Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 863

Capítulo 863:

Las palabras de Sebastián fueron sin duda un relámpago.

No sólo Grayson se sorprendió al escucharlo, sino que incluso Devin no podía creerlo.

¿Baylor White? ¿El hijo moribundo de Alfred? ¿Cómo podía tener la capacidad de causar un accidente tan grande?

Devin conocía bien a los White. Realmente no podía creerlo.

Después de haber discutido las cosas con Sasha en aquel entonces, ambos sentían que alguien más estaba detrás del incidente de envenenamiento. Había estado investigando a ese hombre todo este tiempo.

Sin embargo, no encontró ninguna pista que apuntara al hombre.

Bueno, hasta este mismo momento en que este primo suyo reveló que el hombre enfermo quería matarlo.

En ese caso, ¿Podría la persona que estaba detrás del envenenamiento tener algo que ver con él?

Devin estaba tan sorprendido como furioso.

«¿Cómo lo has sabido? ¿Has estado investigándolo todo este tiempo? O… ¿Ya se conocían?».

Sólo después de recomponerse durante un largo rato se oyó a sí mismo hacer semejante pregunta.

Desgraciadamente, Sebastián no dijo nada más. O más exactamente, no quiso hacerlo. Se limitó a permanecer de pie frente al quirófano. La hostilidad y la amenaza en su rostro podían hacer que uno se estremeciera de terror.

Irrefutablemente, Devin seguía por debajo de él con agudeza intelectual.

¿Cómo llegó a conocer a Baylor? Vivía en Avenport. Y cuando llegó aquí, era una persona diferente, así que es aún más inverosímil que conociera al heredero de la Familia White.

Ese nombre probablemente entró en la lista de Sebastián debido a la muerte de Calvin.

El mensaje que este último le dejó antes de morir fue para prevenirle contra otra persona.

También le dijo que dejara de matar a Charles y a los demás e instó a Sebastián a vivir el resto de su vida con su familia en otro lugar.

En ese momento, Sebastián ya sabía que la muerte de Calvin no tenía nada que ver con los Jadeson.

Mientras tanto, el hecho de que Calvin no dijera nada sobre el verdadero culpable que le hizo daño, sino que insistiera en que Sebastián se marchara rápidamente porque esa persona era aún más poderosa y tramposa que los Jadeson.

Naturalmente, la Familia White fue a la lista.

Los White eran sumamente inteligentes. Parecían llevarse muy bien con los Jadeson, como una familia.

Sebastián finalmente tuvo una oportunidad cuando alguien le habló de la preferencia se%ual de Hubert.

Éste prefería a los chicos hermosos.

Sebastián hizo que alguien buscara a Hubert. En lugar de hacer una visita en persona, instruyó a la persona para que anestesiara a Hubert y fuera testigo de su propia castración.

Efectivamente, Hubert cedió.

Confesó que Calvin sólo acabó en sus manos porque alguien quería que transformara a este último. Luego, debía enviar a Calvin de vuelta a la Residencia de los Jadeson y, a su vez, a Sebastián.

Por lo tanto, la aparición de Magnus ese día con Calvin no fue una coincidencia.

Probablemente fue un montaje.

Las piezas del rompecabezas encajaron con una cuidadosa planificación, que incluía llamar por teléfono a Kira y hacer que ella avisara a Devin.

Como Devin también había ido al club ese día, rescataría a Calvin sin Sebastián, ya que había estado ayudando en la búsqueda.

Después de eso, habría enviado a Calvin de vuelta a Sebastián.

Al final, Hubert no tuvo piedad. Sebastián hizo que su hombre derritiera los órganos y lo devolvió a su maestro.

No esperaba que el culpable se volviera aún más salvaje en lugar de tener miedo y contenerse. No he ido a por él, ¡Pero se atreve a provocarme directamente!

Las comisuras de la boca de Sebastián se curvaron en un arco helado.

Una hora después, las puertas del quirófano se abrieron por fin.

«¿Cómo está, médico? ¿Está bien?» Devin se apresuró inmediatamente a acercarse.

Grayson se acercó también.

«El pronóstico es bastante sombrío. Sus órganos internos se han roto y hay una grave hemorragia interna. Aparte de algunas costillas rotas, sus signos vitales son estables por ahora. Sin embargo, no se sabe si podrá superar el período crítico».

El médico describió el estado de forma pesimista mientras miraba a los dos hombres.

En cuanto Devin lo oyó, se le cayó el rostro.

Cuando vio su rostro envuelto en una gruesa capa de gasa, su expresión se volvió más sombría.

«Sebastián, ella…» Se asomó a su primo con cautela, dándole un aspecto muy vacilante.

Por fin ha vuelto a su lado después de muchas dificultades, y su rostro restaurado tras una tortura insoportable. Pero ahora, su vida vuelve a pender de un hilo. ¿Por qué ocurre esto?

Devin estaba desolado.

Sin embargo, se dio cuenta del extraño comportamiento de Sebastián.

De pie ante la camilla, las pupilas de éste se contrajeron al dar un vistazo a una mujer fuertemente vendada.

Su bello rostro palideció ligeramente.

Segundos después, volvió a ser el mismo, tranquilo y distante.

«Vigílala de cerca», ordenó. Luego, se dio la vuelta para marcharse.

Devin estaba completamente perplejo.

¿De verdad? ¿Se ha ido así?

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