Capítulo 714: 

«Jocelyn, sé fuerte. Vengaremos la muerte de Charles».

«Así es, Jocelyn. He discutido con Connor para matar al b%stardo en estos dos días. Entonces, yo personalmente cortaré su cabeza y se la ofreceré a Charles y a mis dos sobrinos».

Candice, la hermana de Charles, también convenció a Jocelyn.

Jocelyn levantó la vista sorprendida y preguntó: «Candice, ¿Hablas en serio?

¿Cómo piensas actuar? Quiero decir, el b$stardo está ahora en el hospital».

Candice se rió y respondió: «Bueno, el hospital es el mejor lugar para actuar. Connor, ¿Sabías que Jonathan llamó a Grayson para preguntar por la situación del b$stardo?».

«¿Es eso cierto?» Connor se sorprendió y continuó: «¿Cómo lo sabías?»

«Eso no importa. Todo lo que tienes que saber es que esta es una rara oportunidad». Candice sonrió y se miró los dedos con malicia.

Parecía que todas las mujeres Jadeson superaban a los hombres.

Por ejemplo, Tiffany era más ingeniosa y cruel que Eric, Tyler y sus otros primos varones.

Como era de esperar, Candice también era mejor que sus compañeros.

Después de todo, Candice sabía cuál era el mejor momento para matar a Sebastián al vigilar a Jonathan y analizar su conversación con Grayson por teléfono. Por lo tanto, lo había probado que su ingenio no era igualado por ningún Jadeson.

«Jonathan sólo está observando la situación del b$stardo ahora. Como tal, ahora es el mejor momento para matarlo. Para entonces, Jonathan no vendrá a por nosotros, pues lo que se hace no se puede deshacer».

«En ese caso, ¿Debemos actuar de inmediato?»

«¡Por supuesto! Nadie le protege en el hospital. Sin embargo, debemos asegurarnos de que tenga un ataque de manía antes de matarlo», destacó la maliciosa mujer.

Connor se quedó perplejo.

“¿Un ataque de manía? ¿Por qué?»

Candice lo miró con decepción y le explicó: «Tendremos una razón legítima para matarlo si tiene un ataque de manía. ¿Entendido?» Connor se sintió avergonzado y no pronunció palabra.

En efecto, ¡Es una buena idea! En tales circunstancias, tendremos una razón válida para matarlo; sin embargo, Jonathan no nos culpará.

La pregunta es: ¿Cómo podemos asegurarnos de que tenga un ataque de manía?

De repente, Connor recordó que fue a propósito a Heron Hill para disfrutar del espectáculo cuando sabía que Jonathan había disparado a Sebastián. En ese momento, encontró un cuadro roto en el charco de sangre.

Connor pensó que la figura en la pintura era probablemente la esposa de Sebastián.

En ese entonces, Charles empujó a la mujer por el acantilado en la carretera.

Oí que Sebastián se había vuelto loco una vez que se despertó por culpa de la mujer.

A Connor se le ocurrió una idea brillante.

«Bien, déjame esto a mí. Me aseguraré de que se vuelva loco ese día».

«Eso sería perfecto». Candice estaba satisfecha. Entonces, dejó a la Corte de Jade para hacer más arreglos.

Para ellos, el reloj estaba corriendo.

Sebastián no estaba gravemente herido a pesar de que le dispararon con una pistola. Por lo tanto, el hospital no le permitiría quedarse por mucho tiempo.

Además, Jonathan tampoco esperaría tanto tiempo.

Por lo tanto, no quedaba mucho tiempo.

A kilómetros de distancia, Sasha también sentía que el tiempo corría y esperaba con ansias la llegada de Vivian para mejorar la situación.

Su deseo se hizo parcialmente realidad, pues Vivian llegó al día siguiente.

«¿Mamá?»

Sasha esperó en el aeropuerto para recoger a Vivian. Después de un buen rato, Karl llevó a la emocionada Vivian en brazos y salió. Sin embargo, Vivian se sobresaltó al ver un rostro desconocido.

Mientras tanto, los ojos de Sasha se enrojecieron al ver a Vivian.

«Vivian, es mamá. Siento haberme hecho daño en el rostro y no poder mostrártelo ahora.

Después de todo, tengo miedo de asustarte», explicó Sasha entre sollozos.

Vivian se quedó perpleja.

Aunque su rostro no le parecía familiar, Vivian podía reconocer la voz de Sasha. Además, sabía que sólo Sasha tenía ese hermoso par de ojos.

Finalmente, Vivian extendió sus pequeños brazos y gritó: «Mamá, ¿Dónde has estado? ¿Por qué no has venido a visitarme? Te echo mucho de menos».

Al momento siguiente, se lanzó a los brazos de Sasha y empezó a llorar.

Sí, hacía medio año que no veía a Vivian. Para un niño de seis años, es cruel e inimaginable estar separado de su mamá y su papá.

Lo único que pudo hacer Sasha en respuesta fue abrazar fuertemente a Vivian.

Después de que ambas se calmaron, Sasha relajó su agarre y dio un vistazo a Karl, quien trajo a Vivian a salvo.

«Gracias, Señor Frost. Por cierto, ¿Los chicos hicieron un escándalo al respecto?»

«Son buenos chicos. Me hicieron caso y se quedaron atrás», se consoló Karl.

Sin embargo, los adultos ignoraban que Sasha levantó su mano regordeta y tocó la nueva horquilla de su cabello por una razón.

A lo lejos, en Miralaea, los hermanos podían ver claramente a Sasha y a Karl a través de la cámara.

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