Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 909

Capítulo 909:

«¿Qué? ¿Por qué yo entonces? Después de todo, hay mucha gente en la Familia Jadeson para que él escoja, incluyendo a la madre de Devin y a Janice.» Sasha se sorprendió al escuchar las palabras de Sebastián.

Inesperadamente, Sebastián se burló en cuanto Sasha mencionó esos nombres.

“¿No sabes qué clase de persona es Jasmine? En cuanto a Janice, sólo es un miembro de la familia y no tiene derecho a involucrarse en la gestión de los Jadeson. Además, su habilidad es ordinaria en el mejor de los casos».

Mientras hablaba, el desdén en el rostro de Sebastián se intensificó, tal vez porque recordó el incidente de la fiesta de entonces.

Gracias a esa explicación, Sasha comprendió mejor ese asunto.

Sin embargo, no podía comprenderlo en su totalidad.

Por supuesto, ella comprendería todo el asunto si supiera que Jonathan veía a Sebastián y a ella misma como su última esperanza para revivir a la Familia Jadeson.

Eso era especialmente cierto en el caso de Sebastián, ya que era la persona más importante que Jonathan quería cultivar.

Jonathan era muy consciente de la decadencia de los Jadeson después de su retiro. Sin embargo, parecía que dejar que Charles tuviera un papel central en el ejército o promover a Devin no mejoraba nada en absoluto.

Aunque Charles daba la impresión de tener autoridad en el ejército debido a sus antecedentes familiares, la gente que se sometía a él era escasa en realidad.

Eso fue evidente durante el asedio a Sebastián, donde nadie en el ejército habló en su favor incluso cuando muchas personas habían perecido. Algunos incluso añadieron el insulto a la herida en la Casa Blanca en ese momento.

Por lo tanto, no sólo no mejoró la situación de los Jadeson, sino que también hizo que su familia se desmoronara.

En cuanto a Devin, tenía la capacidad de ayudarles, pero era demasiado benigno y no lo suficientemente despiadado. Además, no estaba a la altura de los astutos ancianos de la Casa Blanca en lo que respecta a las intrigas.

Si los Jadeson estuvieran bajo su liderazgo, sería seguro decir que nunca tendrían la oportunidad de volver a su mejor momento.

En otras palabras, los Jadeson deberían contentarse con mantener su estatus actual en tales circunstancias.

Después de reflexionar por un momento, Sebastián decidió no impedir que Sasha se hiciera cargo de Oceanic Estate. La primera razón era que Jonathan no podría hacer nada dañino hacia Sasha, ya que regresaría muy pronto y se quedaría a su lado.

Había otra razón para su decisión.

«Por cierto, ¿Qué le pasa a Sabrina otra vez?»

«¿Q-Qué?» Sasha no pudo evitar detenerse en seco ante ese drástico cambio de tema.

«U-Um, después de saber que Shanae es la prometida de Devin, se sintió abatida y quiso entregarme su bar».

«Jaja…» Aquella escalofriante carcajada de Sebastián le produjo escalofríos.

Con eso, Sasha inmediatamente se dio cuenta de lo que tenía que hacer. No puedo tomar el control del bar. Tal vez me meta en problemas por eso.

Tras esa conversación, Sasha salió de la base militar.

Tenía la intención de despedirse de Sebastián como es debido, pero él se dio la vuelta para marcharse tras mirar su reloj.

¡Qué insensible! Sintiéndose un poco molesta con sus acciones, Sasha se dirigió hacia él y le agarró del brazo.

«Sebby…» murmuró con una voz apenas audible. Unos segundos después, se puso de puntillas y besó los labios de Sebastián en la puerta que representaba la fuerza y el dominio del país.

En ese momento, se sintió como si el tiempo se hubiera detenido y el aire a su alrededor se hubiera congelado.

Nadie hubiera imaginado que Sasha seguía siendo la persona que tomaba la iniciativa de expresar su amor incluso cuando su historia continuaba en una dirección diferente después de que Sebastián se hubiera convertido en otra persona.

Cuando Sasha tenía dieciocho años en aquel entonces, fue la persona que dio el primer paso aceptando casarse con él.

Ocho años después, seguía siendo ella la que dio el primer paso al acercarse a él y besarlo.

El cuerpo esbelto e imponente de Sebastián se congeló en shock.

Su mente se quedó en blanco mientras abría los ojos al sentir la suavidad de los labios de Sasha. ¿Por qué esto me resulta tan familiar? Además, ¿Por qué me ha llamado Sebby?

Fragmentos de recuerdos que aparecían en su mente ocasionalmente durante ese periodo emergieron todos a la vez, gracias al beso de Sasha.

«¿Te gustan las naranjas, Sebby? Tengo algunas aquí para ti».

«Ese perro me persigue, Sebby. Ayuda…»

«Lo siento, Sebby. Es todo culpa mía…»

«Siempre te protegeré, Sebby.»

«Estoy dispuesta a ser tu esposa por el resto de mi vida, Sebastián. Siempre serás la única persona a la que quiero, pase lo que pase».

Cuando finalmente soltó a Sebastián, la sonrojada Sasha no se atrevió a darle una mirada como si hubiera hecho algo vergonzoso y huyó de la escena.

Por lo tanto, no se dio cuenta de que los dedos de Sebastián temblaban mientras las lágrimas comenzaban a brotar de sus ojos.

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