

Nora tecleó lentamente: [¿Por qué debería competir contigo?].

El pequeño psicópata se lo creyó. Escribió: [Entonces hagamos una apuesta. Si consigo poner a Q de mi lado, entonces te convertirás en mi pequeña sirviente. Si no, entonces responderé a una de tus preguntas a cambio].

¡Una pregunta!

Los labios de Nora se curvaron hacia arriba. Eso era exactamente lo que quería.

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