Regresando de la muerte – Acceso Anticipado -
Capítulo 1560
Capítulo 1560
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«Oye, ¿Qué estás haciendo? ¿Por qué has cogido mi cámara?» Kurt la ignoró.
Sus ojos estaban llenos de un aura asesina. Después de sacar la tarjeta de memoria de la cámara, la estrelló contra el suelo y se rompió en pedazos.
«¡Kurt López!» Vivian se enfadó por fin.
«¿Qué demonios estás haciendo? ¿Por qué has destruido su cámara? ¿Qué tiene de malo que haga una foto? ¿Acaso te importa? ¿No estás siendo demasiado engreído?» le reprochó Vivian a Kurt. Sus palabras le apuñalaron el corazón como una espada de filo cortante.
Kurt apretó el puño con tanta fuerza que sus nudillos se volvieron blancos.
Tras romper la tarjeta de memoria, volvió su rostro ensombrecido hacia Dwayne.
«Sí. Este es mi deber. No está permitido que te hagas fotos con nadie sin el permiso de tu familia. Incluso está prohibido tener contacto cercano con nadie. Mi trabajo es protegerte. Si tienes alguna queja, puedes llevársela a tu padre cuando se despierte. Pero antes de que eso ocurra, tienes que obtener mi aprobación antes de tomar cualquier decisión».
Era como si Kurt se hubiera transformado completamente en una persona diferente. Mientras emanaba un aura fría, sus ojos se habían oscurecido mientras le dirigía una mirada gélida.
Era la primera vez que le revelaba su identidad.
Todos los demás presentes se sintieron como si les hubiera caído un rayo de repente.
Vivian, en cambio, se quedó sin palabras.
Se quedó mirando fijamente sus enormes ojos de obsidiana como si hubiera escuchado algo alucinante. Sin embargo, no se creyó ni una sola palabra de lo que dijo.
¿De verdad es el guardaespaldas que organizó papá?
Entonces, ¿Es como el Señor Frost? ¿Por qué? ¿Por qué no he oído hablar de esto?
«Kurt…» Ella sintió como si algo se alejara de ella. Se asustó tanto por un momento que quiso extender la mano y agarrarlo.
Sin embargo, Kurt aflojó su agarre.
«Tengan la seguridad. No me interpondré entre ustedes dos. Sólo evitaré que algo ponga en peligro su seguridad. No interferiré en nada más». Luego, tiró la tarjeta de memoria rota que tenía en la mano y se alejó.
Vivian se quedó completamente boquiabierta.
De repente, le entró el pánico y le persiguió.
Sin embargo, los movimientos de Kurt fueron rápidos. Hace unos minutos, le estaba diciendo a Vivian que era su guardaespaldas. Pero cuando ella salió corriendo del estudio fotográfico, él no estaba en ninguna parte.
Es tan rápido como el Señor Frost y los demás.
«Kurt…»
Vivian, que sólo tenía dieciséis años, se paró en la entrada del estudio fotográfico y rompió a llorar.
Dwayne no esperaba que las cosas salieran así. Miró los trozos rotos de la tarjeta de memoria y la cámara conmocionado. Ya no se atrevía a actuar con presunción.
«Vivian, te enviaré a casa».
«Vete. Vete».
Vivian finalmente se enfadó.
Por alguna razón se sintió repentinamente molesta con Dwayne. Si no fuera por él, Kurt no habría confesado y seguirían llevándose bien como siempre.
Sin embargo, todo había cambiado.
Al pensar en eso, más lágrimas siguieron cayendo por sus mejillas mientras su corazón se dolía aún más.
Al mismo tiempo, recordó repentinamente los sucesos ocurridos durante el fin de curso, cuando tenía doce años. Kurt regresó de repente, pero luego se marchó porque ella le echó. Después, desapareció durante cuatro años.
Entonces papá lo envió a entrenar.
¿Y ahora?
Vivian tuvo una repentina revelación. Sintió una pizca de pánico e inmediatamente cogió un taxi para volver a casa.
Sin embargo, incluso después de regresar a Oceanic Estate, Kurt no volvió a aparecer desde aquel día.
Vivian se sintió tan miserable que le costaba incluso respirar.
Fue a preguntar a Jonathan, Devin y Sabrina si lo habían visto, pero todos le dijeron que no y que quizá había vuelto a la escuela.
Parece que ellos tampoco tienen idea de ello.
Después de todo, los planes de papá son siempre los más secretos. Incluso en su estado de inconsciencia, había planeado meticulosamente todos sus movimientos.
De repente, pensó en Kurt cuando iba a la escuela con ella cuando sólo tenía diez años.
También pensó en cómo él siempre aparecía de repente en las circunstancias más inesperadas en los últimos tres años. Nunca dejaba de mostrarse, incluso cuando ella estaba lejos.
Durante todo el día, Vivian se encerró en su habitación y siguió llorando.
Al día siguiente, por fin, volvía a asistir a las clases.
«Vivian, ¿Quieres que te recoja?»
Dwayne, que no había salido, volvió a llamar ese día para preguntarle si quería ir a la escuela con él.
«No. Adelante», se negó Vivian.
A continuación, se puso a preparar su equipaje.
Sabrina se enteró de la noticia y no pudo soportarla. Quiso enviarla a la escuela, pero Vivian negó con la cabeza.
«No, Tía Sabrina, ya soy mayor. Voy a cumplir diecisiete años después de octubre. Puedo ir sola».
Sabrina se quedó sin palabras.
Ese día, Vivian arrastró sola su equipaje hasta el aeropuerto.
El aeropuerto seguía tan animado como de costumbre. Sin embargo, cuando Vivian vio la multitud que había al llegar, se dio la vuelta de repente y empezó a buscar por la sala de espera.
Se supone que debe protegerme.
¿Está él también aquí?
De repente se dio cuenta de que Kurt podría estar en el aeropuerto observándola. Arrastró su equipaje y lo buscó sin siquiera recuperar su tarjeta de embarque.
«Kurt, sé que estás aquí. Por favor, sal. Me equivoqué y no voy a ser más terca. Te escucharé. ¿Quieres salir, por favor? Kurt!» gritó su nombre con fuerza, y su voz resonó en todo el aeropuerto.
Sin embargo, no había señales de Kurt, incluso después de que su voz se volviera ronca por los gritos. Pronto, las lágrimas rodaron por sus mejillas.
Tal vez ya no mostrara nada.
Desde aquel incidente, sólo estaría en lugares donde no pudiera verlo, como Calvin.
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