Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 255

Capítulo 255: 

«Mañana Karl irá contigo».

«¿Eh?»

«Y estará de vuelta a las tres».

El tono de Sebastián indicaba que no había lugar para la negociación. Después de dictar sus términos, volvió a centrar su atención en su ordenador.

Sasha no estaba segura de si su intuición era correcta.

Lo sintió más distante de repente. Incluso su mirada, que un momento antes era amable y cálida, se había tornado sombría y desagradable.

«Muy bien, ya me voy».

Sirvió el té apresuradamente y se fue tan rápido como pudo.

¿Podría haber algo mal en el despacho?

Afortunadamente, le hizo una promesa. Incluso si algo salía mal, no tendría nada que ver con ella.

Sasha volvió a su habitación y le comunicó las buenas noticias a Brandon por teléfono. «Me prometió que podría ir mañana, pero no puedo ir sola, y tengo que estar de vuelta antes de las tres».

Brandon dio un pisotón de frustración. «¿Antes de las tres? ¡La boda de los Sanders empieza a las tres! ¿A qué demonios vas?»

¡Él y su asquerosa boca!

Sasha se encogió de hombros. «¿Qué opción tengo? Ya fue bastante difícil conseguir que aceptara salir. ¿Crees que me complacerá más que eso?» Brandon no respondió.

Ya se nos ocurrirá algo cuando llegue el momento.

Era posible que Kelly llegara antes de que empezara la boda. Era una amiga íntima de la familia de los Sanders.

Por fin, los dos llegaron a un acuerdo.

Al día siguiente, cuando estaba a punto de irse, Brandon la llamó con una noticia inquietante.

«Sasha, ¿Viste? Hay un rumor en internet que afirma que Sebastián está enfermo mentalmente».

«¿Qué has dicho?» Sasha tartamudeó, casi dejando caer el peine en su mano.

¿Enfermedad mental?

¿Cómo es posible? ¿Qué ha pasado?

Estaba angustiada. Tiró el peine y buscó el iPad en el cajón de la mesilla de noche.

Brandon seguía despotricando por teléfono. «¿No te has conectado a Internet? Al parecer, un libro ha estado circulando por Internet. La gente está especulando que el personaje es Sebastián por su gran parecido». Sasha se puso pálida.

Ignorando a Brandon, lanzó su aplicación de navegación para ver por sí misma.

Tenía razón. Los principales buscadores eran tendencia con este nuevo chisme. Todos parecían girar en torno a una novela.

El tatuaje.

Las manos de Sasha temblaban de miedo.

Llena de inquietud, se desplazó lentamente hacia abajo, manifestando sus peores temores. Alguien realmente sumó dos y dos para deducir el secreto de Sebastián basándose en un personaje de ficción.

Cuando Sasha estaba trabajando en la novela, había basado su personaje en Sebastián. Incluso incluyó rasgos obvios como el lunar en el rabillo del ojo.

Sus ojos eran tan hermosos como las estrellas en medio de un océano. El lunar era como una estrella fugaz, que se deslizaba por su mejilla. Dejaba un rastro de recuerdos. Siempre le preocupaba que alguien hiciera la conexión, pero no podía evitarlo. Sus rasgos eran hipnotizantes.

Sasha era una gran escritora en su mejor momento.

Sólo esta frase creó un culto de adoración al personaje masculino.

Incluso se hicieron adaptaciones de cómics, y el personaje fue imitado con frecuencia.

Pero hoy, Sebastián Hayes, de la Corporación Hayes, tuvo que soportar un ataque a su reputación.

*Thump*

El iPad en la mano de Sasha cayó al suelo.

Le temblaba todo el cuerpo. Un miedo aterrador amenazaba con consumirla. Al momento siguiente, tuvo problemas para mantenerse erguida.

«Sasha, ¿Qué está pasando? ¿Estás bien?» Brandon estaba preocupado por su prolongado silencio.

Esta chica tonta está en shock, ¿No?

Estas son teorías inofensivas. ¿De qué tiene miedo?

Brandon consoló rápidamente a Sasha. «No te preocupes, son acusaciones sin fundamento. ¿De verdad crees que Sebastián es un enfermo mental?»

Sasha no dijo nada.

«Creo que algunas personas están muy aburridas», continuó Brandon. «Tú espera y verás. Cuando el Hayes se entere de esto, los cerrará a todos. Tu ex marido los enterrará sin piedad por atreverse a inventar tales rumores». Brandon ignoraba por completo la verdad.

Pero el hecho era que la velocidad a la que viajaba este chisme era bastante lenta.

Lo habían iniciado unos cuantos relatos insignificantes con pocos seguidores. Incluso si la gente se diera por enterada, sólo parecería una táctica de marketing.

Sasha permaneció inmóvil durante varios momentos.

De repente, el peso de su culpa fue demasiado para ella. Se mordió el labio para no llorar en voz alta.

Menos mal que no lloró delante de Brandon.

Se vistió inmediatamente y se fue.

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