Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 840

Capítulo 840:

Ninguno de ellos había esperado un desenlace así, incluido Jonathan.

«Viejo Señor Jadeson, ¿Qué pasa con…?»

«¡Fuera! ¡Todos ustedes!», gritó enfadado.

Al final, todavía no había castigado a Jasmine.

La expresión de Sebastián era igual de fea. Observó cómo Devin se marchaba y luego miró con odio al viejo. Si no fuera porque Mark lo contuvo, ambos habrían vuelto a discutir.

Sasha se quedó de pie, perdida.

No esperaba que ocurriera algo así. La mujer no creía haber hecho nada malo porque estaba protegiendo a sus hijos al descubrir a los verdaderos culpables que intentaban hacerles daño.

Sin embargo, cuando vio que el hombre se enfadaba por primera vez desde que le diagnosticaron un trastorno de personalidad múltiple tras ver a Devin marcharse, empezó a preguntarse si lo que había hecho estaba bien.

«¿Estás bien, mamá?»

Matteo se dio cuenta de que estaba actuando de forma extraña y le preguntó cuándo se había ido el resto.

Sasha dio un vistazo a su hijo. Después de un segundo, asintió con la cabeza y dijo, «Estoy bien. Ve a jugar allí con tu hermana, ¿De acuerdo? Voy a subir a ver cómo está papá».

«De acuerdo.»

El niño hizo lo que se le dijo y llevó a sus hermanos fuera a jugar después de contestar.

Sasha llegó al tercer piso unos minutos después y vio que la puerta del dormitorio estaba cerrada.

Se armó de valor antes de llamar a la puerta.

“Señor Hayes, ¿Está usted ahí? Le he traído algo de comer».

Mientras hablaba, echó un vistazo al tazón de gachas de ñame que tenía en las manos.

Sin embargo, no hubo respuesta.

La puerta estaba cerrada, y parecía que no había nadie en la habitación.

Sasha se preocupó aún más.

Se mordió los labios mientras se ponía delante de la puerta, diciendo: «Lo siento, Señor Hayes. He sido demasiado impulsiva en este asunto. No debería haber avisado al Viejo Señor Jadeson inmediatamente, provocando todo esto. Lo siento mucho, Señor Hayes. Debería habérselo dicho a usted primero y dejar que se encargara de ello». La mujer comenzó a disculparse.

Esperaba que no se encerrara así en la habitación porque verlo así la preocupaba.

Sólo se hizo el silencio después de que ella terminara de hablar.

La última esperanza de Sasha se desvaneció en el aire.

Parece que realmente está enfadado.

Abatida, se dio la vuelta para marcharse.

«Esto no tiene nada que ver contigo. Tú deberías bajar y cuidar de los niños».

De repente, la voz familiar del hombre sonó desde la habitación.

Aunque parecía estar de mal humor, Sasha lo escuchó claramente.

¿No me culpa de lo que ha pasado?

Al instante, sintió como si le quitaran una piedra del corazón, y se sintió mucho mejor.

«Muy bien. Bajaré ahora mismo. Entonces… dejaré el tazón de gachas de ñame aquí».

Sasha se alegró mucho. Al instante prometió cuidar de los niños y dejó el tazón frente a su puerta.

No puedo creer que no esté enfadado conmigo por lo que ha pasado.

Todas las preocupaciones que sentía antes se habían desvanecido.

La verdad era que no se la podía culpar de lo ocurrido.

Después de todo, los niños habrían corrido un gran peligro si ella no hubiera estado alerta. Entonces, ¿De qué era culpable?

Era como si el cuerpo de Sebastián estuviera envuelto en hielo mientras se quedaba en la habitación. Miraba fijamente la pantalla de su teléfono y observaba las imágenes de las cámaras de seguridad que alguien le había enviado.

«Esta es la grabación de CCTV que quería, Señor Hayes. Por favor, no dude en ponerse en contacto conmigo si hay más peticiones».

Tras enviar el vídeo y un mensaje respetuoso, la persona se desconectó.

Mientras tanto, Sebastián se quedó inmóvil mientras seguía estudiando el vídeo en su teléfono.

Devin se dirigió a Heron Hill inmediatamente después de salir de Oceanic Estate. Al llegar, vio a su madre encerrada en el cobertizo de almacenamiento junto a la casa de madera.

Era bastante despectivo.

Al principio, cuando Jonathan vivía aquí, todos los Jadeson estaban orgullosos de poder vivir con él.

Esto incluía a Jasmine.

Pero ella nunca esperó que sería una criminal que sería castigada en cualquier momento cuando finalmente se le permitiera vivir aquí.

«¡Devin! ¡Ya estás aquí! ¡Finalmente estás aquí!»

Estando encerrada en el cobertizo de almacenamiento, Jasmine lloró en el momento en que vio a Devin como si fuera su último salvavidas.

El hombre se acercó.

Su rostro seguía pálido y no había estado tranquilo desde que salió de Oceanic Estate.

Los ojos de Devin se abrieron de par en par y sus nudillos se volvieron blancos al ver a su madre llorando en el sucio y estrecho cobertizo.

«¿Por qué has hecho eso? ¿Acaso las condiciones en casa no son suficientes para satisfacerte ahora?»

No pudo contenerse y finalmente la interrogó.

Eso cogió a Jasmine por sorpresa.

Es mi hijo. ¿No está aquí para salvarme? ¿Por qué me interroga así?

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Nota de Tac-K: Disfruten de lindos días queridas personitas, les deseo lo mejor, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿=)✌

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