Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 540

Capítulo 540: 

A Hanako no le costó mucho esfuerzo someter a Sasha a la cama.

Hanako le agarró el rostro y lo giró hacia ella con fuerza.

«Siento mucho que vayas a perder este bonito rostro tuyo. He oído que Heather y la Señora Tsurka eran las mujeres más hermosas de Avenport, pero ahora que te miro de cerca, parece que tu madre es mucho más hermosa». Hanako no mostró ningún respeto por Yancy en su ausencia.

Sin embargo, lo que dijo era cierto. Heather parecía mucho más elegante que Yancy.

Sasha sabía que Hanako no tramaba nada bueno. El miedo y la aversión se apoderaron de ella y empezó a llorar.

«¡Ni siquiera digas el nombre de mi madre, p$ta asquerosa!»

«Ja, bueno, a quién le importa si soy sucia. De todas formas no puedes hacer nada. Será mejor que hagas lo que te digo antes de que pierda la paciencia. ¿Quién sabe si te arrancaré el rostro en pedazos?» Hanako susurró en los oídos de Sasha.

Sasha sabía que tenía que hacer algo. Se armó de valor y mordió a Hanako con fuerza en la mano.

Hanako no esperaba que Sasha tuviera aún fuerzas para contraatacar.

«¡Ah!»

Un grito agonizante siguió mientras Sasha mordía sus dedos con todas sus fuerzas.

«¡Maldita seas!» Hanako levantó su mano y abofeteó a Sasha implacablemente. La sangre brotó de la boca de Sasha ante el impacto.

«¿A qué esperas? ¡Córtale el rostro! Raspa también su cuero cabelludo».

Sasha hizo uso de las fuerzas que le quedaban y luchó todo lo que pudo, creando un alboroto en la habitación secreta.

Cuando el médico escuchó a Hanako, se apresuró a prepararse para la operación.

*¡Bang!*

Justo cuando estaba a punto de anestesiar a Sasha, alguien abrió la puerta de golpe.

La jeringa cayó de la mano del médico y todos se sorprendieron por el fuerte ruido.

Hanako giró la cabeza indignada. «¿Quién demonios es? ¿Cómo te atreves a entrometerte?»

Pensó que era la criada, pero no era así.

Un hombre con traje negro y gafas de sol estaba en la puerta. Por lo que parecía, no debía estar aquí.

«¿Quién es usted?»

«¡Madame!»

Karl hizo caso omiso de Hanako. Su mirada atónita se fijó en Sasha, que en ese momento estaba a punto de perder la cabeza.

Su fuerte grito la llamó a la realidad.

Hacía mucho tiempo que nadie la llamaba «Madame».

«¿Ka… Karl?» murmuró Sasha, tratando de atrapar el aliento.

Sonaba tan débil que su voz era muy suave, pero logró llamar su nombre.

Karl se puso furioso al verla.

Por fin entendía por qué Sebastián le había pedido que fuera corriendo al Jardín de Jade durante la noche.

¡Imbéciles!

«¡Cómo te atreves!»

Con un estruendoso rugido, el guardaespaldas cargó hacia adelante y cortó la garganta de Hanako.

Antes de que ella pudiera reaccionar, algo frío le cortó la garganta y un líquido caliente brotó de su cuello como una fuente.

Era un espectáculo horrendo.

No tenía ninguna posibilidad ante un guardia especialmente entrenado.

«Por favor…»

El asustado médico se echó las manos al cuello y empezó a suplicar por su vida, pero Karl ni siquiera le dio una oportunidad.

Al momento siguiente, le atravesó el cuerpo con su daga ensangrentada y este se desplomó en el suelo con un suave golpe al igual que Hanako.

Todo quedó en silencio después de eso.

Hanako aún no estaba muerta. Sus ojos se abrieron de par en par mientras respiraba débilmente, aferrándose a los últimos jirones de su vida. Miró a Karl con resentimiento mientras la vida se le escapaba.

«¿Qué? ¿No se te ocurre ninguna razón para estar fuera del juego tan pronto?» Karl se acercó y se puso en cuclillas frente a ella.

El terror se extendió en los ojos de Hanako.

Antes de que pudiera seguir mirando, Karl le pasó la daga por el cuerpo una y otra vez.

Ni siquiera le perdonó el rostro.

Karl se volvió loco cuando vio a Sasha. No se atrevía a imaginar lo que podría haber pasado si hubiera llegado unos segundos más tarde.

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Nota de Tac-K: Tengan una muy linda y hermosa noche, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿=)✌

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