Regresando de la muerte – Acceso Anticipado
Capítulo 1789

Capítulo 1789

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«¿Qué tal si hago que lo envíen ya que estamos en las cercanías? Parece que hoy van a estar bastante ocupados»

«De acuerdo…»

Al final, Ian le siguió la corriente, Quizás, él también estaba de acuerdo en que no había demasiado terreno que cubrir.

Sin embargo, nunca supo que en el momento en que ella sacó el objeto de las escaleras y salió de aquel edificio, inmediatamente hizo una llamada a alguien con quien hacía tiempo que quería ponerse en contacto.

«¿Estás ocupada ahora mismo, Susan? Tengo algo con lo que me gustaría tener tu ayuda».

«¿Eh?»

Susan, que estaba ocupada repasando para sus exámenes en la escuela, dejó escapar una mirada de sorpresa cuando recibió esa llamada.

¿Ayuda? ¿Qué tipo de ayuda? ¿No está esta chica trabajando actualmente con Ian? ¿Qué otra cosa podría tener que necesitara mi ayuda?

«La situación es así, Susan. Ian acaba de pasarme un conjunto de hojas de datos que dice que son las cuentas del proyecto. Como sabes, yo no trabajo en cosas así y me está dando dolor de cabeza. Fue entonces cuando pensé en ti. Así que ¿Podría hacer que me ofrecieras algunos consejos?»

A través del teléfono, Yasmin parecía haber captado las dudas de Susan y, por lo tanto, tomó la iniciativa de dar más detalles.

Tal y como estaban las cosas, no parecía adecuado que Susan la rechazara en esas circunstancias.

Por eso, la chica volvió a la escuela para buscar a Susan unos veinte minutos después, con un montón de hojas de datos en los brazos.

«¿Tantos?»

«Um-hum*», respondió Yasmin mientras se secaba el sudor de su propia frente.

«Para ser sincera, Susan, quería dar una buena impresión en la empresa de Ian ahora para tener la oportunidad de trabajar allí después de graduarme». Miró a su homóloga con una mezcla de insistencia y autoconciencia.

Lo más significativo era la muestra de determinación que tenía.

«Ya veo. Es una buena idea por tu parte. En realidad, yo también estoy planeando hacer prácticas con ellos durante las vacaciones de verano. Por eso he estado hablando con el profesor para asegurar mis calificaciones antes para facilitar mi propia entrada» Susan se rió.

Sin ningún tipo de reparo, también compartió sus planes personales en su totalidad.

A la tierna edad de veintiún años y habiendo sido criada por sus propios padres pensando que el mundo era un lugar lleno de calor y amor, ¿Cómo podía pensar que alguien fuera capaz de semejante desvarío? Su cautela de antes había surgido puramente de la protección de Ian.

Yasmin bajó la mirada para ocultar la envidia y el desprecio que la enredaban locamente como lianas.

Algunas partes de su corazón habían empezado a sucumbir a la oscuridad que la devoraba lenta pero seguramente.

«¿Es así? Espléndido. Trabajemos duro hacia nuestra meta juntos entonces».

«De acuerdo. Siéntate un poco mientras te preparo esto, y oh, no se lo digas a Ian. Sólo di que lo has hecho tú misma. Te enseñaré algunas cosas básicas sobre finanzas y contabilidad más tarde».

Susan se aseguró de ofrecer un recordatorio antes de ponerse a ordenar ese conjunto de hojas de datos.

Mientras Yasmin esperaba al lado, su teléfono sonó de repente unos cinco minutos después.

«¿Hola?»

«¿Cuándo llegarán nuestros suministros, Señorita Snow? Los necesitamos para ponernos en marcha”.

“¿Eh?»

Yasmin se levantó de golpe al oír eso.

Eso llamó la atención de Susan, que también levantó la cabeza.

«¿Pasa algo? ¿Qué ha pasado?»

«Hay algunos suministros que debían ser entregados en el sitio que aún no ha llegado, y yo no era consciente de que están esperando para tenerlos para trabajar. Puede que tenga que bajar al sitio de trabajo para dar un vistazo a ella.»

«No te preocupes. Adelántate y pasa a recogerlas cuando terminen».

«Pero este también es bastante urgente»

Yasmin estaba sudando a mares y parecía estar un poco nerviosa.

Al no ver alternativas, Susan sólo pudo ofrecerse a ayudar a entregar esas hojas de datos en nombre de la chica.

Eso complació mucho a Yasmin.

«¿De verdad? Eso es estupendo. En ese caso, ¿Te espero en el lugar de trabajo?», dijo con una mirada de gratitud.

Susan aceptó encantada.

Muy pronto, la chica se fue.

Por su parte, Susan se centró en rellenar las hojas de datos antes de salir con ellas en bicicleta del recinto de la escuela.

En esta coyuntura, se abstuvo decididamente de molestar a Ian.

En primer lugar, porque estaba estudiando para sus propios exámenes.

En segundo lugar, había visto lo mucho que se preocupaba por Yasmin y quería darles un poco de espacio.

En lo que respecta a ese joven, ella siempre había hecho todo lo posible por satisfacerlo.

Sin embargo, aquel fatídico día, algo iba a sucederle después de entrar en aquel edificio en construcción de la Vieja Ciudad en el que hacía mucho tiempo que no estaba.

*¡Crack!*

Se quedó en blanco cuando la placa de cemento cedió de repente bajo sus pies, y el primer pensamiento que le vino a la cabeza fue si Ian sería capaz de terminar su proyecto a tiempo si se encontraba con un accidente allí.

«¡Oye! ¡Ven rápido! Alguien se ha caído!»

Los trabajadores de la obra se pusieron nerviosos al ver esto.

No muy lejos, una chica que llevaba tiempo observando esto desde la distancia, vio la esbelta figura vestida de azul claro lanzada a la deriva como una cometa sin ataduras. Se estremeció toda.

*¡Bang!* Después de que Susan cayera en el enorme agujero de los cimientos que se había excavado, se desvaneció tan rápidamente que dejó a Yasmin conmocionada.

Cuando ésta pudo reaccionar, emprendió una frenética carrera, sólo para descubrir que se trataba de un canal destinado a la introducción de cemento.

Para cuando llegó a aquella gran masa de pizarra viscosa, la chica que estaba en la flor de la juventud ya no aparecía.

La fuerza de la primera la abandonó…

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