Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso -
Capítulo 1049 - ¿Salvarlos o no salvarlos?
Capítulo 1049: ¿Salvarlos o no salvarlos?
Pete recompuso su expresión.
De hecho, siempre había tenido una personalidad similar a la de Justin, después de todo, había sido criado por Justin Hunt, entonces abrió la boca con seriedad: «El laboratorio está forzando la retención de talento».
Sus palabras hicieron que Nora levantara las cejas: «¿Forzando la retención?».
«Bien».
Pete abrió la boca: «No dejan que la gente se vaya, ustedes están aquí, supongo que también empezarán a enviar gente para vigilarlos y no me dejarán volver a mi país. Después de todo, soy su talento elegido. Me han dado un gran paquete de beneficios y han dicho que me darán una casa compartida, y mi salario tampoco está mal ……»
Pero, ¿Es él alguien falto de dinero?
Pete simplemente no reveló su identidad al público.
Nora abrió la boca: «No nos has llamado por esto, ¿verdad? Pete tiene varios expertos a su alrededor, y tú mismo eres un experto que puede escapar en cualquier momento, así que realmente no hay necesidad de que hagamos el viaje hasta aquí».
Justin también reprendió: «¿Ni siquiera puedes escapar de esto? Qué inútil».
Pete: «……»
Resopló y miró a Mia.
Siendo mayor y siendo regañado, sobre todo delante de Mia, no estaba acostumbrado a que sus padres le hablaran así.
Se tocó la nariz, usando también a fondo el pequeño gesto de Justin Hunt, antes de abrir la boca: «No se tratá de mi, sino de mis colegas».
Miró a Nora: «Mamá, tengo 23 colegas de Est$dos Un!dos en la misma situación, todos ellos se graduaron en las Universidades de H$vard y St$nford, estudiaron en el extranjero al principio y no han vuelto después, han sido recriminados en Internet por ello. Pero, de hecho, hay algunos de ellos que no se querían quedar realmente. Es porque siguieron a sus tutores en la universidad y estuvieron expuestos a industrias de alto nivel, lo que les forzo a quedarse y no volver».
«Ellos también quieren volver ……»
«Gente así, hay muchos más».
En la universidad de Pete hay 23, además muchos de ellos están casados y tienen hijos aquí y quieren llevarse a sus esposas o maridos e hijos.
Pero Pete está limitado en su capacidad.
Podía escapar solo, o incluso llevar a dos o tres con él, pero no podía llevarse a todos.
Veintitrés personas le mirarían con la respiración contenida, queriendo ir con él, y era inapropiado que dejara a alguien atrás o se llevara a alguien con él.
Así que …… si tiene un problema, acudiría a mamá.
Sólo tiene 15 años, es normal que no pueda resolver un problema tan grande.
Nora: «……»
Justin también guardó silencio.
Pete miró a Mia.
De repente, Mia se sinceró suavemente con Nora: «Tía, esa gente es tan lamentable, todos deben querer escaparr, es obvio que quieren volver a casa, la gente en el país no los entiende y los regañan por ser traidores, pero desde el extranjero no tienen permitido ir a casa …… sus padres también deben echarlos de menos. »
Nora: «…… todo está bien, espera».
Pete: «Entonces, ¿Salvaremos a algunos?»
Nora le miró: «Ya que vinimos, no podemos salvar sólo unos cuantos».
Ladeó la cabeza y sonrió de repente: «Mira, ahí vienen, ya que nos vigilan, ¡Vamos a tu laboratorio!».
«De acuerdo».
Después de que el grupo desayunara, llegaron a la entrada del laboratorio, Pete explicó a qué se referían: «Mis padres y mi hermana no tienen todavía un lugar donde alojarse, quiero que se queden en la casa de huéspedes dentro de nuestro laboratorio, ¿Está bien?»
El portero miró a Nora y a Justin: «Espera un momento, voy a pedir instrucciones».
Se acercó al lado con el intercomunicador y preguntó: «Señor, ¿Podemos dejarlos entrar?».
El hombre del otro lado habló: «Son sólo tres debiluchos, parecen realmente escuálidos, déjalos entrar. No te pongas nervioso cuando te encuentres con alguien de su país, ya sabes, entre ellos, sólo la Hermana Mayor de la Escuela de Artes Marciales Quinn y el Hermano Mayor de la Escuela de Artes Marciales Irvin pueden derrotarnos, del resto no te preocupes».
«¡Sí!»
Y así, los guardias de la puerta abrieron la puerta, no tenían ni idea, de los dos monstruos que habían dejado entrar.
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